El viernes pasado, el semanario ‘Hildebrandt en sus trece’ se convirtió en el primer medio de comunicación que obtuvo una entrevista exclusiva con el presidente Pedro Castillo desde que asumió la presidencia hace siete meses. El jefe de Estado ya había adelantado en diciembre pasado mayor apertura con la prensa.
En declaraciones posteriores a la entrevista, el periodista César Hildebrandt habló sobre el encuentro que tuvo con Castillo. Indicó que si bien ellos estuvieron buscando por meses ese diálogo, fue el mandatario el que decidió darles la entrevista.
Sobre sus respuestas dijo que se puede ver que el jefe de Estado “no tiene un plan para el Perú, es duro decirlo y eso es alarmante, pero no tiene una concepción de lo que quiere hacer con el país, no tiene un horizonte de sus prioridades”.
Dijo que son cinco años de gobierno y la prioridad no puede ser la vacunación, porque eso “es simplemente un recurso urgente, la asistencia determinada por las circunstancias”. Hildebrandt pudo confirmar que Castillo tiene un altísimo grado de improvisación, y no tiene un equipo que pueda sostener una política “porque no hay política”.
Señaló que el presidente confía en el paisanaje, es un hombre lleno de buena fe y de buenas intenciones, pero que no está a la altura del desafío. Y reconoció que salió preocupado de la entrevista que tuvo la semana pasada.
“[Pedro Castillo] Necesita ahora una rectificación central. Es un hombre bueno, pero sin rumbo, sin brújula, sin capital (...) Hago una invocación, organícese, establezca un plan, priorice, rodéese de gente menos chiquita mentalmente. El Perú lo necesita. Sino la oposición se lo va a devorar”, expresó.
INCIDENTE
Asimismo, el director de Hildebrandt en sus trece contó un suceso terminada la entrevista. Ocurrió con uno de los asesores del presidente cuando iban rumbo a la puerta de Palacio de Gobierno que da a la calle Desamparados.
Para el periodista fue algo “de muy mal gusto”. “Me preguntó: ‘Sr. Hildebrandt, usted no tiene publicidad estatal, ¿no?’. Mi respuesta fue, por si acaso, ‘no la tengo y tampoco la quiero’. Así que cuidado”.
SOBRE LA ENTREVISTA
En esta primera conversación con el semanario ‘Hildebrandt en sus trece’, Castillo Terrones decidió responder a todos los cuestionamientos y polémicas que ha protagonizado desde que asumió el poder. Indicó en primer lugar que no está decepcionado de sí mismo y que todo se trata de un aprendizaje diario. “Soy un hombre del pueblo, soy una persona que cree que está haciendo algo importante por el país, por la familia, y me doy cuenta de que lo que haga o deje de hacer cuesta mucho, y estoy comprometido a hacer las cosas bien”, indicó.
Respecto a las promesas incumplidas y que le serán difícil de cumplir, Castillo Terrones se justificó y manifestó que “si no hubiésemos tenido la pandemia, quién sabe si por lo menos parte de lo prometido ya estaría encaminado por lo menos. Pero créame, nos hemos tenido que meter con zapatos y todo en el asunto de la salud, a rescatar la vida de nuestros compatriotas. Le digo también que lo que se ha ofrecido debe cumplirse, pero lo primero es ver sano a mi pueblo”.
Asimismo, consideró también que la designación de Guido Bellido como primer ministro y Bruno Pacheco (secretario de presidencia) fue “un equivocación” y que “uno aprende de los errores”. “En la política, en la medida que uno aprende, hay que saber diferenciar las amistades de las responsabilidades…”
“Yo concibo la democracia como una participación activa y en forma responsable. Y creo que a veces cometemos ciertos exabruptos cuando se quiere sacar políticamente algunos réditos… Algunos siguen pensando que soy una amenaza. Yo creo que hay la necesidad de poner una mesa abierta para corregir algunas cosas que, valgan verdades, es necesario corregir”, recalcó el mandatario.
En otro momento, Pedro Castillo habló sobre su relación con la empresaria Karelim López y sus polémicas reuniones en la casa del pasaje Sarratea en Breña. Sobre López, Castillo negó conocer a la también lobista, a pesar de ser la persona que le organizó el cumpleaños de su hija menor. “La señora Karelim López no es mi amiga… Es una persona que, como cualquier ciudadano, ingresa a alguna entidad, ingresa a Palacio y no nos arrastra ningún vínculo amical, ningún vínculo laboral…”.
“Para mí también fue una sorpresa eso (fiesta de cumpleaños de su hija). Nosotros nos trasladamos a Tacna y en la tarde llegamos a despachar y siempre los cumpleaños de la familia se han hecho tomándonos un café, de una forma sencilla y familiar. Después yo me enteré que fulano y zutano habían organizado una fiesta. Pero yo no planifiqué nada de eso…”, agregó.
Indicó además que él nunca citó a López. “No sé por qué fue y nunca nos encontramos. Hoy está en un proceso de investigación y estoy llano para que estas cosas se vean con transparencia…”.
SEGUIR LEYENDO: