Venta de vehículos nuevos desaceleraría crecimiento en los próximos meses

La venta de vehículos nuevos crecería alrededor del 2% durante el 2022, según estimaciones del Departamento de Estudios Económicos de Scotiabank.

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Entre enero y julio de
Entre enero y julio de este año se colocaron 102,994 unidades, 11.2% más respecto al mismo periodo del año previo, según cifras de la AAP.

La venta de autos nuevos creció 11.2% entre enero y julio de este año, según cifras de la Asociación Automotriz del Perú (AAP). De esta manera, el Departamento de Estudios Económicos de Scotiabank elevó ligeramente su proyección de este sector para el presente año.

“Ahora prevemos que la venta de vehículos nuevos crezca alrededor del 2% durante el 2022, comparado con nuestra proyección anterior de ventas similares al 2021. Nuestra mejora en la proyección estaría explicada en parte por un nivel de ventas un poco mejor a las que esperábamos en el segmento de vehículos ligeros, y a un mejor desempeño en ventas en una de las categorías de la venta de vehículos pesados”, indicó Carlos Asmat, analista económico de Scotiabank.

Sin embargo, si bien el sector volvería a crecer, las tasas de crecimiento interanuales para los próximos meses se irían moderando, tomando en cuenta el alto nivel de ventas del segundo semestre del 2021. “El resultado acumulado a julio se explica en parte por una mejora gradual del empleo formal y de los ingresos, así como el uso de ahorros privados -liberación de fondos de AFPs y CTS-”, dijo Asmat.

Si bien el panorama es relativamente positivo, aún hay ciertos factores de riesgo -locales e internacionales-, que pueden presionar a la baja la venta anual. De otro lado, si bien se han registrado meses en los cuales las ventas estaban por debajo del promedio, la menor colocación estuvo relacionada en mayor medida a un menor stock de vehículos -debido a las complicaciones en las cadenas globales de producción asociadas al Covid-19-, situación que se revirtió rápidamente al regularizarse la importación de vehículos de determinadas marcas y modelos.

Evolución de las ventas

Entre enero y julio de este año se colocaron 102,994 unidades, 11.2% más respecto al mismo periodo del año previo, según cifras de la AAP. Incluso el nivel de ventas fue 6.3% superior respecto al mismo periodo del año 2019 -prepandemia-.

El incremento gradual del empleo formal, especialmente en el segmento dependiente, y la disponibilidad de ahorros privados, liberación de CTS y fondos previsionales, impulsaron en parte la venta de vehículos durante el periodo antes mencionado, especialmente la venta de vehículos ligeros -representa cerca del 90% del total de ventas del sector-, según refiere Scotiabank en su reporte.

Sin embargo, este resultado estuvo acotado por la demora en la llegada de nuevas unidades, debido a problemas en la logística mundial naviera y a problemas de producción mundial de automóviles, ante demoras en la provisión de suministros en la industria automotriz -afectando la llegada de algunas marcas y modelos al país-, tomando en cuenta la alta demanda de chips semiconductores por parte de otras industrias, y a problemas en la provisión de insumos para la producción de los mismos -insumos para chips provenientes de algunas regiones de Ucrania y Rusia, los que actualmente atraviesan un conflicto armado-.

Para el cierre de año,
Para el cierre de año, el Departamento de Estudios Económicos de Scotiabank proyecta que se coloquen cerca de 179 mil unidades, mostrando una tasa de crecimiento de 2%.

Vehículos ligeros

La venta de vehículos ligeros creció 11.2% entre enero y julio de este año respecto al mismo periodo del 2021, según la AAP. Se colocaron 92,323 vehículos nuevos -cerca del 90% del total de vehículos nuevos vendidos en este mismo periodo-.

Por categorías, entre enero y julio, el segmento fue impulsado por la mayor demanda por vehículos SUV y vehículos pick up. En el segmento de SUV, su nivel de ventas creció 26%, más que duplicando el crecimiento del segmento en su conjunto -representó el 44% de la venta total de vehículos ligeros, 40% en todo el 2021-. Una mayor presencia de modelos, así como la preferencia por unidades de mayor tamaño para realizar viajes de larga distancia - incluso para su uso en zonas urbanas- incidió sobre el resultado acumulado.

Venta de vehículos nuevos.
Venta de vehículos nuevos.

A ello le siguió el buen desempeño en ventas vehículos pick up (+18%) -demandados por sectores como minería y construcción-. Si bien registró un desempeño positivo, el volumen de ventas ha venido reduciéndose en los últimos meses, dada la menor demanda por parte de principales empresas que demandan este tipo de vehículos -menores niveles de inversión-.

Asimismo, hubo una mayor demanda por furgonetas y camionetas multipropósito (+4%), contrastando con la demanda por automóviles para el desplazamiento en ciudades (-10%).

Vehículos pesados

La venta de vehículos pesados creció cerca de 11% entre enero y julio respecto al mismo periodo del 2021. El resultado fue impulsado por una mayor demanda de minibuses y ómnibus, segmento cuyas ventas crecieron 52% en el periodo mencionado.

Menores restricciones de aforo y una mayor propensión a realizar viajes interprovinciales, incidió en la demanda por la renovación de estos vehículos. Hay que tomar en cuenta que este segmento tuvo tres años consecutivos de caída en ventas -entre el 2019 y el 2021-.

Venta de vehículos nuevos.
Venta de vehículos nuevos.

Asimismo, se registró un incremento en la venta de camiones (+7%) y tractocamiones (+4%). La demanda por este tipo de unidades estuvo asociada al desempeño de los principales sectores que adquieren este tipo de vehículos, como el sector construcción -creció 1.6% durante el 1S22 respecto al 1S21- y el sector minero -inversión minera creció 10% entre enero y julio respecto al mismo periodo del año previo-.

Sin embargo, para lo que resta del año, se prevé una desaceleración de la tasa de crecimiento, siguiendo el desempeño que se espera para el sector construcción y para la inversión minera.

Perspectivas 2022

Para el cierre de año, el Departamento de Estudios Económicos de Scotiabank proyecta que se coloquen cerca de 179 mil unidades, mostrando una tasa de crecimiento de 2%, en parte debido a los resultados por encima de lo esperado entre enero y julio.

Sin embargo, sería más complicado superar los niveles de venta del segundo semestre del 2021. La cifra proyectada del 2022 aún está lejos del récord de ventas del año 2013 -poco más de 192 mil vehículos-. El resultado que se espera para el 2022 sería explicado por la mejora gradual del empleo formal y de los ingresos, el acceso a ahorros privados -fondos de pensiones y CTS- así como el mayor acceso al crédito vehicular.

Asimismo, una menor volatilidad del tipo de cambio sol/dólar incidiría favorablemente sobre la decisión de compra por el lado de la demanda, tomando en cuenta que todos los vehículos nuevos son importados.

Sin embargo, el resultado anual se vería acotado debido a la perspectiva negativa sobre la inversión privada, por lo cual se mantiene la proyección de una caída de 2% durante el 2022-, lo cual es un factor que incide sobre la demanda por vehículos comerciales y pesados.

Venta de vehículos nuevos y
Venta de vehículos nuevos y proyección 2022.

Asimismo, entre los principales riesgos que pueden presionar a la baja el resultado anual están: cambios en la confianza del consumidor asociado al persistente ruido político -que podrían retrasar la decisión de compra de vehículos nuevos-; la volatilidad del tipo de cambio sol/dólar -ante un contexto internacional menos favorable- y un mayor costo de financiación debido al incremento de las tasas de interés para financiar un crédito vehicular -siguiendo la tendencia de las tasas de interés en soles y dólares-.

Respecto a vehículos comerciales y pesados, un mayor deterioro de las expectativas empresariales, afectando el nivel de inversión privada, incidiría sobre la decisión de compra de vehículos por parte de empresas.

A ello se suman riesgos internacionales, tales como la adecuada provisión de semiconductores -chips- para la manufactura de vehículos nuevos, la interrupción en la cadena de producción debido a cierres intempestivos de fábricas en China -política de Covid Cero-, asociado a ello, complicaciones de logística portuaria a nivel mundial -alta demanda de contenedores y poca oferta mundial-, los aún altos costos de los fletes respecto de años previos -especialmente los provenientes de China-, y la elevada cotización internacional de petróleo -que incide sobre los precios locales de los combustibles y eleva los costos de operación-.

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