No le importó que estuvieran sus hijos presentes, no le importó que fuera la madre de sus pequeños, ni mucho menos, le importó la vida de la mujer que un día prometió amar. El último domingo en horas de la noche, se registró un nuevo feminicidio en la ciudad de Chiclayo, región de Lambayeque, en donde este crimen de odio ha consternado a todo el pueblo norteño.
La policía al llegar a la zona donde se había suscitado el asesinato, informó que la mujer de iniciales M.V.V de 40 años fue agredida brutalmente por su conviviente Juan Mejía Gálvez, quien en varias ocasiones la golpeó en el rostro y cabeza usando una raja de leña y un machete. Esto ocurrió en el sector Pampa El Toro, además el agresor también golpeó a sus hijos de un año 3 meses y de tres años de edad.
Al enterarse de que la mujer estaba siendo golpeada por su pareja, su madre con ayuda de vecinos acudieron a su rescate. Aún con vida, la mujer señaló a Mejía como su agresor. Pese a los esfuerzos por salvarle la vida, la víctima falleció tras las diversas contusiones y hemorragias internas que tenía producto de los constantes golpes que recibió. Al llegar al hospital de la zona, solo constataron su deceso.
Tras este nuevo feminicidio, la familia pide justicia y que se le imponga la máxima pena a Juan Mejía Gálvez, sindicado como autor del feminicidio, registrado en el distrito de Tumán. El abogado refirió que la fallecida era maltratada de manera constante, motivo por el cual denunció a su agresor en varias ocasiones.
Asimismo, reveló que este asesino tenía órdenes de restricción contra la mujer que fue su pareja, ya que en varias oportunidades él la agredía, insultaba y amenazaba con matarla.
VECINOS LO ATRAPARON
Luego de cometer este crimen, Mejía Gálvez decidió huir dejando a la mujer desangrándose. Sin embargo, los vecinos alertados por los fuertes gritos de auxilio no dudaron en atraparlo y golpearlo para que confesara su delito.
A pesar de ser detenido, este asesino negó haber golpeado a la madre de sus hijos y aseguró que todo se trataba de un error. Sin embargo, la madre de la mujer constató y ratificó que era él quien siempre amenazaba a su hija con matarla y que la golpeaba constantemente.
Según versión de los familiares, este sujeto también agredió físicamente a su hijo de tres años, luego que el niño intentara defender a su madre de los golpes que estaba recibiendo.
La pareja se había separado hace dos años. Sin embargo, Mejía nunca dejó de hostigarla y acosarla para que regrese con él. Pese a esto, la víctima no accedía y aún con las tres denuncias interpuestas en la comisaría del sector, el agresor se resistía a dejarla en paz.
La Dirincri de Tumán se encuentra a cargo de este hecho y en cuestión de horas este feminicida pasará a la Fiscalía para continuar con el proceso de investigación, según establecen nuestras leyes. Por otro lado, los menores han sido conducidos a un centro de intervención familiar para que estén en buen recaudo.
La familia pide apoyo, ya que ellos son de condición muy humilde y este lamentable crimen deja en la orfandad a dos niños completamente inocente. Según la madre de la mujer, el padre de los niños no pasaba manutención ni se hacía cargo de ellos, por los que solo su mamá trabajaba para mantenerlos.
CANALES DE AYUDA
Existen diversos canales de ayuda interpuestos por las autoridades, uno de ellos es el Centro de Emergencia Mujer (CEM). Estos son servicios públicos especializados y gratuitos para víctimas de violencia familiar y sexual.
Línea 100, servicio telefónico gratuito a nivel nacional especializado en brindar información, orientación y soporte a las víctimas de violencia o maltrato. Se puede acceder marcado el 100 desde cualquier teléfono fijo, público o celular durante las 24 horas del día.
El Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables tiene habilitado además, un servicio de chat para prevenir situaciones de riesgo y violencia física, sexual o psicológica. Se debe entrar desde cualquier dispositivo con internet a www.mimp.gob.pe/chat100.
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