La Defensoría del Pueblo se presentó en las zonas donde la refinería La Pampilla de Repsol había vertido más de 6 mil barriles de crudo al océano. La visita tenía como principal fin verificar las acciones que se vienen llevando a cabo en la zona con el fin de recuperar la zona impactada. Una de las observaciones publicadas por la entidad pública fue que existe un número reducido de personas dedicadas a las labores de limpieza.
Delcy Heredi, jefa de la Oficina Defensorial del Callao, informó que se apreció que el personal de serenazgo y salvataje estuvo dedicado a evitar el ingreso de bañistas a las playas, así como cincuenta trabajadores enfocados en la limpieza de las orillas afectadas. “Sin embargo, se pudo comprobar que el número de personas dedicadas a esta tarea continúa siendo muy limitado debido a la magnitud del desastre”, señala el comunicado difundido.
La Defensoría ha solicitado que se mejoren los tiempos y las estrategias de limpieza en la zona con el fin de generar un cambio positivo lo antes posible. Tal como se recuerda, varios usuarios de internet mostraron su indignación cuando se publicaron imágenes del personal de limpieza trabajando con recogedores frente a un desastre de tal magnitud. Defensoría “exige a Repsol que garantice la entrega de elementos de bioseguridad y de protección solar al personal que viene desarrollando dicha tarea, a fin de evitar contagios de COVID-19 y daños en la salud como resultado de la exposición prolongada al sol”.
OTRA VISITA
Mientras se llevaba a cabo la visita en Ventanilla, trabajadores de la misma entidad también se presentaron en la zona afectada ubicada en Ancón. El comunicado señala que se constató el grave daño que ha ocasionado el derrame de crudo en el concurrido balneario limeño. “No solo ha sido gravemente afectado el ecosistema marino sino también los sectores pesquero y turístico que son las principales actividades generadoras de ingresos económicos en la zona”, agrega el comunicado.
Al menos 800 pescadores se han visto impedidos de continuar sus labores en esta zona por la situación en la que se encuentra el mar. También se reveló que integrantes de la Asociación Artesanal de Pesca de Ancón fueron impedidos de ingresar a una reunión con autoridades nacionales. “Ante ello, la jefa de la Oficina Defensorial de Lima Norte, Estela Lozano, demandó a los ministerios del Ambiente y de la Producción informar a los pescadores sobre las labores que vienen desarrollándose en la zona para contener el avance de la marea negra”.
En la zona se pudo constatar la presencia de personal de la Marina de Guerra del Perú, quienes estaban ayudando en las labores de limpieza de orillas; sin embargo, este trabajo resultó insuficiente frente al ecosistema que ha sido duramente afectado. Ante este escenario, la Defensoría ha pedido que se acelere el recojo de crudo en la zona ya que gran parte de la zona marina y costera de la capital se ha visto gravemente afectada. “La Defensoría del Pueblo continuará con su labor de supervisión a las instituciones encargadas de garantizar que la empresa implemente las acciones destinadas a atender de manera efectiva el derrame y su adecuada remediación ambiental, bajo el principio de que el contaminador es responsable”.
Al igual que otras instituciones, la Defensoría del Pueblo ha solicitado a la refinería La Pampilla y el OEFa que garanticen la limpieza inmediata del petróleo derramado en la zona norte de la ciudad capital.
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