¿Cuáles son las zonas más dolorosas para hacerte un tatuaje?

Te contamos cuáles son las zonas más sensibles del cuerpo para que las tengas en cuentas si estás pensando en hacerte un tatuaje.

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Conoce qué zonas son las más dolorosas para hacerte un tatuaje.
Conoce qué zonas son las más dolorosas para hacerte un tatuaje.

Los tatuajes son algo que nos hacemos con la intención de tener toda la vida en nuestra piel, por eso, si estás pensando en hacerte uno lo más probable es que lleves un tiempo meditando qué hacerte y en qué parte.

Otro factor que se debe tomar en cuenta en esta decisión, es el dolor. Si bien este puede variar dependiendo del tamaño del diseño, el artista que lo haga y la zona que elijas, realizarte un tatuaje es un proceso que suele venir acompañado de cierto dolor, ya que la tinta se inyecta en la segunda capa de la piel por medio de punciones.

Si tienes un umbral del dolor bajo continúa leyendo la siguiente nota para enterarte cuáles son las zonas más dolorosas para hacerte un tatuaje y lo pienses dos veces antes de hacértelo en alguna de estas partes.

CAJA TORÁCICA

Los tatuajes en las costillas y en general en el pecho suelen ser bastante dolorosos, ya que no es una zona que tenga mucha grasa, músculo o piel, por lo que se siente mucho más el roce de la aguja. Además, esta zona puede resultar bastante dolorosa porque los nervios que rodean las costillas están muy cerca de la superficie de la piel.

Otro factor que hace que las costillas sean uno de los lugares menos recomendados para realizarte un tatuaje si tienes poca tolerancia al dolor es que incluso al terminar el proceso de tatuado, las costillas se seguirán moviendo cada vez que respires, haciendo que el dolor dure hasta por varias horas, sobretodo si es un tatuaje grande.

PIES/TOBILLOS

El dolor que produce un tatuaje en esta zona se puede parecer al de las costillas o pecho, ya que la piel está muy pegada al hueso y hay poca grasa y músculo que amortigüe el roce de la aguja. Además, por os tobillos y la zona del empeine pasan bastantes terminaciones nerviosas haciéndolos lugares sensibles, por eso es que un golpe en el tobillo puede provocar una sensación de electricidad que recorre todo el pie.

Otro punto importante es que si después de hacerte un tatuaje en alguno de estos lugares tienes que caminar, esto puede causar que el dolor se alargue por unas cuantas horas hasta que puedas descansar.

AXILA

Aunque pueda parecer una zona poco común, al igual que la cabeza, hay personas que deciden tatuarse la axila a pesar de que sea una de las zonas más dolorosas. La presencia del nervio axilar, las glándulas y lo sensible que es la piel en esta zona hacen que sea una de las más dolorosas.

Además, es una zona difícil de tatuar debido a la textura que suele tenerla piel en esta parte, por lo que muchos tatuadores prefieren no trabajar en ese lugar.

CABEZA

Los tatuajes en la cabeza están dentro del grupo de los menos usuales. Esto se debe a que requieren más cuidados debido al crecimiento del cabello y a que es una zona que es conocida por ser muy dolorosa para quienes se han atrevido a inyectarse tinta ahí.

El proceso de tatuarse el cráneo no es sólo doloroso debido a la falta de grasa que hay en la cabeza o la gran cantidad de nervios, sino también puede ser atemorizante, dado que el ruido y la vibración se sentirán con mucha más intensidad haciéndose insoportables en algunos casos y provocando la sensación de que te están taladrando la cabeza.

INGLE

Esta podría pasar como una zona poco dolorosa debido a que no está cerca del hueso y hay bastante carne y músculo. Sin embargo, lo que la hace dolorosa es el gran número de terminaciones nerviosas que existen en la ingle o el muslo interno.

Al ser tan sensible, esto puede producir dolor al momento de tatuar, además que es una parte que se irrita con facilidad, por lo que el roce de la aguja puede inflamar la zona y ponerla aún más sensible.

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