Dictan 18 meses de prisión preventiva para dos implicados en red de trata de menores en penal de Huacho

Kelvin Almarza y Fannyber Pérez, ambos de nacionalidad venezolana, cumplirán prisión provisional por la presunta comisión del tráfico sexual en agravio siete menores de edad, también venezolanas.

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INPE se pronuncia por escándalo sexual en penal de Huacho. (RPP)

A pedido del Ministerio Público, el Poder Judicial impuso este miércoles 18 meses de prisión preventiva contra dos acusados de explotar sexualmente a menores en el interior del penal de Carquín, en Huacho, como parte de una red de trata en la que operaba la banda ‘Los tratantes del Norte Chico’.

Se trata de Kelvin Rafael Almarza Vásquez y Fannyber Pérez Vásquez, ambos de nacionalidad venezolana, quienes cumplirán prisión provisional por la presunta comisión del tráfico sexual en agravio siete menores de edad, también venezolanas.

En una audiencia judicial, el fiscal José Antonio Silva Vidal, de la de la Fiscalía Especializada contra la Criminalidad Organizada de Huaura, sustentó que ‘Los tratantes del Norte Chico’ retenían a las menores “como si las cuidaran”.

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Sin embargo, las obligaban a ir al centro penitenciario, donde eran explotadas sexualmente tras “pasar como si fueran pareja de los reclusos”, detalló la Fiscalía en un comunicado.

Hasta el momento, la investigación ha dejado a siete detenidos. En este grupo solo hay una presunta tratante, Fannyber Pérez, quien fue capturada junto a su compatriota Kelvin Almarza en el prostíbulo El Rosal.

Los otros cinco son trabajadores del mencionado prostíbulo, “aunque las investigaciones preliminares no establecieron vínculo con los procesados ni con las menores de edad”, según el Ministerio Público.

La Fiscalía precisó que las víctimas tenían cédulas de identidad adulteradas en las que se identificaban como mayores de edad. “Aunque llegaron al penal por su propia cuenta e ingresaron con dichos documentos, las pesquisas arrojaron que eran direccionadas por sus compatriotas”, siguió el comunicado.

En tanto, el Instituto Nacional Penitenciario (INPE) de Huacho ha separado del cargo a tres de sus trabajadores por permitir el ingreso las víctimas, además se les ha iniciado un proceso administrativo.

Desarticulación

Según un informe de Domingo al Día, los indicios de la explotación sexual se descubrieron hace un mes, durante la intervención de dos establecimientos nocturnos en Huacho. Ocho menores de edad y una joven de 19 años, supuestas víctimas de explotación sexual, fueron rescatadas por los efectivos policiales.

En esas diligencias se identificó que las víctimas llevaban sellos y números en el cuerpo, los mismos que son colocados al momento de ingresar al penal de Carquín como visitante.

La difusión del reportaje produjo que el INPE iniciara una investigación interna. Además, anunció que, por seguridad y mientras duren las pesquisas, ha procedido con el aislamiento de tres internos de nacionalidad venezolana que serían familiares de las menores, y que estarían involucrados en el posible hecho delictivo.

“De acuerdo con el Sistema Biométrico de Visitas del penal, la presuntas menores de edad se encuentran registradas como personas adultas, según sus cédulas de identificación; por lo cual se ha pedido al Ministerio Público y Policía Nacional del Perú, realizar una investigación exhaustiva y denunciar a los que resulten responsables, si fuera el caso”, detalló la institución.

En diálogo con RPP Noticias, Omar Méndez, jefe del Inpe, sostuvo que todavía no tienen indicios que señalen que el personal penitenciario esté “coludido”.

Sin embargo, el coronel PNP Manuel Díaz Barco indicó que “puede haber implicancia en el favorecimiento del ingreso” de las menores. “Pero en el peor de los casos podrían estar implicados como clientes, como lo están los internos del penal”, refirió.

Asimismo, los tres internos de la cárcel que recibieron las visitas de las menores fueron separados preventivamente y se les abrió una investigación disciplinaria.

El coronel Manuel Díaz Barco, de la División Contra la Trata de Personas de la Policía Nacional, declaró en el reportaje que encontraron a las menores y una joven de 19 años durante la intervención de un inmueble atribuido a esa mafia.

“Se advierte que las menores presentaban sellos en los antebrazos de registros de los ingresos al penal. Se determina en la investigación que dos veces por semana eran conducidas al penal para ser explotadas sexualmente”, explicó Díaz.

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