Las Bambas: La evolución de un conflicto que lleva más de 40 días y que podría agravarse

El pasado 14 de abril, miembros de la comunidad de Fuerabamba, del distrito de Chalhuahuacho, provincia de Cotabambas, en Apurímac, entraron en la mina de cobre Las Bambas, explotada por la compañía china MMG, para reclamar por un presunto incumplimiento de los compromisos de inversión social de la empresa. A la protesta también se fueron sumando ciudadanos de otras comunidades aledañas.

A la fecha son seis las comunidades en conflicto con Las Bambas: Nueva Fuerabamba, Huancuire, Pumamarca, Choaquere, Chila y Chuicuni. Y son más de 40 los días en que la mina de cobre más importante del país continúa paralizada sin que las mesas de diálogo llevadas a cabo en más de una ocasión tengan éxito.

- El 23 de abril, el entonces ministro de Energía y Minas, Carlos Palacios, prometió que el lunes 25 y martes 26 iba a reunirse con los dirigentes de las comunidades de Chila y Choaquere. Sin embargo, esta reunión no se dio porque prefirió participar de un Consejo de Ministros. Cuando llegó al lugar los comuneros ya no estaban dispuestos a conversar.

- El conflicto, no ha estado exento de enfrentamientos violentos y heridos. A fines de abril, la Defensoría del Pueblo confirmó que 44 personas resultaron heridas los días 27 y 28 de ese mes, durante el desalojo de los comuneros de Fuerabamba y Choaquere de los terrenos ocupados por MMG Las Bambas. Del total de heridos 32 fueron civiles y 12 policías.

- Horas previas al operativo de la PNP, el presidente del consejo de ministros, Aníbal Torres declaró Apurímac en estado de emergencia.

- El 29 de abril, la PCM convocó a los comuneros y a MMG a una mesa de diálogo para el 7 de mayo, pero esta se pospuso para el 10 de mayo, sin embargo, Torres no asistió.

- Días después, cuando fue interpelado en el pleno del Congreso, Torres declaró que su ausencia se debió a que tenía temor de ser secuestrado por los comuneros. Las declaraciones del premier fueron tomadas como una ofensa para los comuneros

- Finalmente, la reunión se dio el 18 de mayo en Challhuahuacho; sin embargo, esta estaba para las 11 de la mañana y se inició a las 2 de la tarde. El encuentro fue tenso per fugaz, luego de escuchar los reclamos de los comuneros, el jefe de ministro dio un discurso general y se retiró. En la reunión no se llegó a ningún acuerdo.

- El 24 de mayo se realizó una reunión entre los representantes de las comunidades, algunos ministros de gobierno y el presidente Pedro Castillo. Aunque no se llegó a un acuerdo, consiguió establecer el diálogo. Uno de los pedidos de las comunidades para levantar su medida de fuerza era que primero se levante la declaratoria de estado de emergencia, pero esto no se ha dado.

- Por el contrario, este viernes 27 de mayo, el Poder Ejecutivo prorrogó el estado de emergencia decretado en los distritos de Challhuahuacho y Coyllurqui, de la provincia de Cotabambas, Apurímac, por 60 días más, con lo que habría vuelto a un punto muerto en el diálogo.

El último viernes por la tarde, Edison Vargas, presidente de la comunidad de Fuerabamba, aclaró que no es que las seis comunidades pretendan ser socios de Las Bambas e indicó que los pedidos son distintos. Señaló que, en el caso de los ciudadanos de Huancuire, ellos sí solicitan que las ganancias de la explotación minera se comportan con las comunidades en 50%.

En el caso de Fuerabamba, ellos solicitan el saneamiento físico y legal de los predios que han sido entregados bajo permuta, ya que estos terrenos que hoy ocupan estarían siendo reclamados por otras comunidades, pudiéndose generar un conflicto entre ellos.

Cabe indicar que, en noviembre del 2011, Las Bambas y la comunidad de Fuerabamba firmaron un contrato de permuta con el objetivo de transferir tierras: 4,774 hectáreas a cambio de más de 4,200 hectáreas distribuidas en cinco predios.

Esta crisis ya está generando pérdidas económicas. Según la compañía, se han generado pérdidas al país por más de S/ 220 millones, por conceptos de canon y regalías. También se han dejado de exportar cerca de 40 millones de dólares en cobre.

Por último, cerca de 8 mil puestos de trabajo están en peligro y alrededor de 1400 medianas y pequeñas empresas de Apurímac y Cusco que dan servicio a la mina son afectadas.

Lo más grave es que los trabajadores de la minera aseguran estar dispuestos a enfrentarse a los comuneros de Apurímac para reanudar las operaciones de la minera de cobre.

“Los compañeros están pidiendo ir a Challhuahuacho, a la unidad minera. Están queriendo ir a enfrentarse a los comuneros. No sé cómo los vamos a contener como junta directiva, pero están con toda la predisposición de ir y enfrentarse”, dijo a Radio Exitosa, Erick Ramos, secretario del Sindicato de Trabajadores de Las Bambas. Agregó que en las próximas horas tomarán una decisión en una asamblea general.

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