Lima, una ciudad en la que cada día se vuelve más difícil encontrar un departamento a un precio cómodo y más aún con la crisis política y económica que se vive actualmente en el Gobierno de Pedro Castillo. Según la Asociación de Empresas Inmobiliarias (ASEI), el alza de los precios por metro cuadrado coincidió con una caída en la oferta total en Lima. Aún así, muchos esperan con ansias que la inversión del sector se reactive este 2022.
El precio promedio del metro cuadrado en Lima Metropolitana es de S/6.594 al cierre de enero, cifra que es un 11,9% más frente a lo observado en el mismo mes hace un año (S/5.891). Así lo reveló un reciente informe publicado por la Asociación de Empresas Inmobiliarias.
Ricardo Arbulú, presidente del Comité de Análisis de Mercado del referido gremio, explica que uno de los factores que más influyó en la evolución es el alza del tipo de cambio. Además, que se encuentra en constante subida y bajada.
“Desde agosto del 2021 a la fecha fueron los meses en los que observamos un incremento del dólar. Ello incrementó el costo de construcción de la vivienda, dado que alrededor de un 30% del presupuesto de obras son materiales que están en dólares”, asevera.
Los distritos que conforman la Lima Moderna, es decir, Jesús María, San Miguel, Magdalena del Mar y Lince, registraron un alza del 8% en un año y su precio promedio actual es de S/6.765 por metro cuadrado.
En tanto, la oferta en Miraflores, San Isidro, Santiago de Surco y demás distritos que conforman Lima top registran un precio de S/8.103 por metro cuadrado: un alza anual de 3,9%.
Los precios promedio más baratos en la capital se encuentran en Lima Norte (S/2.903), Callao (S/3.807) y Lima Este (S/4.123).
LAS PERSONAS YA NO QUIEREN INVERTIR
Esta alza de precios coincide con la caída de la oferta de vivienda formal de más de 3 mil unidades en los últimos siete meses, cuando comenzó la gestión del presidente Pedro Castillo. “Las menores apuestas de inversión de hace un año hacen que la oferta actual haya disminuido. Es una variación anual del 6% a enero del 2022″, explica Arbulú.
El lado bueno, es que los ánimos por nuevos negocios se han revertido en el mes de enero. El 51% de las empresas inmobiliarias piensa aumentar sus niveles de inversión en los próximos 12 meses. Dicho grupo, entre mayo y agosto del 2021, era de apenas 20,5%.
EXPECTATIVAS
Ian Kishimoto, gerente general de la inmobiliaria Alerces, menciona, en diálogo con el diario El Comercio, que este año esperan aumentar sus niveles de inversión de cara a un crecimiento de ventas del 10% al cierre del 2022.
“La incertidumbre es un componente que siempre estará presente en toda inversión, pero no debería limitarnos a buscar oportunidades que se traduzcan en nuevos proyectos”, advierte.
Miguel Deustua, gerente general de Granadero Inmobiliaria, considera que este es un momento en el que las inmobiliarias buscarán aprovechar la dinámica de ventas.
“Vemos una baja en el dólar y el apetito por nueva inversión inmobiliaria se ha reactivado. La velocidad de ventas en el sector inmobiliario no se ha visto afectada. Se ha mantenido estable. Hubo afectación, pero la inversión inmobiliaria se está reactivando. Hoy ya ves a más de un inmobiliario interesado por la compra de un terreno”, asevera.
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