Un sujeto, quien no quiere que se sepa su nombre, hace cuatro décadas fue un reportero en busca de primicias, pero un día decidió dedicarse a emprender su propio negocio y ahora es dueño de una lía de bus que transita por las calles de Lima.
Según menciona, el pasado sábado 27 de noviembre fue contratado para llevar personas a la marcha en favor de la vacancia del presidente Pedro Castillo, que se llevó a cabo en el centro de Lima.
“Dos semanas antes vinieron a nuestra empresa de transportes, en una camioneta negra, una señora gringa, muy blancona y muy bien vestida, acompañada de otros señores, con porte militar. Llegaron para contratar 15 buses. A un compañero de nuestra empresa con quien hicieron el trato, le dijeron que era para llevar a personas a la marcha del sábado”.
Lo que les pidieron fue que trasladaran personas desde las 2 de la tarde y regresarlos a las 7 de la noche. La base principal de la empresa de transportes del sujeto mencionado se encuentra en el distrito de Chorrillos, de ese punto se tuvo que trasladar a las personas a la avenida Peruanidad, ubicada en el distrito de Jesús María.
“Había varios puntos de salida de los buses. A mí me tocó la zona de San Genaro, toda esa parte donde está el mirador en Chorrillos. A otro compañero le tocó Buenos Aires. Y a otro en Pamplona... Yo acepté por curiosidad y porque nos ofrecieron pagar 400 soles por solo llevar y traer gente. Nos mostraron la lista con los puntos de salida y nos dijeron que momentos antes de la hora de partida iban a traer materiales para también llevarlos a la marcha”. añadió.
Y así fue, muchos jóvenes de nacionalidad venezolana habían sido contratados para traer a los buses cajas y paquetes de bebidas, banderas, polos, papeles con las frases que los manifestantes debían decir y carteles de diversos tamaños.
“Esa gente que trasladaba un montón de carteles eran ‘chamos’. Se movilizaban mucho, trabajaban bastante, se notaba que eran ‘chamos’, ellos cobraron también”.
Los carteles tenías escrito diversas frases de rechazo al gobierno de Pedro Castillo. En las pancartas leyó lemas como ¡Vacancia ya! ¡No al comunismo! ¡Le mientes al pueblo! ¡Fuera corruptos!
El sujeto llevó su unidad de transporte público al punto que le encargaron.
“Esperamos 15, 20, 60 minutos… y no llegaba nadie, eso ocurrió con varios de nuestros buses, totalmente vacíos. Algunas señoras llegaban y nos contaban que les habían pagado 30 soles para ir a la marcha”.
Además, recuerda cómo muchas de esas señoras hacían el amago de ir, pero buscaban un momento adecuado y se desaparecían, pese a ya haber cobrado un monto inicial.
“Algunas sí fueron, pero otras hacían que iban a ir, luego se perdían entre los buses, ya habían cobrado los 30 soles”.
También cuenta que algunos choferes decidieron irse con sus buses, llevándose la inicial (la mitad) que habían acordado. “Yo esperé un poco más, pero igual no llegó nadie. Otros partieron llevando poca gente. Otros se molestaron y no esperaron más, se llevaron las bebidas y los carteles”.
El sujeto, que ve por la economía de su hogar con 4 hijos, comprende a las numerosas personas, la mayoría de ellas mujeres madres de familia, integrantes de los comedores populares, que aceptaron ir a la marcha.
“Una de ellas me dijo que lo hacía por los 30 soles, pero no estaba ni siquiera enterada de que lo que pedían era que se vaya Castillo de la presidencia”.
Este, tiene 65 años, refiere que así como muchas madres de familia se retiraban llevándose el dinero que les habían dado como pago inicial, también lo hicieron varios choferes, llevándose sus buses y haciéndose los enojados.
Luego de la marcha, al día siguiente, les dieron una noticia a los transportistas. Debido a que estos les habías dicho a quienes los contrataron que los hicieron esperar y no llegó gente, indicaron que les iban a reconocer el pago de 300 soles.
“Querían quedar bien, pues –nos adelantaron– habrá otra marcha en diciembre”.
Le consultaron al sujeto si pensaba que eran personas del partido de Fujimori, López Aliaga o De Soto quienes habían contratado a la gente, mientras que él responde que “Puede ser de cualquiera de ellos. Repito, tenían corte militar”.
NO SABÍAN POR QUÉ MARCHABAN
Preguntada por una reportera del programa ‘Panorama’ si conocía el motivo de la marcha, una señora dentro de un bus respondió: “La verdad es que no tengo idea”.
Y ella misma repitió la interrogante a una de sus compañeras, quien a la vez se apresuró en decir que le pregunten a alguien que se sienta adelante.
LÓPEZ ALIAGA ASEGURA NO HABER PUESTO “NI UN SOLO MANGO”
El mismo día, el líder de Renovación Popular y excandidato presidencial, Rafael López Aliaga, defendió la marcha calificada en las redes sociales como una de las que tuvieron mayor inversión en los últimos tiempos.
López Aliaga indicó que “todos iban allí de manera espontánea” y además “yo no he puesto ni un solo mango”.
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