Gabriela Sevilla no acudió este sábado a la sede de la Dirección de Investigación Criminal de la Policía Nacional para emitir su declaración sobre las 36 horas que figuró como desaparecida y con un embarazo inexistente, según el Ministerio Público. La madrina de la joven, citada en calidad de testigo, tampoco se presentó en la sede de la avenida España, en el Cercado de Lima.
Solo se apersonaron sus padres y Ramiro Gálvez, pareja de Sevilla, quienes brindaron sus descargos en la dependencia policial, según RPP Noticias. Un reportero de Latina que llegó hasta el inmueble de Gabriela Sevilla, en Surco, confirmó que ella no había salido.
“Hemos visto a su padre realizando sus actividades cotidianas, salió a comprar pan y a pasear al perro. El vehículo que tiene está estacionado, todo indicaría que no va acudir ella (Gabriela) a la sede policial”, precisó el periodista.
La Fiscalía a cargo del caso deberá reprogramar la citación para dar luces en un caso que mantiene en vilo al país. Sevilla, que en la víspera había confirmado su asistencia a las 10.00 a.m., alega que sí estaba embarazada, pese a que los informes del médico legista determinaron que no había signos de parto reciente ni antiguo.
“Mientras no se demuestre lo contrario y se haya declarado su responsabilidad mediante sentencia firme y debidamente motivada, la situación jurídica de una persona imputada siempre deberá estar precedida por la presunción de inocencia”, señala LP Derecho.
El portal agrega que, en cuanto al delito de negativa a colaborar con la administración de justicia, pueden surgir algunas consecuencias, como sanciones de carácter procesal o, incluso, de índole penal.
“Lo mismo puede ocurrir con aquellos testigos que, a pesar de haber concurrido, deciden abstenerse de rendir testimonio; es decir, pueden terminar denunciados”, se lee en un texto que aborda este procedimiento.
Un giro inesperado
La ministra de la Mujer, Claudia Dávila, confirmó que Gabriela Sevilla no estaba embarazada después que contradijera la versión del titular del Interior, Willy Huerta, quien dio esta noticia cuando salió del Hospital Militar donde la joven estuvo internada. La titular del MIMP pidió que este caso sea tratado con mucha “empatía” porque no se debe revictimizar a la mujer que supuestamente estuvo gestando.
“(Gabriela Sevilla) no estaba embarazada. Yo no tenía la información completa. Nos ha sorprendido este giro del caso. Llamé al ministro (Willy Huerta) y me dijo que él había declarado lo que los médicos le habían dicho y lo que la prueba médica indicaba. No hubo ninguna contradicción. Las pruebas de laboratorio son clarísimas”, declaró este sábado.
Dávila agregó que se debe tocar este tema con mucho cuidado porque es muy delicado. “Yo pediría manejar las cosas con calma y tratar de ponernos en su lugar; y no hacer calificativos ni juicios de valor en este momento”.
Una ecografía fetal como prueba
Gabriela Sevilla compartió unas fotografías de su gestación y ecografía fetal luego de los exámenes realizados por el Ministerio Público que niegan su embarazo.
Las imágenes fueron recogidas por Al estilo Juliana. “Mi Marti en sus primeros mesesitos”, se lee junto a una toma en la que se ve a la joven junto a su pareja. En otra se evidencia una ecografía, aunque sin los parámetros biométricos fetales.
La ginecóloga Vicky Vásquez comentó al medio que “clínicamente es muy fácil de identificar” si una mujer ha estado o no embarazada, sobre todo en la etapa del puerperio, período que comienza en la finalización del parto y se prolonga durante al menos seis semanas.
Vásquez también señaló que la línea hiperpigmentada, que aparece a medida del desarrollo fetal, tarda “mucho” en desaparecer y podría ser otro indicador para determinar si Gabriela Sevilla gestó.
Según una evaluación compartida la tarde del viernes, la joven de 30 años no presentaba signos de gestación ni de parto reciente o antiguo. Sin embargo, el Instituto de Medicina Legal del Ministerio Público confirmó que la joven sí muestra lesiones traumáticas corporales recientes.
Canal N compartió además un examen de sangre realizado el 21 de octubre en el laboratorio clínico del Hospital Militar, que arrojó resultado negativo de embarazo. Se trata de la prueba de GCH, la cual verifica la presencia en la sangre de la hormona gonadotropina coriónica, producida normalmente durante el embarazo.
La desaparición
Según la investigación, Sevilla salió de su casa en Surco a las 7:20 p.m. del último miércoles 19 de octubre. Se dirigía a la Clínica Internacional de San Borja con labor de parto.
Allí se encontraría con su pareja Ramiro Gálvez, quien mantuvo comunicación durante el trayecto e incluso le envió una fotografía del taxista, pero minutos más tarde, Gálvez ya no supo más de ella ni de su hija.
Tras 30 horas de búsqueda, Gabriela Sevilla apareció en Villa María del Triunfo. Según la Policía, llegó por sus propios medios y en estado de shock y policontusa a la vivienda de un familiar en ese distrito, desde donde se comunicó con sus padres, quienes la recogieron y la llevaron al hospital Militar.
En medio del caso, el Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP) llamó a no deslegitimar la búsqueda de desaparecidas en el país, que suman 3.528 hasta agosto.
“La búsqueda de las mujeres desaparecidas es una problemática que no puede ser deslegitimada”, señaló la cartera y pidió “prudencia” en torno a la situación de Sevilla, quien inicialmente fue reportada como desaparecida tras subir a un taxi mientras se hallaba en trabajo de parto.
SEGUIR LEYENDO