Claudio Pizarro estuvo en el hotel de concentración de la selección peruana en Barcelona. Más allá de compartir con los jugadores de la ‘bicolor’, el ‘Bombardero de los Andes’ se hizo presente por un motivo especial: invitar a sus excompañeros a su partido de despedida que se llevaría a cabo en Bremen, Alemania.
“Además de visitar, cenar y ver el partido con los jugadores también les adelantó algo. Claudio Pizarro va a hacer su partido de despedida en Bremen y ha venido aquí a hacer algunas invitaciones”, señaló Jampool Cuadros en América Televisión.
El periodista dejó en claro que en los próximos días se anunciará la fecha oficial. Asimismo, que no se sabe a quien habría convocado para este cotejo. No obstante, lanzó algunos nombres como André Carrillo, Renato Tapia, Christian Cueva y Carlos Zambrano, los cuales han compartido más tiempo con el exatacante.
La pregunta sería ¿por qué lo hará recién? Y es que ‘Pizza’ tuvo su último cotejo como jugador profesional hace dos años. Entró en los minutos finales en la goleada 6-1 del Werder Bremen sobre Koln por la liga alemana.
En un principio se había contemplado realizar el compromiso en suelo ‘incaico’. “La idea de hacer una despedida en Perú está ahí. Hay que esperar que el tema del Covid-19 se calme un poco, pero la idea está”, sostuvo Pizarro en entrevista con RPP. No obstante, eso no sucederá por el momento.
La ciudad de Bremen significa mucho para el exjugador. Después de su gran temporada con Alianza Lima, dio el salto al extranjero. Fue transferido al Werder por 1.7 millones de dólares, uno de los fichajes más caros del fútbol peruano en esos tiempos.
Desde su primera temporada demostraba su olfato goleador y marcó diez tantos en 19 partidos disputados, despertando el interés de grandes equipos del viejo continente. Inmediatamente pasó a formar parte de la lista de intransferibles. La siguiente campaña casi duplicó su registro, por lo que ya no podía ser detenido por el club y fue comprado por el Bayern Munich.
Luego de varios años fuera, retornó a la ciudad del famoso libro de los hermanos Grimm en 2008 y permaneció hasta 2012. Se volvió a poner la camiseta del ‘Gigante de Baviera’ y posteriormente defendió los colores del Koln. Sus últimos años como jugador profesional los vivió con los ‘verdiblancos’.
En toda su trayectoria con el Werder Bremen, alcanzó 152 goles en 320 cotejos, convirtiéndose en el máximo goleador de su historia. Asimismo, tuvo un récord en la Bundesliga como el extranjero con más tantos, el cual fue rotó por Robert Lewandowski, pero que permaneció vigente por años. Por último, conquistó dos títulos (Copa de Alemania en 2008 y Supercopa de Alemania en 2009).
No solo hizo historia en Alemania, sino a nivel mundial. Es de los pocos representantes nacionales que levantó una Champions League y un Mundial de Clubes. Ambos lo hizo con Bayern Munich donde tuvo la dicha de ser dirigido por el español Pep Guardiola.
Por ello se encuentra en el salón de la fama de la organización más grande del fútbol. “No recuerdo si fue hace uno o dos años que me llegó una invitación para ser leyenda FIFA. Obviamente rápidamente acepté. Estaba en los planes de ellos tenerme como leyenda y acepté sin pensarlo mucho”, contó en una entrevista con Full Deporte.
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