Quiénes son los dos ministros que no renunciaron luego del frustrado autogolpe de Pedro Castillo

El titular de la cartera de Trabajo, Alejandro Salas, fue el primero en anunciar su dimisión, luego de que el expresidente Pedro Castillo anunciara sorpresivamente el cierre del Congreso.

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Foto de archivo. Pedro Castillo intentó cerrar el Congreso, pero fue destituido. REUTERS/Sebastián Castañeda
Foto de archivo. Pedro Castillo intentó cerrar el Congreso, pero fue destituido. REUTERS/Sebastián Castañeda

Antes de que el nuevo gabinete cumpliera dos semanas, el presidente Pedro Castillo sorprendió a los peruanos al anunciar el cierre del Congreso precisamente el mismo día que se debatía un pedido de vacancia en su contra. Tan solo dos horas después de su decisión, 12 de sus ministros anunciaron su renuncia tras el quiebre institucional, incluyendo a la premier Betssy Chávez. No pudieron permanecer en sus cargos ni un mes.

Apenas dos ministros se quedaron. Lo que no se sabe es si apoyaban al presidente o solo decidieron guardar silencio. Lo cierto es que los titulares de las carteras de Agricultura, Juan Altamirano Quispe, y Producción, Eduardo Mora, no dieron un paso al costado.

La vicepresidenta Dina Boluarte asumió como jefa de Estado, luego de la accidentada detención del expresidente Pedro Castillo, en medio de su huida, quien ha sido catalogado como un dictador sin éxito y su medida calificada de torpe e inexplicable.

“¿Cómo así Pedro Castillo intentó dar este fallido golpe de Estado? Cada vez estaba más acorralado y hoy debía presentarse ante el Congreso, en donde podía ser vacado. Utilizó el mismo recurso que Fujimori hace tres décadas: disolver un Congreso, pero sin el mismo apoyo. (...) Los problemas si bien se acentuaron con Castillo no los creó él. En el Congreso se encuentra el complemento de este deterioro y hundimiento de la política peruana. Nadie tiene una solución, pero con ellos esto no se terminará. Dina Boluarte debe dar los primeros pasos para concluir este mandato de manera adelantada, con previa reforma política. Quizá allí alguna luz asome al final del túnel”, opinó sobre la situación el politólogo Fernando Tuesta Soldevilla a través de su cuenta de Twitter.

Un gabinete muy corto

Hace tan solo 15 días el premier Aníbal Torres, anunció su dimisión tras casi seis meses en el cargo bajo el argumento de “razones personales”. Con su salida, todos los integrantes del gabinete presentaron su renuncia.

Hoy, Torres hace de abogado de Pedro Castillo en medio de su complicada situación legal.

Pedro Castillo, el presidente que no llegó a cumplir 500 días.
Foto: Andina
Pedro Castillo, el presidente que no llegó a cumplir 500 días. Foto: Andina

Del total de integrantes del gabinete renunciante, solamente Roberto Sánchez, del Ministerio de Comercio Exterior y Turismo, ha tenido continuidad ininterrumpida en este año y medio del gobierno de Pedro Castillo.

Precisamente, los constantes cambios también perjudicaron las promesas de una transformación social con el que el expresidente ganó la presidencia a Keiko Fujimori, política que ha dedicado sus últimos años a defenderse de serias acusaciones de corrupción, petardear a los últimos gobiernos elegidos democráticamente y reavivar el “legado” del exdictador Alberto Fujimori.

Pese a este historial, la lideresa de Fuerza Popular no ha dudado en pronunciarse tras el cierre del Congreso.

“Pedro Castillo da un golpe desesperado porque sabía que le quedaban pocas horas en el poder. El Congreso debe seguir adelante con la vacancia y las Fuerzas Armadas tienen que respaldar el orden constitucional”, dijo la lideresa, investigada por presuntamente pertenecer a una organización criminal y por lavado de activos.

Hay nueva presidenta

Luego del intento de huida del ahora destituido Pedro Castillo, llegó hasta el Congreso la exvicepresidente de su gobierno, Dina Boluarte, quien asumió el rol de presidenta del país en este convulsionado momento.

Una de las principales impulsoras de la vacancia de Castillo, Keiko Fujimori, envió un mensaje sobre la asunción. “Saludo la juramentación de Dina Boluarte como primera presidenta del Perú. Deseo que su gestión se cumpla en respeto a la institucionalidad democrática, separación de poderes y por el desarrollo de nuestro país. Para ello podrá contar con el apoyo y respaldo de Fuerza Popular”, dijo.

La exvicepresidenta Dina Boluarte saluda a los legisladores luego de jurar su cargo como presidenta en el Congreso en Lima, Perú, el miércoles 7 de diciembre de 2022. Detrás está el presidente del Congreso, José Williams. El Congreso de Perú votó para destituir al presidente Pedro Castillo de su cargo el miércoles y reemplazarlo con la vicepresidenta poco después de que Castillo intentara disolver la Legislatura. (AP Foto/Guadalupe Pardo)
La exvicepresidenta Dina Boluarte saluda a los legisladores luego de jurar su cargo como presidenta en el Congreso en Lima, Perú, el miércoles 7 de diciembre de 2022. Detrás está el presidente del Congreso, José Williams. El Congreso de Perú votó para destituir al presidente Pedro Castillo de su cargo el miércoles y reemplazarlo con la vicepresidenta poco después de que Castillo intentara disolver la Legislatura. (AP Foto/Guadalupe Pardo)

Hay que recordar que Fuerza Popular se convirtió en una bancada desestabilizadora desde al menos el 2016, luego de que su lideresa perdiese las elecciones contra PPK y luego contra Castillo.

Ahora, especialistas y la ciudadanía piden a la nueva presidenta sentar las bases para reformas políticas que permitan la realización de nuevas elecciones.

“La presidenta Boluarte buscará gobernar hasta 2026, pero no tiene bancada ni aliados claros. Habrá que ver quiénes conforman ese gabinete de “todas las sangres”, si realmente se le concede una tregua y si sabe usarla para aportar a la estabilidad y el diálogo”, señaló sobre su mandato la politóloga Paula Távara.

Es un momento de mucha crispación en el Perú y con el asomo de tendencias radicales tanto de izquierda y derecha, el panorama asoma sombrío tras este histórico 7 de diciembre en el que ocurrieron un golpe de Estado, una vacancia presidencial y la llegada de una presidenta. Todo en menos de un día.

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