Este jueves, la ciudad del Cusco continúa paralizada por el paro convocado por los agricultores y otros gremios debido al alza del costo de vida. Los manifestantes han restringido la circulación de vehículos en la ciudad y varios negocios permanecen cerrados. Sin embargo, el sector con más pérdidas es el del turismo ya que el traslado de visitantes a los principales atractivos de esta zona del país es menor.
A esto se suma el anuncio de una huelga indefinida de la Dirección Desconcentrada de Turismo de Cusco. Al respecto, el presidente de la Asociación Peruana de Operadores de Turismo Receptivo e Interno (Apotur), exige que los recursos de la ciudadela se queden en la región.
El representante de Apotur, Enrique Quiñonez, precisó que este paro podría significar pérdidas de hasta USD2 millones diarios si se toma en cuenta el impacto en otros atractivos. También, cuestionó que no se están vendiendo las entradas para visitar Machu Picchu en 2023.
“La ministra Betssy Chávez, que fue la que autorizó la huelga de controladores, ahora está cerrando las entradas para boicotear al sector”, mencionó.
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Turismo afectado
El concesionario Ferrocarril Trasandino y PeruRail informaron de la suspensión de operaciones con destino a Machu Picchu debido al paro de transportistas de carga pesada y agricultores que se viene llevando a cabo.
En tanto, el director general de Casa Andina, Juan Stoessel, indicó que las pérdidas pueden sumar alrededor de USD1 millón. “El dinero es el menor de los problemas, la imagen tiene un efecto multiplicador”, manifestó.
Añadió que a esto se suma la “corrupción en la venta de entradas” para la ciudadela que se da en Machu Picchu Pueblo, que ha creado “un mercadillo ambulante”. “Este gobierno ha despedido o reubicado gente del Ministerio de Cultura capaz. Están hundiendo al turismo”, añadió.
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Anuncio de huelga
A través de una entrevista con la agencia internacional de noticias EFE, el representante de Apotur se pronunció sobre la situación económica actual que atraviesan en una de las zonas turísticas más reconocidas del mundo.
“Estamos exigiendo que los recursos de la ciudadela se queden en la región. Sucede que hace unos meses el Ministerio de Economía y Finanzas dictaminó una nueva norma para que los bienes del Machu Picchu pasen al erario nacional, al Tesoro Público”, dijo.
Quiñones advirtió que a pesar de las promesas que realizó el Ejecutivo sobre excluir al mayor reclamo turístico de Perú del decreto supremo, este no ha sido derogado ni modificado.
Además, anunció que el sindicato entrará a una huelga indefinida a partir del jueves 28 de noviembre.
“Advertimos que la huelga no cesará hasta que la norma sea retirada y los recursos generados por el yacimiento se queden en la región”, expresó asegurando que cuentan con el respaldo de todo el sindicato.
“El sindicato reclama que, si los recursos obtenidos por la ciudadela inca se van al Ejecutivo, y luego este hace un reparto del presupuesto entre otros lugares turísticos del país, no alcanzará para llevar a cabo las labores de conservación e investigación que Machu Picchu necesita”, señaló.
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