¿Cuál es la diferencia entre un foco led y el ahorrador?

La luz eléctrica se ha convertido en un elemento básico en todos los hogares desde hace mucho. Su uso es casi indispensable en la vida del ser humano, y ahora con la instalación del teletrabajo y estudios desde casa, el empleo de esta energía ha aumentado.

Imaginar un día sin luz es casi imposible, y un claro ejemplo es nuestro hogar, donde encontramos focos en diferentes partes, como en el baño, en la sala, los cuartos, la cocina, entre otros espacios de nuestra casa. Todos ellos son usados, sobre todo cuando la luz del sol se oculta.

Frente al uso de la luz, surgen muchas dudas en las personas, como por ejemplo, ¿Cuál es la diferencia entre un foco led o uno ahorrador?, ¿Cuál me genera más ahorro?, o inclusive ¿Cuál contamina menos? Todas esas dudas serán respondidas más adelante.

Para comenzar es necesario conocer las características de cada uno.

- Foco Led: Este producto ya cuenta con una presencia de varios años en el mercado. Su aparición significó una revolución por el tiempo de vida que tiene y por el consumo que genera. Esto a su vez tiene un impacto directo en el bolsillo de cada hogar.

El consumo que realiza es hasta 8 veces menos que un foco halógeno y hasta 50% menos que el de un foco ahorrador.

El tiempo de vida útil de un foco led es el doble que el de un ahorrador y cuenta con dos colores principales: luz blanca y amarilla.

Otra de las características por las que se puede reconocer a un led es la rapidez con la que emiten la luz, El 100% de la potencia se da al ser encendido.

Es amigable con el medioambiente, ya que a comparación de un foco regular, las bombillas reducen la emisión de calor. Todo ello, también se ve reflejado en el precio de este producto, que de forma general siempre suele ser más elevado.

- Foco ahorrador: Son productos muy económicos y ahorrativos; sin embargo, los focos led le han quitado el protagonismo a la hora del ahorro.

El tiempo de vida de este producto es de 8 a 10 años en promedio. Un punto a favor es que es ideal para lugares muy fríos, ya que no solo alumbrará sino que también generará calor.

Algo que las personas deben de tomar en cuenta es el contenido con el que está elaborado y esa es una de sus debilidades, debido a que el mercurio es parte de sus componentes. Este elemento es utilizado para lograr producir luz ultravioleta, transformándose con la electricidad en luz visible.

Las luces LED son eficientes. El consumo de energía es menor en comparación a un fluorescente y la potencia de iluminación es mayor.

La cantidad de lúmenes que produce un fluorescente requiere de mayor cantidad de voltios, la luz LED necesita menos voltios para alumbrar con la misma intensidad.

Es preciso indicar que según unos últimos estudios realizados por la Universidad de Exeter que examinó las emisiones de luz de 1992 a 2017 se ha encontrado que la contaminación lumínica global ha aumentado en al menos un 49% en 25 años.

“Este estudio proporciona evidencia clara no sólo de cuán grave se ha convertido la contaminación lumínica como problema mundial, sino también de que continúa empeorando, y probablemente a un ritmo cada vez más rápido”, se lee en un comunicado del doctor Alejandro Sánchez de Miguel, del Instituto de Medio Ambiente y Sostenibilidad en el campus Penryn de Exeter en Cornwall.

Ruskin Hartley, Director Ejecutivo de la Asociación Internacional de Cielo Oscuro, dijo: “Durante los últimos 25 años, la transición a la iluminación LED de estado sólido ha ido acompañada de un rápido aumento de la contaminación lumínica a nivel mundial.

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