Las nuevas subvariantes de ómicron BQ.1 y XBB, apodadas sin respaldo científico como “Perro del infierno” y “La pesadilla”, así como la BQ.1.1 o “Cerberus” y la DJ.1 (originada en el Perú), son las causantes de la quinta ola en el país, informó el Instituto Nacional de Salud (INS), a través de su equipo de Vigilancia Genómica.
La institución detalló que, de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS), BQ.1 y BQ.1.1 son sublinajes de BA.5, con mutaciones adicionales, que han sido detectados en 65 países del mundo y “constituyen la mayor parte de las muestras en los Estados Unidos”.
“Es posible que sus mutaciones les confieran una ventaja al tener mayor escape inmune; pero no hay datos que sugieran una mayor severidad. La OMS dice que no debería tener mayor impacto sobre la protección de las vacunas para enfermedad severa”, precisó el INS.
Respecto a la presencia del linaje XBB, el instituto señaló que son producto de la recombinación de dos sublinajes de la ómicron: BA.2.10.1 y BA.2.75.
“Este grupo ha cobrado importancia epidemiológica a nivel mundial debido a que han causado un incremento significativo de casos en el sudeste asiático (principalmente Singapur, Bangladesh e India) y presentan una mayor tasa de reinfecciones”, advirtió.
El INS descartó que este sublinaje haya ocasionado un incremento de muertes y hospitalizaciones, pero remarcó que está presente en al menos 42 países, incluyendo Chile y Argentina.
“Por otro lado, se ha observado que los sueros de pacientes previamente infectados no logran neutralizar a estos linajes, lo que implica una gran capacidad de evasión inmune de XBB”, acotó la institución.
Cadena de tranmisión
En el caso de la DJ.1, el INS detalló que la mayoría de casos positivos de coronavirus por esta subvariante corresponden a Iquitos, pero también con una presencia importante en Colombia, Chile, y Estados Unidos.
“Este linaje desciende del BA.5.1.25, el cual viene representando un porcentaje importante de las muestras secuenciadas por el INS, desde fines de setiembre del 2022″, señaló.
De acuerdo al INS, “aún no se tiene evidencia” de que este linaje produce mayor escape inmune ni se ha observado “asociación” con un aumento de casos severos.
“Ante la aparición de nuevos linajes descendientes de ómicron, debemos evitar continuar con la cadena de transmisión de COVID-19″, indicó la institución.
Reiteró la importancia de completar el esquema de vacunación contra el COVID-19 e incentivar las medidas preventivas básicas, como mantener los ambientes ventilados y usar mascarilla si tenemos síntomas respiratorios.
“El Instituto Nacional de Salud continuará con la vigilancia genómica del SARS-CoV-2, reportando semanalmente los resultados de la misma”, informó.
Sumadas dan el 65%
En una conferencia de prensa del Ministerio de Salud, Víctor Suárez, jefe del INS, reiteró que esta quinta ola se produce debido a los sublinajes descendientes de la subvariante BA.5 denominadas XBB, BQ.1 y BQ1.1, además de la DJ.1.
“Sumadas entre ellas dan el 65% del total de las muestras que son secuenciadas, son el factor importante que está influyendo en el actual incremento de casos”, manifestó.
Expertos en salud de diversas partes concluyeron que la ómicron sigue siendo la variante “dominante”, que circula a nivel mundial y representa casi “todas la secuencias”.
“Si bien estamos observando una gran diversidad genética de sublinajes, actualmente muestran resultados clínicos similares, pero con diferencias en el potencial de escape inmunológico”, comentaron.
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