La salud de Luhana, la niña de doce años que cayó del cuarto piso de su colegio Saco Oliveros, en Salamanca, como consecuencia de un supuesto caso de bullying, ya se encuentra en una unidad de cuidados intensivos, tiene múltiples fracturas y requiere donantes de sangre, según señalaron médicos del Hospital Guillermo Almenara.
Indicaron que la menor tiene politraumatismos, múltiples fracturas a nivel de columna dorsal, fractura de pelvis y de fémur. Además, tiene una contusión pulmonar.
“Se está haciendo el descarte de un traumatismo abdominal cerrado. (Tenía) una anemia aguda que ya fue compensada”, manifestó a la prensa Jorge Amorós, gerente de la Red Prestacional Almenara.
El médico pidió a la población que no deje de donar sangre, ya que, si bien las unidades requeridas por la menor ya fueron obtenidas del banco de sangre, este elemento siempre es necesario para el resto de pacientes.
“Ya se le ha transferido tres paquetes globulares”, indicó.
No se dieron cuenta de la caída
En tanto, el padre de la menor reveló que en el colegio Saco Oliveros, donde estudia la niña, no se dieron cuenta de su caída. Señaló que su hija habría pedido permiso para ir al baño y luego se produjo el incidente. Indicó que la menor cayó cerca de la puerta de esa institución educativa y fue un vecino quien se dio cuenta del hecho y avisó al colegio.
También dijo que luego del accidente, al revisar el celular y los chats de su hija encontró un mensaje de la menor en el que mencionaba que ya estaba cansada que hablen tanto de ella y que la critiquen por todo. Mencionó que, en algunas oportunidades, la niña le pedía no ir al colegio.
“Encontré en su celular que tenía una carta de despedida desde el día 22, pero no pude acceder porque tiene clave, pero salía en el título ‘quizás esté muerta para esta fecha’. A pesar de ello los alumnos se siguieron burlando de ella”, indicó el padre de la menor.
Indecopi investiga
En tanto, la Dirección de Fiscalización de Indecopi anunció que verificará que el colegio Saco Oliveros de Salamanca haya cumplido con sus obligaciones establecidas en la Ley que promueve la convivencia sin violencia en las aulas.
“Como parte de las diligencias se indagará sobre los hechos ocurridos, así como las acciones que se encuentra adoptando la institución educativa para dar atención inmediata al caso. En caso de detectarse incumplimientos a las normas en materia de protección al consumidor y a la Ley que promueve la convivencia sin violencia en las instituciones educativas (Ley 29179), la Dirección de Fiscalización recomendará a los órganos resolutivos de la institución inicien un procedimiento administrativo sancionador, el mismo que podría concluir con la imposición de una multa de hasta más de S/2,070,000.00 (450 UIT)”, mencionaron en un comunicado.
“El Indecopi lamenta profundamente lo ocurrido y reitera su compromiso de mantenerse vigilante para evitar que más estudiantes se vean afectados. Asimismo, insta a la ciudadanía a prevenir y evitar situaciones de violencia en las aulas; la sana convivencia requiere del compromiso y trabajo de las familias y la sociedad en conjunto”, añadieron.
Combate el bullying
Cabe recordar que, frente a un caso de bullying, este debe ser reportado por la institución educativa, los padres de familia o cualquier ciudadano en el portal ‘SíseVe’ (www.siseve.pe/web/) del Ministerio de Educación.
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