Perú cuenta con grandes destinos turísticos y eso, incluye rutas extraordinarias como parte de los paisajes naturales del país. Uno de los espacios para realizar trekking es el conocido “Camino Inca” ubicado en Cusco, pero no es el único, ya que hay dos rutas más que te sorprenderán.
Apreciarás los escenarios naturales, una abundante biodiversidad, sitios arqueológicos y una cultura ancestral que se mantiene vigente hasta el día de hoy.
Las caminatas son las siguientes: desde Choquequirao hacia Machu Picchu y la que une el nevado Ausangate y la montaña de siete colores o Vinicunca, según la prestigiosa publicación internacional de viajes y turismo Travel + Leisure.
La lista llamada las “Doce de las caminatas más épicas de América del Sur de las que nunca has oído hablar”, escrita por Michaela Trimble, afirma que en América del Sur se encuentran los mejores viajes a pie. “Ya sea que tenga un día o catorce, aquí va una guía de las mejores caminatas bajo el radar de América del Sur”, indica.
Es por ello que, a continuación, te mostraremos las dos rutas consideradas las más épicas para una inolvidable experiencia de excursionismo o trekking en Perú y América del Sur. Toma nota y aprovecha en visitarlas durante esta Semana Santa.
RUTA HACIA CHOQUEQUIRAO - MACHU PICCHU
Se trata de una ruta larga de 115 kilómetros y para recorrerla, demanda alrededor de ocho días. Es un camino con gran dificultad y desafiante, ya que se encuentra entre 2,000 a 5,085 metros sobre el nivel del mar, pudiendo provocar mal de altura, también conocido como soroche. Es por ese motivo que es necesario realizar actividad física previa y aclimatación.
La caminata empieza en el pueblo de Cachora, ubicado en el departamento de Abancay. Es en ese lugar donde empieza la caminata hasta la Playa Rosalina donde se acampa y cena. El trekking dura alrededor de 4 o 5 horas.
Al día siguiente tocará ir al caserío de Marampata que tarda entre 4 o 5 horas y es donde se almuerza. Luego el camino derivará en el recinto arqueológico de Choquequirao.
A este importante sitio inca se le considera el “hermano menor” de Machu Picchu, ya que su diseño y arquitectura son muy similares. Choquequirao es una palabra quechua, cuyo significado es “Cuna de oro” y está ubicado a 3,050 metros sobre el nivel del mar, en la cordillera de Vilcanota.
El acceso a esta ciudadela puede darse a través de dos rutas y parten desde las regiones de Cusco y Apurímac. Según los investigadores, aún hay más espacios por descubrir, debido a que hasta el momento solo se ha excavado el 30% de toda su área.
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RUTA HACIA LA “MONTAÑA DE LOS 7 COLORES”
Es una travesía de 15 kilómetros y se necesitan cuatro días para recorrerla. Presenta un nivel de dificultad entre moderado a desafiante para el turista que desee hacer trekking. En este acaso, al igual que en el primero, es necesario estar en una buena condición física y tener una debida aclimatación.
Al sudeste de la ciudad del Cusco, en el distrito de Ocongate de la provincia de Quispicanchis y con una altitud de 6,380 metros sobre el nivel del mar, se encuentra la montaña Ausangate, también llamada Vinicunca por los zonales o “Montaña de los 7 colores” por los turistas, considerada una divinidad en los lugareños, un Apu, desde épocas ancestrales. Los turistas afirman que se trata de la excursión más impactante en los Andes peruanos.
“Durante el recorrido, el fabuloso paisaje muestra picos nevados, abras y miradores naturales, pozas de aguas termales que son el respiro perfecto tanto para el mal de altura como para los músculos cansados. Pero el verdadero premio de este viaje está al final de la caminata, cuando se llega a la montaña de los siete colores o montaña arcoíris, también conocida como Vinicunca por los lugareños. Sus colinas pintadas con varias tonalidades cromáticas dejan sin aliento a los visitantes y esta experiencia es lo más destacado de esta caminata reverencial en Perú”, se lee en la publicación Travel + Leisure.
Se dice que el movimiento de las placas tectónicas del área, hizo que los sedimentos se elevaran, al punto de lograr formar varias montañas. Con el paso del tiempo, los sedimentos fueron formando capas que en la actualidad se ven como franjas y los colores llamativos se deben a la oxidación de los minerales, ejercida por la humedad de la zona, y la erosión.
La “Montaña de los 7 colores” es llamada como tal, debido a los colores que se observa en la parte superior y son los siguientes: fucsia y rosado (mezcla de arcilla roja, fango y arena); morado o lavanda (una mezcla de arcilla y carbonato de calcio y silicatos); rojo (argilitas y arcillas); verde (mezcla de hierro, magnesio y óxido de cobre), mostaza o dorado (limonitas, areniscas calcáreas ricas en minerales sulfurados o combinados con azufre); blanco y crema (arenisca o arena de cuarzo y piedra caliza).
RECOMENDACIONES E IMPLEMENTOS PARA EL TREKKING
Para acceder a cualquiera de estas dos rutas es importante contratar un servicio de excursiones en una agencia de turismo autorizada y para corrobar que lo sea, los usuarios deben de verificar la lista en la Dirección Regional de Turismo de Cusco y en portales de viajes de reconocido prestigio. Es de suma importancia aclimatarse por lo menos dos días antes de empezar la ruta.
Los implementos que todo turista debe de tener para estas rutas son los siguientes: carpa, bastón, vestimenta adecuada como zapatillas, pantalón y casaca impermeable, ropa de abrigo para las noches (guantes, gorras, chalinas y medias de lana) y ponchos para lluvias.
Linternas con cargador solar, un cargador solar aparte, cámaras fotográficas y de video y baterías portátil. Llevar alimentos envasados, agua embotellada, pastilla purificadora de agua, lentes de sol UV y protector solar.
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