Turrón de Doña Pepa: un kilo de este dulce equivale a comerse 40 panes con mantequilla

Se acerca octubre, el mes morado y una de las costumbres que tienen miles de peruanos es el consumo del famoso turrón de Doña Pepa que como en ninguna otra época del año se puede encontrar en la mayoría de tiendas alrededor del Perú.

El potaje a base de harina, anís tostado, ajonjolí, miel de chancaca y grajeas es indispensable en la mesa durante el mes morado. Sin embargo, la combinación de sus ingredientes contiene altos niveles de calorías que pueden causar problemas en la salud.

Un consumo en exceso puede ser perjudicial y más en aquellas personas que sufren de sobrepeso, diabetes y problemas de colesterol. Por ello, la nutricionista de EsSalud, Karen Calero, recomienda que se consuma con moderación puesto que un kilo de turrón equivale a 40 panes con mantequilla.

“Es inevitable no comer un pedazo de turrón en esas fechas, hay que consumirlo con moderación y retirando el exceso de miel y caramelos que cubren el tradicional postre”, comenta la especialista, según consigna la agencia Andina.

Asimismo, 125 gramos de turrón equivale a comerse 8 panes. Pero eso no es todo, el tradicional postre, a su vez, tiene grasas saturadas que al consumirlo en exceso aumenta el riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares, una de las principales causas de muerte en el mundo.

Cabe resaltar que el exceso de azúcar que contiene este potaje eleva los niveles de glucosa en la sangre, por lo que puede generar diabetes o perjudicar a aquellas que ya lo padecen.

Por todo lo mencionado anteriormente, vale preguntarse: ¿Cuánto sería lo recomendable ingerir?. La especialista en nutrición recomienda consumir una porción que no supere los 25 gramos que equivalen a dos panes con mantequilla para evitar llegar a la obesidad u otra enfermedad.

También, se sugiere que, antes de comprar un turrón, se verifique la fecha de vencimiento, que el producto esté bien sellado y que cada paquete contenga registro sanitario para garantizar su consumo.

Sin duda, el turrón de Doña Pepa, se ha convertido en un patrimonio culinario de nuestra nación y un dulce infaltable durante el mes de Octubre mientras se realizan las demostraciones religiosas más grandes del Perú.

ORIGEN DEL TURRÓN DE DOÑA PEPA

Según lo que se puede conocer, el turrón nace en el sigo XVII. La historia se reomenta a una esclava de nombre Josefa Marmanillo que vivía en Cañete y era conocida por su gran talento en la cocina. Lamentablemente, una extraña enfermedad dejó paralizado sus brazos, lo que impidió que siga trabajando. Fue por ese motivo que se le otorgó la libertad.

Esta situación hizo que su fe y creencia en los milagros del Señor de Pachacamilla, más conocido como el Señor de los Milagros o Cristo Morado, incrementara. Josefa viajó a Lima para encontrar la cura a su problema de salud.

Según cuenta la leyenda, Marmanillo llevó por primera vez el turrón hacía la imagen del Cristo Morado ofreciéndoselo y poco después, en su regreso a Cañete, aseguró estar curada de todo mal. Fue en su honor y por agradecimiento que creó este famoso postre.

Desde aquel entonces, cada mes de octubre, la popular “Doña Pepa”, venía a Lima para seguir ofreciendo su postre no sólo al Señor de los Milagros sino al resto de limeños que querían probarlo y se convirtió en una de las más grandes tradiciones a nivel culinario.

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