Desde temprana edad, Luis Negreiros Vega logró hacerse conocido por su determinación para lograr cambios radicales. Su objetivo era lograr la igualdad de los trabajadores y que obtengan los beneficios que ameritaban. Nació en Pomabamba, Ancash, el 21 de junio de 1908, para luego radicar en el Callao. Apenas vivió 42 años y todo acabó cuando Manuel Odría Amoretti tomó a la fuerza el gobierno del Perú y se hizo enemigo del partido político APRA.
En 1931 ya trabajaba en el tribunal marítimo con el grado de cabo y participó en la rebelión policial comandada por el general Pedro Pablo Martínez contra el dictador Luis Sánchez Cerro. A mitad del año 1932 se convirtió en un activo combatiente de la revolución de Huaraz.
Fue lugarteniente del mayor Raúl López Mindreau y de Carlos Phillips, y en 1935 fue detenido en el penal “El Sexto” por realizar labores de adoctrinamiento en la Policía. Allí creó una institución denominada “PRO CULTURA”, cuya función era elevar el nivel de los guardias, capacitándolos y organizándolos. La denuncia se debió a que detrás había una bien diseñada labor catequista de alto contenido aprista.
Negreiros era un estudiante autodidacta e incansable explorador del conocimiento que vertían viejos líderes que se encontraban presos junto a él, y que fortalecieron su espíritu y marcarían su vida. Salió en libertad en 1938. Ese mismo año ingresó a trabajar como motorista en el tranvía eléctrico, donde su labor sindical lo llevaría a convertirse en secretario general de la Federación de Motoristas Conductores y Anexos.
Después crearía la Escuela Sindical ‘Salomón Ponce’ (en memoria del obrero tranviario asesinado el 23 de mayo de 1923), que sirvió de modelo para la docena de escuelas que funcionaron en todo Lima. Así, Negreiros demostraba que el conocimiento era la única arma para lograr el desarrollo y elevar el nivel de vida de los peruanos.
El 1 de mayo de 1944, junto con Arturo Sabroso Montoya y ante la tumba de José Carlos Mariátegui, pronunció un discurso breve y fulminante con el que dejó fundada la Confederación de Trabajadores del Perú (CTP), alcanzando la secretaría general. Negreiros era colaborador inmediato de Arturo Sabroso en la CTP, con quien participó en los congresos sindicales de Filadelfia y Santiago de Chile entre 1940 y 1944.
Como secretario de la CTP reorganizó la Federación de Trabajadores en Petróleos y Anexos del Perú con los siguientes sindicatos: Sindicato Obrero de Talara, Sindicato de Empleados de Talara, Sindicato Único de Negritos, Sindicato de Empleados de Lobitos y Sindicato Único del Callao, Mollendo, Salaverry y Pimentel.
Además, luego de una lucha contra la International Petroleum Company, logró, entre otras conquistas, una serie de beneficios para los trabajadores de esta empresa, destacando:
1. Salario mínimo para los obreros adultos y jóvenes
2. Pago de sobretiempo
3. Bonificaciones dominicales y por guardia nocturna.
4. Que la empresa proporcione becas universitarias y técnicas.
5. Cursos de capacitación dictados por expertos extranjeros.
6. Servicio médico gratuito para los trabajadores y familiares.
7. Que la empresa presente un plan de jubilación de empleados y obreros. Esta conquista social no estaba reconocida por las leyes de trabajo peruanas, solo un año después se dictó la ley de jubilación.
8. La declaratoria de Tránsito Libre por todas las carreteras que la empresa tenía construidas en la zona petrolera.
Organizó a los obreros y a los campesinos en todo el Perú. Su liderazgo alcanzó el plano internacional, y por ese hecho fue miembro activo de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), ayudando a organizar y a consolidar la Confederación Interamericana de los Trabajadores (CIT), que años después se convirtió en la ORIT.
Por qué y cómo murió Luis Negreiros
Manuel Odría se levantó el 27 de octubre de 1948 contra el presidente elegido constitucionalmente, José Luis Bustamante y Rivero, y lo sacó del poder en nombre de su llamada “revolución restauradora”. Desde entonces, encabezó una junta militar con la que dirigió los destinos de nuestra patria hasta 1950; cuando convocó a elecciones fraudulentas, y las ganó al ser el único candidato.
Se hizo enemigo del APRA y buscó sacar a cualquiera de sus partidarios del poder. Hubo una persecución contra el partido, provocando, por ejemplo, que el líder Víctor Raúl Haya de la Torre, solicitara asilo el 3 de enero de 1949 a la embajada de Colombia, ante el peligro inminente de ser asesinado.
Antes, en 1948, Arturo Sabroso Montoya cayó prisionero y Negreiros Vega asumió la Secretaría general de la CTP, al mismo tiempo compartía la Secretaría General Colegiada del Comando Nacional de Acción del PAP junto con Carlos Manuel Cox y Luis Felipe de las Casas. Cuando Cox y De las Casas cayeron, Negreiros asumió la Secretaria General del APRA.
El 23 de marzo de 1950, Zenón Noriega y Esparza Zañartu cumplieron con su plan de asesinarlo. Esa tarde, a poco de cumplir 42 años, fue citado a una reunión en la esquina de 28 de Julio y Petit Thouars. Ni bien bajó de su auto, rompió el fuego una metralleta: Negreiros cayó con la cabeza y cuello acribillados a balazos disparados por la espalda. La policía de la época nunca investigó el crimen.
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