El Museo de Australia lanzó un proyecto musical protagonizado por ranas que busca desbancar a Bad Bunny, Taylor Swift y Drake de los charts de música con la misión de hacer conciencia en la sociedad sobre la importancia de esta especie y de conservar sus hábitats naturales, los cuales con el paso del tiempo han perdido como resultado de la urbanización.
Un total de 43 ranas de las especies más amenazadas a nivel mundial participaron en esta producción musical donde realizaron gruñidos, chasquidos, chillidos y graznidos para el álbum “Australian Frog Calls Songs of Disappearance”.
El museo australiano especificó que los animales que participaron en la producción son de todos los rincones del país, desde los arroyos de las montañas de Queensland hasta las cuevas de Kimberley.
“La mayoría de las grabaciones de este álbum son públicas, en ellas participaron diferentes especies de ranas en riesgo de extinción. El disco concluye con las conmovedoras llamadas de varias especies que ya han desaparecido”, describió la producción en su página oficial.
La líder del proyecto de FrogID, Jodi Rowley, curadora de anfibios y reptiles del museo, dijo al periódico The Guardian que en Australia ya han perdido a cuatro especies de ranas: la diurna del sur, diurna de hocico afilado y las incubadoras gástricas del sur y del norte.
La bióloga comentó que de las más 40 ranas que se encuentran amenazadas dentro del territorio australiano, hay algunas que no se han visto en varios años por lo que es probable que se hayan extinguido, “los anfibios están más amenazados y disminuyen más rápido que cualquier otro grupo de vertebrados”, explicó.
La mayoría de las ranas son animales nocturnos por lo que dar con algún ejemplar es demasiado difícil, incluso en las zonas donde abundan.
Un proyecto con las aves
El Museo de Australia realizó un proyecto similar en 2021 con 53 especies de aves en peligro de extinción, como parte de un plan de acción para resguardar a estos animales que residen en Australia.
David Stewart, aclamado sonidista de la naturaleza, colaboró en el proyecto junto con las organizaciones Nature Sound, Bowerbird Colectiva, Birdlife Australia, entre otras. El 9 de diciembre de ese año, el álbum se logró posicionar en la tercera posición de la lista de Australian Recording Industry Association (ARIA).
La producción fue realizada con el paisaje sonoro australiano de fondo y busca destacar a las especies que se pueden perder si no se toman las medidas necesarias para la conservación de la flora y fauna en el país.
La lista ARIA toma en cuenta las reproducciones de las canciones en YouTube, Spotify y Apple Music, incluso se realizó un video musical animado con la colaboración de los artistas Gooniyandi Mervyn Street y Bernadette Trench-Thiedeman.
Anfibios, los más amenazados a nivel mundial
De acuerdo con la lista de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) el 41 por ciento de los anfibios que existen a nivel mundial se encuentran en peligro de extinción.
La organización en defensa de estos animales silvestre, Amphibian Ark, estimó que desde la década de los 70 y 80 hasta la actualidad se han registrado aproximadamente 200 extinciones de ranas y sapos a nivel mundial.
Australia registra la peor tasa de extinción de mamíferos y de anfibios que cualquier otro país del mundo, esto después de los incendios forestales masivos que se registraron a consecuencia del cambio climático.
El Partido Laborista reveló a la Agence France-Presse (AFP) que durante los fuertes incendios forestales registrados en el país entre 2019 y 2020 se quemaron más de 8 millones de hectáreas de vegetación nativa, lo que obligó a casi 3 millones de animales a desplazarse de sus hábitats.
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