El incendio de ayer en San Juan de Lurigancho (SJL) le causó quemaduras de tercer grado a Roberto Origüela Fermín, un joven de 23 años, quien ahora se encuentra en una Unidad de Cuidados Intensivos, en el Hospital Nacional Arzobispo Loayza, luchando por su vida.
La tía de Roberto, María Fermín, narró a Infobae que su sobrino se encontraba trabajando dentro de la fábrica de disolventes, llamada Solventes Flores, cuando comenzó el fuego. Según explicó, el joven presenció la explosión del primer barril de thinner, por lo que se habría llevado “la peor parte” del siniestro, que empezó al promediar las 6 de la tarde.
“Ayer, mi sobrino tenía toda la cara negra y los brazos hinchados. Estaba junto a su jefe, quien le pidió hacer horas extras porque el salía a las 6. Le ordenó mover unos barriles con el montacargas. Es cuando hace contacto para encender el vehículo que explota el primer barril”, contó a nuestro medio.
“Nosotros nos enteramos cuando mi sobrino nos llama desde la comisaría de Canto Rey diciendo que ha habido una explosión. Nosotros pensamos que era leve, porque nos llama desde la comisaría. Cuando voy hasta allá, los policías me dicen que lo acababan de trasladar al hospital de Canto Grande, pero luego nos dicen que allí no tenían los implementos para poder ayudarlos”, continuó.
Tras ser rechazado en el mencionado nosocomio, sus familiares decidieron llevarlo a una clínica cercana debido a que su estado de salud iba empeorando, sin embargo, optaron por no internarlo allí ante la excesiva garantía que pedían para antenderlo.
“En el hospital de Canto Grande solo le querían poner una inyección para el dolor. Agarré y me lo llevé a Clínica San Juan Bautista. Cuando estamos allí y le están aplicando unas cremas, nos pidieron 70 mil soles como garantía para terminar de atenderlo”, continuó María Fermín.
Por último, y luego de muchos inconvenientes, fue aceptado en el hospital Loayza, en dónde los médicos le comunicaron a su madre que espere lo peor. “Nos explicaron que debido a los solventes que ha aspirado, su garganta va a continuar inflamándose, por eso está en una cama UCI”, lamentó.
Cualquier ayuda económica, destinada para la salud de Roberto Origüela Fermín, se puede hacer a través del YAPE: 936102800, que está a nombre de Rosario Quijano, familiar del joven herido de gravedad.
MÁS DE 60 FAMILIAS AFECTADAS
Hay más de 60 familias afectadas por el incendio, varias de ellas lo han perdido todo. Anoche, los vecinos tuvieron que dormir en las veredas para conocer cuál será la situación de sus viviendas, ya que la Policía Nacional no los dejaba entrar ante el temor que la situación empeore.
“Queremos ingresar a ver cómo están nuestras cosas, nuestros familiares están bien. Una parte de nuestra casa ha sido afectada, no todo. La fábrica de Thinner tiene un buen tiempo funcionando aquí”, comentó uno de los vecinos afectados a Panamericana Tv.
“Hemos tenido mucho miedo. Hay mucho cables colgados porque desgraciadamente puede afectar a todas las casas y el gran defecto es que las fábricas que se encuentran aquí no tienen sistema de incendio”, dijo otra persona al noticiero matutino.
Por su parte, el Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología del Perú (Senmahi) advirtió que los contaminantes del aire ocasionados por el siniestro, se vienen desplazando con dirección hacia el noreste.
Senamhi recomendó a la población a seguir las instrucciones de las autoridades con fines de evitar la exposición a humos tóxicos que puedan afectar la salud de las personas. El organismo adscrito al Ministerio del Ambiente exhortó a las autoridades y población en general estar atentos ante similares siniestros e invita a informarse sobre la vigilancia de la calidad del aire en tiempo real a través del siguiente enlace: http://www.senamhi.gob.pe/?p=calidad-de-aire.
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