Policía Anticorrupción en crisis: peligra su sede principal y debe pagar reparación civil de S/ 24 millones

La Dirección contra la Corrupción de la Policía Nacional del Perú (PNP) atraviesa una difícil situación. La división que se encarga de luchar contra delitos de corrupción que ocurren en el país, está a punto de quedarse sin su sede principal y lugar de trabajo.

Este tema ha creado una gran conmoción dentro de la institución policial. El pasado 6 de abril, se hizo público un documento donde se oficializaba un remate judicial inminente del local ubicado en el distrito de Jesús María para este viernes 29 de abril.

“Es una indolencia y hay que establecer responsabilidad por haber llegado a esta situación por parte de una dirección tan importante y especializada que trabaja con el procurador público encargado en delitos anticorrupción. Es una negligencia total”, señaló el general Eduardo Pérez-Rocha a América Noticias.

Todo inició cuando el exministro del Interior y expresidente del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, el general José Villanueva Ruesta durante el Gobierno de Alberto Fujimori adquirió este local, pero actualmente no se tiene conocimiento del origen de los fondos que se utilizaron para comprar esta y otras propiedades.

No obstante, en esta dirección venían operando más de 100 agentes, quienes tendrán que dejar su centro de trabajo, debido a que no se ha previsto la posibilidad de reubicarlos ni de asignarles otro local para su traslado, así lo indicó la Procuraduría Especializada en Delitos de Corrupción.

El local ha sido valorizada en 7 millones de soles, dinero que serviría para pagar parte de la reparación civil que dejó el general Villanueva Ruesta, junto a otros implicados y que asciende a 24 millones de soles.

“Esto lo puede solucionar el actual ministro, porque tiene todo el margesí de bienes de la PNP y habría que ver en qué lugar se pueden acondicionar momentaneamente”, sostuvo Pérez-Rocha.

ASCENSOS DE GENERALES DE LA PNP

No es la primera vez que ocurren problemas con la PNP, hace algunos meses, hubo una “ruptura política” entre el exministro del Interior, Avelino Guillén y el entonces jefe de la policía, Javier Gallardo. Esto ocurrió cuando Gallardo decide darle de baja a altos efectivos de la institución y Guillén se opuso.

Según un informe de IDL Reporteros, el lunes 13 de diciembre, a solo un mes de la designación de Guillén, el comandante general Javier Gallardo, presentó al titular de la cartera del Interior una lista de 20 generales que podrían pasar al retiro en su institución. Sin embargo, el funcionario identificó que al menos cinco de esta lista, estaban considerados entre los mejores de la PNP.

Frente a esta postura, Guillén le devolvió el listado a Gallardo para que lo corrigiera y sacara de la lista a los profesionales de alto rendimiento con los que no estaba de acuerdo.

Días después, el exsubcomandante general de la institución, Javier Bueno interpuso una denuncia pública, donde se habían cometido irregularidades en el proceso de los ascensos de generales en el año 2020.

Esto generó la renuncia inmediata de Avelino Guillén y más adelante, debido a sus declaraciones, Gallardo decidió dar un paso al costado. Pedro Castillo aceptó ambas renuncias y juramentó al actual ministro del Interior, Alfonso Chávarry.

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