Miembros de las bancadas Avanza País, Fuerza Popular y Renovación Popular presentaron este jueves ante el Congreso de la República una moción de vacancia para remover del cargo al presidente del Perú, Pedro Castillo, quien se acerca a los cuatro meses en el poder. Con 28 firmas, dos más que las exigidas para iniciar el trámite ante el Pleno, la moción fue presentada bajo el sustento de una permanente “incapacidad moral” para ejercer sus funciones.
Ahora, la oposición necesita 52 votos para que sea discutida, es decir, las dos quintas parte de todos los congresistas. Y una vez que se acepte la moción para ser discutida, el presidente Castillo deberá presentarse en el Palacio Legislativo con un abogado para defenderse. Para que la vacancia proceda debe haber 87 votos, que es la mayoría calificada, equivalente a dos tercios del Congreso.
Miguel Antezana, profesor de los Programas en Comunicación Corporativa de ESAN Graduate School of Business, comentó que es difícil que se apruebe la vacancia. Sobre todo ahora que se han dado acercamientos entre Castillo y César Acuña, líder de Alianza para el Progreso.
Más allá de las adhesiones que pueda tener la vacancia, Antezana nombra los errores cometidos por Castillo para manejar esta situación. “Por lo que ha hecho hasta ahora, ha demostrado no tener un conocimiento claro del juego político. De hecho, en los 100 días ha tenido muy pocas acciones, los índices de desaprobación están creciendo, y no ha tenido muñeca política para negociar con otros partidos”, expresó.
Para el analista, no queda claro si el mandatario está entendiendo claramente lo que significa la presentación de vacancia, porque inclusive desde antes de que ganara la segunda vuelta ya estaba recibiendo ataques de la derecha, y se avizoraba un panorama conflictivo. Agrega que algo que le ha faltado a Castillo es que no ha tenido una posición política de acercamiento, de tender puentes para evitar una posible vacancia. “De hecho, él se muestra confiado, y las pocas manifestaciones que hace al interior del país son alejadas de la realidad”, dijo.
Antezana indica que esta desconexión de Castillo con el panorama político es preocupante, además de que minimiza las respuestas de la oposición, y minimiza el apoyo que está perdiendo en todo el país.
COMUNICACIÓN Y OTROS ERRORES
Para el experto, la parte comunicacional, desde su punto de vista ha sido la gran debilidad del jefe de Estado. Afirma que de por sí como personaje político tiene debilidades comunicacionales, y no llegó a la presidencia por tener esas habilidad, sino porque la mayoría no quería que gane Keiko Fujimori.
“Pero eso no impide que él, estando en el gobierno, hubiese podido reunir un equipo con una visión estratégica, preparado, con lo que se necesita para enfrentar a la actual coyuntura, A nivel general tiene grandes carencias a nivel comunicación y también pareciera que no tiene asesores que lo ubican en la realidad”, sostuvo.
Precisó que cuando el mandatario da sus discursos en el interior del país se le debe recordar que ya no está en campaña, porque hace pensar que está en un mitin, y eso no le hace ningún favor, explicó Antezana. Debe tratar de unirse con gente que lo asesore adecuadamente, enfatizó.
SEGUIR LEYENDO: