Este 6 de noviembre, el gobierno de Pedro Castillo designó a Aurelio Orellana Vicuña como el representante del Estado ante el Consejo Directivo del Seguro Social de Salud (EsSalud) tras la renuncia de Gino Dávila Herrera. La resolución publicada detalla que desempeñará el cargo de presidente ejecutivo.
Como se recuerda Dávila dio un paso al costado luego que el presidente de la República, Pedro Castillo, fuera ‘pifiado’ cuando asistió al aniversario del hospital Rebagliati. Ante ello, la renuncia fue aceptada por el mandatario.
De acuerdo con el documento se detalla que Orellana Vicuña cumple con el perfil profesional para asumir el cargo. En este sentido, se registra la firma del jefe de Estado y el ministro de Trabajo y Promoción del Empleo, Alejandro Salas Zegarra.
En ese sentido, desde el último sábado 5 de noviembre de 2022, las funciones de este cargo de EsSalud fueron asumidas por Mario Carhuapoma Yance, quien en ese momento tenía el cargo de vicepresidente del Consejo Directivo
Salida de Dávila
Gino Dávila renunció al cargo de presidente ejecutivo el viernes 4 de noviembre. Esta fue aceptada al día siguiente por el Ejecutivo a través de la se lee en la Resolución Suprema Nº 020-2022-TR publicada en diario El Peruano.
“Aceptar, a partir del 5 de noviembre de 2022, la renuncia formulada por el señor Gino José Carlos Dávila Herrera como representante del Estado ante el Consejo Directivo del Seguro Social de Salud – EsSalud, así como al cargo de presidente ejecutivo, dándosele las gracias por los servicios prestados”, se lee en el documento.
Dávila Herrera estuvo al frente de la presidencia casi cuatro meses, dado que asumió el cargo el 13 de julio de este año. Asimismo, se convirtió en reemplazo de Alegre Fonseca, quien denunció que falsificaron su firma en una carta de renuncia, porque tampoco se encontraba enterado.
El presidente de la República no fue recibido el último jueves 3 de noviembre. Los pacientes del hospital Edgardo Rebagliati vociferaban diferentes frases contra el jefe de Estado, dado que lo consideran como una persona ‘no grata’ dentro del nosocomio. Panorama que le habría gustado mucho al mandatario, por lo que Dávila decidió renunciar.
Los pacientes se quejaban de la mala atención, así como también la falta de equipos especializados para los exámenes. “No lo queremos, queremos que se largue”, “No hay buena atención”, entre otras frases durante el aniversario del nosocomio.
SEGUIR LEYENDO