Participación laboral femenina se estanca en la industria minera en el Perú

El mercado laboral de la industria minera en el Perú todavía presenta enormes diferencias en cuanto a equidad de género. Según el informe “Mujeres & minería del futuro”, con datos extraídos del Ministerio de Energía y Minas (Minem), señala que solo el 6% de las trabajadoras en el sector minero en el país son mujeres.

Esta proporción se ha mantenido constante desde el inicio de la pandemia del covid-19 hasta la actualidad, lo cual ha llevado a un estancamiento sobre la participación de la mujer en la industria minera peruana, de acuerdo al estudio elaborado por Women in Mining - Wim Perú.

Sin embargo, si se compara con su par como Chile, en dicho país se ha logrado aumentar la participación de la mujer en el sector minero de un 8% a un 15% en los últimos años.

Además, este diagnóstico sobre la situación de la mujer en la industria minera en el Perú, enfocado en mediana y gran minería, revela que también el 6% es la brecha salarial bruta entre hombres y mujeres en el sector.

De acuerdo al reporte de empleo minero del Minem, las mujeres ganan S/ 4.000 menos que sus pares varones en promedio anual. Sin embargo, hay mayores brechas salariales cuando se separan por grupos etarios.

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“De cada 100 trabajadores en promedio solamente tenemos seis mujeres en esta industria. Si bien el empleo en el sector minero ha aumentado un 30%, pues tan solo ha crecido en el caso de las mujeres en 1%”, dijo Graciela Arrieta, presidenta de Women in Mining - Wim Perú, a Infobae.

Asimismo, la ejecutiva indicó lo que más le ha llamado la atención del estudio es que hay brechas salariales de más del 40% en mujeres de mayor edad. “Las mujeres de generaciones más antiguas ven más impactadas su brecha salarial, pero, todo lo contrario, sucede con las nuevas generaciones que han bajado la brecha”, anotó.

En cuanto a los puestos de toma decisión, el estudio refiere que las mujeres están participando un 22% en puestos de administración y solo un 11% en puestos gerenciales; mientras que un solo un 5% participa en operaciones generales y un 4% como personal de planta.

“Esto quiere decir que la brecha se acentúa aún más en puestos que tienen que ver con el campo la operatividad propiamente de la industria”, comentó la representante de Wim Perú.

En relación a la participación laboral de la mujer en la minería a gran escala según etapa minera, hay mayor participación laboral femenina en la etapa de exploración (10% en promedio), menor en la explotación (6% en promedio), y una tendencia creciente en la etapa de cierre (6% a inicios del 2020, 12% en julio del 2021).

Solo el 30% de matriculados y egresados de carreras mineras en el nivel de pregrado son mujeres. Además, en promedio, entre 2012 y el 2021, de 10 becarios de programas STEM (Ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas), cuatro solo son mujeres.

“Esto quiere decir que solo un tercio de todas las mujeres con educación superior son graduadas en carreras vinculadas a la ingeniería y las matemáticas. Ante esta cifra, existe el reto que desde las escuelas se promueva una cantera de mujeres estudiantes que lleguen a ser profesionales mineras”, enfatizó Arrieta.

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El estudio de Wim Perú también señala que un 30% de participación laboral femenina puede aumentar la rentabilidad de la empresa minera hasta en un 15%, lo cual hace fundamental su rol en esta industria.

En relación al acoso sexual y hostigamiento en empresas del sector minero, la presidenta de Wim Perú comentó que es un tema que se habla muy poco, pero que existe, por lo cual se tienen que hacer esfuerzos para combatirlos.

Ante ello, Arrieta reveló que el 30% de las mujeres ha reportado haber sufrido una situación de acoso, principalmente trabajadoras en el rango de edades desde los 25 a 34 años que laboran en minas. “En el sector minero, sin duda, existe acoso y es un factor que además puede afectar el rendimiento de las mujeres dentro de la industria”, señaló la especialista.

En el Perú existen normas que establecen los mecanismos a través del cual las empresas tienen que crear un comité que pueda atender estas situaciones de acoso, también cuentan con líneas éticas, canales de comunicación y canales de denuncia.

“De hecho que tenemos que responder ante una situación de acoso y sancionar como corresponde, pero sobre todo un factor interesante es lo que tiene que ver con la prevención. Es así que las empresas tienen que realizar charlas de prevención anti-acoso y de cómo identificar sesgos inconscientes de los hombres”, dijo Arrieta.

Asimismo, la representante de Wim sostuvo que el acoso es parte de esas creencias de que el hombre puede ocupar cuando cree que tiene un rol mucho mayor que la mujer y en nivel de posicionamiento que pueda sentir más poder sobre ella, lo cual se tiene que erradicar desde la raíz.

“Entonces un tema importante es trabajar en temas de prevención, las mujeres tienen que saber identificar en qué momento ellas estarían en una situación de acoso y otro también trabajar la parte de las herramientas de la empresa que va a poner a disposición para la prevención, seguimiento y sanción”, acotó la especialista.

Sin embargo, otro problema también que se ha identificado sustantivamente, es que sigue el avance del machismo, el cual se ha extendido dentro de la industria minera en el país.

“Hay una participación laboral que se ha concebido sobre la participación de la mujer como negativa, ya que hay muchos mitos y sesgos que se ha podido identificar. Por ejemplo, hay hombres que creen que la mina es una mujer y que se pone celosa cuando entra una mujer, entonces concluyen que las mujeres no deberían entrar dentro de las operaciones”, comentó la presidenta de Wim Perú.

También Arrieta señaló que, si bien no estamos en una realidad de hace 20 años, todavía quedan secuelas de ello, lo cual ha dado pie a que menos mujeres se hayan interesado en una industria minera que siempre lo han visto mucho más masculino, vinculado a la fuerza, y no lo ven como una nueva oportunidad de desarrollo.

Uno de los objetivos que tiene Wim Perú es que se quiere mover la aguja de ese 6% de estancamiento de la participación de la mujer en la industria minera, para lo cual, ya se han establecido metas concretas y claras para que en el 2030 se comience a cerrar esa brecha de género.

“En primer lugar, si queremos más mujeres participen en el sector minero, la industria tiene que continuar y seguir desarrollándose nuevos proyectos para que brinde más oportunidades de trabajo. Si Chile lo ha logrado, por qué nosotros, ¿no? Lo que ellos han hecho bien para reducir la brecha de equidad de género es que han tenido un trabajo articulado con el Estado, el sector privado y la sociedad civil, así como con organizaciones como Wim Chile”, expresó Arrieta.

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Asimismo, la presidenta de Wim Perú dijo que para poder impactar en la mayor participación de la mujer dentro de la industria minera se necesita de la articulación del sector público, sector privado, la sociedad civil y la academia, pilares fundamentales para construir un mejor futuro.

“Creo que ya hemos logrado poner sobre la mesa una discusión importante en un sector relevante para el país como es la minería. Creo que lo venimos trabajando, lo hacemos de una manera muy propositiva, con labores muy de la mano de la industria privada”, precisó Arrieta.

También, la ejecutiva comentó que buscan promover temas que tengan que ver con mesas de trabajo, normas específicas en materia de equidad de género. Además, buscan crear un ranking de las empresas que vienen liderando estos temas.

“Estamos trabajando arduamente en un manual de buenas prácticas y lineamientos de equidad de género. Esto ya lo vienen haciendo algunas empresas, pero tiene que convertirse en un efecto dominó para que más organizaciones lo hagan para combatir el hostigamiento sexual y laboral”, puntualizó la presidenta de Wim Perú.

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