Una vez la mala educación nos juega un desafortunado escenario. Tras las celebraciones por Navidad, cientos de bañistas no dudaron en ir a la playa Agua Dulce en el distrito de Chorrillos, aprovechando el día libre y los rayos del sol que alumbran por la capital.
Sin embargo, poco les importó las medidas de bioseguridad que el Gobierno ha impuesto tras la aparición de la nueva variante ómicron en nuestro país.
Es así que muchos de estos bañistas rompieron los cordones de seguridad y decidieron trepar los muros e ingresar de manera abrupta para disfrutar del mar costeño.
Lamentable fue la sorpresa, ya que muchos de estas personas que acudieron a este lugar, dejaron gravemente contaminada la playa por el exceso de basura. Bolsas de plástico, huesos de pollo, de pescado, tapers de tecnopor, mascarillas, pañales, botellas de plástico, fueron algunos de estos desperdicios que encontraron los agentes de limpieza de la municipalidad de este sector.
Asimismo, no solo dejaron basura, sino que los miembros de serenazgo, incautaron más de 8 mil botellas de licor, las cuales fueron retenidas, ya que está prohibido el ingreso de estas bebidas.
En las imágenes emitidas por los canales de TV, se observa que se incautaron botellas de cerveza, ron, whisky, vino y entre otros, los cuales pretendían ser ingeridos en esta populosa playa de Lima.
Fueron más de 15 mil personas las que acudieron a la playa Agua Dulce durante el último fin de semana largo que se dio luego de la Navidad, pero muchos de ellos no acataron la normativa.
“El fin de semana hemos incautado ocho mil botellas de licor, hemos sancionado y multado a 20 personas irresponsables las cuales han acudido con el licor a la playa, la multa es de 1,100 soles”, expresó el gerente de Desarrollo Económico de la Municipalidad de Chorrillos, Tony Oropeza para Exitosa.
“Todo este material que ha sido incautado va a ser desechado en un lapso de 48 horas, salvo que la persona que ha sido multada venga a recoger sus productos, previo pago a la multa”, agregó.
Es importante destacar que pese a que durante la jornada del fin semana, hubo 100 efectivos fiscalizadores y supervisores que evitaban que las personas ingresen con estas bebidas alcohólicas, pero lamentablemente ante la masiva concurrencia, se filtraron miles de estas botellas, las cuales eran escondida entre la ropa de los niños.
“En el ingreso hacemos un control exhaustivo, tanto de alimentos como de alimentos, sin embargo, las personas irresponsables utilizan a los menores de edad para ingresar estos licores. Usan los bolsos de bebes y coches, entre otros”, precisó.
Antes de terminar, el gerente de la municipalidad, lamentó que las personas no tengan la cultura de cuidar sus playas por el exceso de basura dejada en el lugar, pese a que muy cerca de este balneario hay contenedores de desechos donde pueden echarla sin problemas.
Asimismo, pidió a la población cuidarse, ya que casos por la variante ómicron están creciendo de una manera muy rápida.
PLAYA SALAVERRY CONTAMINADA POR EXCESO DE BASURA
El mismo escenario presenta la playa Salaverry en Trujillo, quienes los bañistas no respetaron el distanciamiento social, ni el uso correcto de las mascarillas. Asimismo, mucho de estas personas llevaron comida y dejaron el balneario norteño lleno de basura.
Personal de limpieza desde tempranas horas recolecta la basura dejada por la comunidad, quien lamentablemente no toma conciencia de la importancia que es cuidar nuestro ecosistema, las playas y sobre todo a la naturaleza.
Gerentes del municipio trujillano tomarán medidas para que esta escena no se repita en Año Nuevo, ya que esto genera una gran problema al ecosistema.
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