Aproximadamente, 6 mil barriles de petróleo derramó la empresa Repsol, que administra la refinería La Pampilla, en las playas Cavero, Bahía Blanca y Costa Azul, ubicadas en Ventanilla, el último sábado, y no 7 galones como informaron en un principio.
Así lo confirmó el ministro del Ambiente, Rubén Ramírez Mateo. Según explicó, la empresa realizaba un procedimiento de carga y descarga del combustible cuando se generó el accidente por las altas mareas registradas en el litoral debido a la erupción volcánica en Tonga.
“Se ha afectado la descarga de un buque internacional que traía aproximadamente 1 millón de barriles de crudo para ser procesado justamente en esta planta. Se ha estimado que ha habido un derrame de 6 mil barriles de petróleo”, dijo el ministro a la prensa.
En busca de medir la magnitud del derrame, Ramírez indicó que realizó un sobrevuelo sobre el litoral y observó que la contaminación del petróleo llega casi hasta la bahía de Ancón.
“Hemos hecho hoy día un vuelo para la determinación del daño ambiental. Se ha visto que se ha afectado áreas no solamenta playeras, sino que ha llegado hasta Ancón, por eso hemos exhortado a que la empresa cumpla su procedimiento de contingencia”, agregó.
De acuerdo al ministro del Ambiente, la multa para Repsol podría ser de hasta 30 mil UIT (Unidad Impositiva Tributaria), que equivaldría a un monto aproximado de S/138 millones.
“Va a haber sanción de acuerdo a la omisión o acción que ha cometido la empresa, de eso no tengan dudas. El hecho no solo es haber avisado a tiempo, sino también describir la magnitud del desastre, y eso es una sanción de hasta 30 mil UIT”, comentó.
“La empresa al no avisar, ya tiene una infracción y el no hacerlo de formar correcta, sería otra. El OEFA (Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental) y SERNANP han actuado inmediatamente para fiscalizar y supervisar lo que ocurrió tras el derrame de petróleo en el litoral”, continuó.
Asimismo, el titular del Ministerio del Ambiente manifestó que el presidente Pedro Castillo se podría acercar en las próximas horas a la zona donde ocurrió el desastre ecológico. “El presidente tiene un respeto por la tierra y el medio ambiente, él es rondero y ellos son aliados. Este es un tema de todos”, adelantó.
“Todas las autoridades tanto nacionales, regionales y distritales están afrontando y exigiendo a la empresa que cumpla con su procedimiento de contingencia”, finalizó.
INTENTAN LIMPIAR EL MAR CON ESCOBAS Y RECOGEDORES
Por su parte, el alcalde de Ventanilla Pedro Spadaro, se mostró disconforme con la forma en que la empresa Repsol intenta limpiar el desastre ambiental. “Nos encontramos en la playa Cavero y hemos podido evidenciar que hay 4 kilómetros de mar absolutamente negro. Hay animales muertos que vuelven a las orillas. Este es un atentado contra la ecología. Esto se está escapando de las manos”, expresó.
“Vinieron 15 personas, con escobas y recogedores para tratar de limpiar la playa. Se han ido a almorzar y nuevamente el mar se ha encargado de ensuciar esa parte que había limpiado. Es una ridiculez que manden 15 personas con recogedores para poder limpiar cuatro kilómetros del daño que tenemos en el litoral””, declaró el alcalde en una entrevista a RPP.
Además, el burgomaestre de Ventanilla reiteró que la empresa no comunicó debidamente al municipio el derrame de petróleo. “De manera irresponsable no se comunicó nada ni a la municipalidad ni a la autoridad policial. Esto es un grave daño exponiendo a los veraneantes”, señaló Spadaro.
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