Luego de varios meses, se logró la captura de un asesino confeso y sentenciado que estaba prófugo de la justicia. Tras diversos operativos que realizó la Policía Nacional del Perú en el distrito de Chorrillos, los efectivos del orden por fin pusieron tras las rejas a un feminicida que mató a su expareja, una joven estudiante de 15 años.
Este sujeto de 21 años, identificado como Kevin Claudio Ayala, cayó dentro de una vivienda en San Jerónimo y es que una llamada anónima expuso el paradero correcto de este criminal que escondió por varias semanas el cuerpo de la menor debajo de su cama.
Según contó el oficial PNP a cargo de esta captura, Ayala estaba en la relación del Programa de Recompensas del Ministerio del Interior, es por eso que se efectuó el monto de 30 mil soles para quién pueda brindar el paradero de este feminicida quien mató a su expareja en el 2019.
“La captura de este sujeto se realizó en horas de la mañana, cuando estaba saliendo de un inmueble, fue ubicado y capturado. Al principio puso resistencia, pero fue reducido por el personal, luego fue conducido a las instalaciones policiales para ponerse a disposición de la autoridad solicitante que es la Fiscalía. Él tiene un delito por feminicidio. Hemos obtenido la colaboración de una persona anónima, se hizo la vigilancia respectiva y es por eso que se logró esta captura”, contó el coronel encargado de esta misión a los medios de comunicación.
Detalles del feminicidio
En el 2019, Kevin Claudio Ayala, quien en ese entonces tenía 18 años, mantenía una relación con una escolar de 15. Pese a la oposición de la familia de la víctima, este sujeto logró seducirla para que no terminara con el romance.
Sin embargo, meses después de iniciado este amorío, la joven decidió ponerle fin a la relación, ya que Kevin mostraba ser una persona violenta, pero él no aceptó.
En aquel tiempo, Claudio Ayala alquilaba un cuarto en el distrito de Chorrillos, fue ahí donde se produce el feminicidio. Según la revelación de la autopsia, la menor murió por asfixia. Pero este crimen de odio no acabó ahí, pues este criminal fue encontrado por miembros de la policía durmiendo junto al cadáver, fue ahí que logró ser detenido.
Una persona cercana a Kevin dio el dato a la policía, asegurando que este le contó todo lo que había sucedido.
Sentencia
El Ministerio Público, a través de la Primera Fiscalía Superior Penal de Lima Sur, a cargo de la fiscal superior Norma Doris Álamo Martínez, logró que la autoridad judicial dicte sentencia condenatoria de 35 años de pena privativa de la libertad.
La medida fue obtenida en juicio oral por el fiscal adjunto superior Hugo Raúl Villasís Rojas, que sustentó ante los magistrados de la Sala Permanente de la Corte Superior de Justicia de Lima Sur.
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