A más de un mes del derrame de petróleo ocurrido en la refinería La Pampilla en Ventanilla ocasionado por la empresa Repsol, esta debía retirar el sistema de tuberías de carga y descarga de hidrocarburos (PLEM, por sus siglas en inglés) este pasado sábado 5 de febrero, pero no cumplió con su compromiso de hacerlo, esto según fuentes del Organismo Supervisor de la Inversión en Energía y Minería (Osinergmin).
El PLAEM del Terminal Multiboyas N° 2 es donde se produjo la fuga de 11.900 barriles de petróleo el mes pasado, por lo que Osinergmin pidió a Repsol sustituir la infraestructura metálica submarina por dos motivos: el primero, para evitar nuevos episodios de derrame de crudo y el otro para efectuar peritajes y determinar qué ocasionó la fuga de petróleo.
Hasta el momento no se sabe exactamente qué provocó el derrame de petróleo en la refinería La Pampilla. El PLEM es una infraestructura submarina que se ubica al final de una tubería para conectar el ducto submarino de la refinería con las mangueras del buque. El PLEM recepciona y distribuye los hidrocarburos.
El titular de Osinergmin, Jaime Mendoza, aseguró que el retiro del PLEM estaba planeado para el sábado 29 y domingo 30 de enero, sin embargo esto no fue así.
Mendoza explicó que para extraer el PLEM primero se debía recolectar todo el crudo que quedó almacenado en el ducto de 4.500 metros que va desde la infraestructura metálica hasta la refinería La Pampilla.
Hasta esa fecha, dijo el titular del Osinergmin, se habían retirado 14.000 barriles, pero faltan otros 2.200.
Este último fin de semana, como se había prometido, no se retiró el PLEM ni tampoco los barriles restantes que todavía se encuentran en las tuberías. La empresa Repsol es el que se tiene que encargar de estas responsabilidades y Osinergmin es el ente encargado de la supervisión.
El miércoles 2 de febrero, la Comisión de Energía y Minas del Congreso invitó a los representantes del Osinergmin para que informaran sobre los avances de sus competencias.
LA LIMPIEZA TERMINARÍA EN MARZO
El responsable del equipo de Control de Emergencia, José Torel, admitió que la magnitud del desastre ha rebasado los pronósticos de la empresa. Por ello, ahora han modificado el cronograma, calculando que la limpieza de hidrocarburo se daría a fines de marzo.
“En un escenario optimista”, precisó Torel, quien tuvo que venir desde la filial de España para liderar el proceso de retiro del crudo.
El funcionario también reconoció que el proceso de limpieza va lento. Luego de 20 días de haberse registrado la fuga del petróleo en el mar de Ventanilla, Repsol solo ha avanzado un 32% en el proceso de limpieza.
El ejecutivo explicó que el retraso se debe a que existe un fenómeno en la playa que les está complicando la tarea.
“El crudo se está quedando entre la costa y el mar, en lo que se conoce como la rompiente. Ahí es muy difícil acercarnos y ahora estamos elaborando una estrategia para obtener ese crudo”, dijo en una visita a la refinería La Pampilla, según La República.
“Según la marea y los vientos, ese crudo a veces va al mar y ahí lo recogemos, pero otras veces regresa a la playa, y una playa que teníamos limpia tenemos que volver a limpiarla”, agregó.
Tello tiene a su cargo tiene a casi 3 mil personas para la limpieza, de las cuales 2 mil 300 están en operativos en la costa, 500 en el mar y 90 en el centro de control. También se reúne con todos los especialistas internacionales que representan a las 50 empresas que actualmente están colaborando con el proceso de remediación y limpieza.
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