Desde el año 2019 hasta el 2021, la ciudad de Chachapoyas, ubicada en la selva de Perú, recibió a más de 150 mil turistas, entre peruanos y extranjeros, para visitar sus diferentes atractivos. La mayoría de visitantes estaba interesada en conocer una de las fortalezas más importantes del país: el complejo arqueológico de Kuélap. Sin embargo, en abril de este año la situación cambió. Uno de los muros de la ciudadela se derrumbó y ocasionó el cierre inmediato de la ciudadela. Medio año después, la fortaleza continúa cerrada.
Durante todo este tiempo, comerciantes de la zona, dueños de hospedajes y agencias de turismo han dejado de vender sus productos y servicios. Muchos de ellos también han reducido su capacidad operativa y precios. “No estamos operando al 100% en comparación a la capacidad que se atendía antes de la pandemia. En nuestro hospedaje teníamos 25 habitaciones, ahora tenemos 8 habitaciones. Sí tenemos nuestros clientes, pero a comparación de años pasados, estamos operando el 20%”, comentó a Infobae José Llaja, dueño del hospedaje Chachapoyas Backpackers Boutique.
El también miembro de la Cámara Regional de Turismo afirmó que el derrumbe de Kuélap ha perjudicado a todos los actores involucrados en el turismo de la zona. “Esta situación nos ha afectado a todos; hoteles, restaurantes, agencias de viajes, transporte turístico, los artesanos, los orientadores, los días de turismo. Muchos tuvieron que buscar otros trabajos”, contó.
Además del hospedaje, José Llaja cuenta con la agencia de viajes Turismo Explorer, el cual también ha sido afectada por el cierre de Kuélap. No obstante, el empresario ha optado por promocionar las visitas guiadas a la catarata de Gocta y el complejo arqueológico de Macro como una forma complementaria de mostrar la ciudad. “De esa manera el cliente tiene una idea clara de sobre la arquitectura de Chachapoyas”, afirmó. Pero, aún así, las ventas permanecen en niveles bajos.
Llaja mencionó que semanas atrás, ante el prolongado cierre de la fortaleza, el Ministerio de Cultura les ofreció la posibilidad de visitar el atractivo turístico junto a los visitantes, pero solo de forma externa. “Seguimos ofreciendo el tour a Kuélap, pero de una manera diferente. A través del sistema de telecabina subimos, caminamos y llegamos a 100 metros de la ciudadela. Damos una explicación del monumento y luego regresamos a la comunidad de Tingo a almorzar. De allí visitamos el complejo arqueológico de Macro”, indicó.
Según el empresario, esta modificación en las visitas es comunicada previamente a los turistas. “El cliente se va más tranquilo porque viene con la información veraz, sabe qué es lo que va a ver. No vas a poder ingresar a la ciudadela, pero sí vas a poder utilizar el sistema de telecabinas, que es el medio de transporte, y vas a poder visitar el otro complejo arqueológico”, agregó.
“El 80% canceló su viaje”
Tras el derrumbe de Kuélap, los turistas se vieron impedidos de acudir a la fortaleza, lo cual perjudicó a las agencias que habían planificado la visita hacia el complejo arqueológico junto a sus clientes. Según Alan Jáuregui, gerente del área de venta de la empresa Kuélap Tours, el 80% de los visitantes que compraron un paquete de viaje a este atractivo turístico cancelaron su paquete de viaje.
“Por cuestiones de seguridad de los turistas, así sea el cierre temporal o no, con la nueva disposición de poder llegar solo hasta los exteriores muchas personas han visto convenientes en su visita y han decidido cancelar sus viajes que tenían ya programados con nosotros. Del 100%, un 80% lo cancelaron y otro lo postergaron hasta una nueva fecha, hasta la reapertura de ciudadela”, acotó a Infobae.
“En realidad nosotros tenemos mucho más atractivos turísticos, no solamente Kuélap, pero este es el bastión cultural. Lo que la gente más busca es este complejo arqueológico. Es uno de nuestros centros turísticos principales. También quieren conocer el teleférico, que está funcionando un poquito y por ahí ha impulsado nuevamente el turismo. Sin el teleférico sería fatal”, añadió.
Jáuregui dijo que las personas continúan preguntando por Kuélap y cuando les comentan la nueva forma de visitar la fortaleza solo el 20% de los interesados aceptan los paquetes de viaje. Los turistas interesados en la ciudadela prefieren esperar hasta su reapertura para visitarla.
De acuerdo al funcionario, la agencia de viajes ha reducido sus ventas en aproximadamente 60%. El mayor porcentaje de ventas que acumula es 40% en comparación a años pasados. Según indicó, las pérdidas en la empresa ascienden a más de 84 mil soles durante estos últimos siete meses. La crisis económica que atravesó la agencia también afectó al personal que trabajaba allí, pues se tuvo que realizar una reducción de personal. “Con esto que está sucediendo actualmente es imposible mantener el 100% del personal”, señaló.
El empresario refirió que los comerciantes de la zona no confían en que el Estado trabajará para la pronta apertura de Kuélap y han pensado en acudir a instancias internacionales, pues consideran que la situación del turismo en Chachapoyas es crítica.
“Lo que ha generado la inacción del Estado acá, al menos en el sector turístico de Amazonas, es mucha inestabilidad. Nosotros no podemos trabajar con normalidad. Antes del derrumbe estuvimos con el tema del terremoto y se destruyeron las carreteras. La gente estuvo aislada bastante tiempo, no había manera de llegar a otro destino. Luego vino el tema del cierre del aeropuerto de Jaén, que se cerró por temas de mantenimiento. Después enfrentamos la pandemia y eso generó el cierre de muchas empresas”, aseguró.
Las protestas en la zona también perjudican a los comercios. Jáuregui afirmó que el cierre de espacios públicos impide que las agencias de viajes puedan movilizarse con normalidad y atender a los clientes, por lo que también afecta la prestación de servicios. Por ello, recalcó que es necesario que las autoridades puedan atender las demandas del sector turismo en Chachapoyas.
Medidas en Kuélap
A inicios de noviembre, el Frente de Defensa de Anexo Kuélap se reunió en una mesa de diálogo organizada por el Ministerio de Cultura para coordinar las decisiones a tomar para la recuperación del complejo arqueológico de Kuélap, según un comunicado de la organización. Sin embargo, esta rechazó la intervención del Mincul y anunció que no permitirán la apertura de Kuélap con las condiciones que establece el Estado, las cuales involucra a actores que consideran que no representa a la comunidad.
“Consideramos que nuestro petitorio fue instrumentalizado con una mesa de diálogo en la que han querido absorber a la población con la intervención de otros sectores y gremios sociales que no nos representan [...] dejamos en claro que la población del axeno Kuélap en coordinación con la asociación de mujeres de la caballeriza no permitiremos la apertura para el uso social y turístico del complejo arqueológico Kuélap ni la instalación de plataformas con las que pretenden reestablecer las rutas de visita sabiendo el Estado del deterioro en el que se encuentran las estructuras físicas de la fortaleza”, menciona el comunicado.
Infobae conversó con el electo alcalde de la comunidad de Tingo, Ivan Bardales, acerca de las acciones que los ciudadanos de la zona tomarán ante el permanente cierre de Kuélap. El funcionario detalló que el principal objetivo con estas medidas es el reconocimiento de la autonomía territorial de Kuélap.
“Lo que buscamos es que se reconozca esa autonomía territorial. También hacemos un llamado para la rápida intervención, restauración y la conservación de su patrimonio cultural. Tenemos otras demandas como es, por ejemplo, la creación de un museo en el distrito. También el saneamiento de todo el patrimonio. Hay muchos problemas sociales con la población, pero eso lo atienden otros sectores. Ahorita estamos priorizando nuestro patrimonio”, aseveró.
Acciones inmediatas
El cierre de Kuélap ha afectado en gran medida las actividades económicas de la zona. Para Carlos Bernuy, director de la Revista Infotur Latam, es necesario una rápida intervención del Estado ante el derrumbe de la fortaleza de Kuélap, pues no solo está comprometido la crisis económica que enfrentan los comerciantes, sino también el turismo internacional. “Las personas que viajan a Chachapoyas es para visitar la fortaleza de Kuélap, casi el 90% de ellos. Por eso es que su cierre durante un tiempo tan prolongado afecta demasiado”, declaró.
“No es suficiente que el Estado haya habilitado la visita externa a Kuélap. Las personas que invierten en este viaje quieren conocer la fortaleza, no una parte de ella. Es como Cusco, las personas que viajan a Cusco lo hacen porque quieren recorrer Machu Picchu, no quieren verlo de afuera”, precisó.
Según Bernuy, las autoridades deben de brindarle el mantenimiento correspondiente a todos los complejos arqueológicos que existen a nivel nacional para evitar situaciones como las que atraviesa Kuélap en la actualidad. “Esto perjudica a la ciudad, pero también se ve afectada nuestra imagen ante los turistas extranjeros que quieren conocer partes del país y no pueden”, recalcó.
“Es increíble que hayan tantos meses y que no se haya podido restablecer el ingreso a la fortaleza. Nuestros ingresos por turismo representan una cantidad importante. ¿Estamos cuidando nuestros atractivos? ¿Estamos cuidando a las empresas que conforman el sector turismo? Esta situación perjudica al sector hotelero, pequeñas empresas, agencias, restaurantes. Los servicios en la zona han disminuido y eso afecta”, enfatizó.
Kuélap, el más visitado
Antes de la pandemia, la fortaleza de Kuélap recibía más de 100 mil turistas por año, según un reporte del Ministerio de Cultura. Sin embargo, la crisis en la zona apareció tras la llegada de la pandemia. En el año 2020, las visitas se redujeron en 42,7% en comparación al año anterior. Con el paso de la pandemia, en el 2021, el panorama mejoró y las visitas se incrementaron. En dicho año la ciudadela recibió más de 59 mil visitas.
En comparación a las cataratas de Gocta, la ciudadela de Kuélap continúa siendo el atractivo turístico más preferido por los viajeros. Durante el año 2021, las cataratas recibieron un total de 26 mil 703 visitantes y Kuélap aproximadamente 59 mil 613 turistas..
El 2021 también representó una mejoría para la ciudad de Chachapoyas. Tras una considerable disminución de visitas a causa de la pandemia, en dicho año la llegada de pasajeros incrementó hasta en un 141,5% con respecto al 2020. La mayor cantidad de pasajeros que llegó al aeropuerto de Chachapoyas se registró en octubre, agosto y julio.
Aunque en el año 2021 los indicadores de turismo en Chachapoyas han mejorado después tras la llegada del COVID-19, no se alcanzan los niveles de visitas durante el período pre pandemia.
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