El ministro de Economía Pedro Francke puso paños fríos y aplicó la opción de ‘traducción’ del discurso del presidente Pedro Castillo sobre la ‘estatización o nacionalización’ del Gas de Camisea, provocando que el precio dólar vuelva a bordear los 4 soles, la BVL cierre en rojo y el empresariado sienta incertidumbre y dude en invertir en nuestro país, además que diversas bancadas en el Congreso duden en darle el voto de confianza al gabinete liderado por Mirtha Vásquez.
“Nacionalizar el gas de Camisea significa ponerlo al servicio de los peruanos y en particular de nuestros compatriotas del sur. No significa de ninguna manera estatizar la actividad privada. La masificación del gas para beneficio de todos los peruanos es nuestro compromiso”, escribió en Twitter el titular de economía apoyando a Castillo Terrones, quien previamentes tuvo que retractarse sobre su discurso dado en Bagua.
“Como Gobierno del Pueblo, somos y seremos respetuosos con la libertad de empresa. El gasoducto que llevará el gas al sur del país es nuestra prioridad, así como su masificación en beneficio de todos los peruanos. Ese es nuestro compromiso asumido con el pueblo y lo cumpliremos”, escribió el mandatario en la misma red social.
El presidente de Perú pidió el lunes al Congreso de la República que aprobara una ley para “la estatización o la nacionalización del gas de Camisea” y solicitó reformas importantes a la Constitución en discursos en eventos políticos separados. De esta manera, el mandatario revivió un debate que había iniciado hace unas semanas el entonces premier Guido Bellido.
“Instamos al Congreso para que hagamos una ley conjunta sobre la estatización o la nacionalización del gas de Camisea. Es necesario darles a los peruanos lo que el pueblo ha producido”, dijo Castillo desde la provincia de Amazonas en una transmisión por televisión estatal durante una gira por ciudades del norte del Perú.
INCERTIDUMBRE ECONÓMICA
Esto provocó una ola de críticas, no solo por parte de la oposición en el Congreso de la República, donde Mirtha Vásquez presentaba el plan de trabajo del gobierno y en el que no mencionó bajo ningún término el tema de ‘estatización’ del Gas de Camisea, sino también en el empresariado, pues el presidente del Banco Central de Reserva, Julio Velarde, mencionó que “las encuestas de agosto fueron muy negativas, mejoraron en setiembre y esperábamos que mejoren (las expectativas de las empresas) fuertemente en octubre, pero luego del anuncio (de Castillo) es posible que no sea con la intensidad que anticipamos”, señaló.
“Había cierto ánimo, aunque tal vez se piense que el crecimiento sería mediocre o que debería ser un mejor gobierno. Entendían que la situación iba a permitir que la inversión se venga dando. Ojalá que se ánimo no desaparezca del todo y podamos tener mejores perspectivas”, mencionó Velarde y señaló que hace unos días hubiera dicho que la expectativa de inversión privada para el 2022 se podría corregir ligeramente al alza, pero con las recientes declaraciones del presidente Castillo esto no se podría afirmar completamente.
El presidente de la Sociedad Nacional de Hidrocarburos, Felipe Cantuarias, dijo al diario Gestión que el anuncio del jefe de Estado podría afectar el diálogo que ya inició el Consorcio Camisea con el Ministerio de Energía y Minas con miras a la referida masificación.
En tanto, el director ejecutivo de la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía (SNMPE), Pablo de la Flor, manifestó que el llamado del mandatario para trabajar una ley de estatización de Camisea es una “amenaza nefasta que atenta contra la inversión privada y quebranta la reactivación económica”.
“Mientras persistan mensajes nocivos como el de la pretendida estatización de Camisea y de la convocatoria a una Asamblea Constituyente para derogar la actual Constitución, solo se conseguirá espantar la inversión y se deteriorará la generación de empleos”, indicó.
SEGUIR LEYENDO