Los gatos son seres inteligentes y sobre todo independientes que difícilmente se sometan a nuestro designio y arbitrio, haciendo de la convivencia y sobre todo de la comprensión de su voluntad una especie de trabalenguas difícil de descifrar.
Muchos gatos tienen la costumbre de visitar varios hogares mostrándose en cada uno de ellos igual de cariñosos. Esta conducta no es un hecho fortuito ni casual, y si nos molesta debemos tratar de lograr que confíe en nosotros, prefiriendo estar en nuestra casa, lo que irá ocurriendo con el tiempo y lo demostrará a través de actitudes sobre las que debemos prestar la debida atención para poder entenderlas.
No se trata de que nuestro gato porque le guste pasear por la casa de los vecinos y a veces se quede con ellos, nos quiera menos. Lo que ocurre es que buscan compañías con las que se sienten también a gusto sin que con nosotros dejemos de estar en la mira de sus sentimientos afectivos.
Se afirma en términos generales que los gatos son fríos y no demuestran sus sentimientos pero sin embargo los especialistas opinan lo contrario. Los gatos sienten verdadero amor por su ser humano favorito y su entorno familiar, lo que van demostrando de forma sutil pero a la vez muy clara.
Algunos de esos signos de afecto y complacencia pueden ser:
- Camina cerca nuestro con la cola alzada y vibrante: de esta forma nos está saludando y lo hace con alegría y felicidad por estar junto a nosotros.
- Duerme encima nuestro o se acurruca sobre nosotros: esta actitud demuestra claramente que se siente tranquilo y por lo tanto le resta importancia al hecho de estar indefenso. Esta actitud la suelen también con otros gatos o con otros animales convivientes.
- Se pone panza arriba: la parte más vulnerable de cualquier animal, y el gato no es la excepción, es el abdomen. Si un gato se coloca con las patas y la panza hacia arriba es que está intentando manifestar seguridad, cariño y respeto, hacia el ser humano cercano a quien se lo demuestra. Rara vez se trata de una petición de mimos, por eso rechazan cualquier contacto la mayoría de las veces.
- Se mete en nuestra cama: si un gato hace esto está dando una clara señal de sentirse seguro y amado. Nuestro tamaño gigantesco, comparado con el gato, lo abruma. Lo cierto es que acostados las diferencias físicas se achican lo que los hace sentirse más seguros.
- Maullidos: es importante recordar que los gatos solo les maúllan a los seres humanos. Por eso cuando un gato adulto maúlla lo hace para comunicarse a través de una de las formas más cariñosas que tiene manifestando que quiere algo o simplemente conectarse con nosotros.
- Parpadeo lento: sería lo que conocemos como hacer “ojitos” parpadeando despacio, así nos manifiesta su felicidad por estar juntos. Es bueno devolverle el gesto repitiendo la mueca como una hermosa manera de comunicación multiespecie.
- Frotarse en nuestro cuerpo o ropa: repiten una actitud que suelen hacer con otros felinos, diciéndonos claramente que nos quieren, que nos considera sus amigos incorporándonos a su grupo social.
- Nos sigue y nos persigue a todos lados: con esa persecución por todo el hogar está queriendo decirnos que quiere estar cerca nuestro.
*El Prof. Dr. Juan Enrique Romero @drromerook es médico veterinario. Especialista en Educación Universitaria. Magister en Psicoinmunoneuroendocrinología. Ex Director del Hospital Escuela de Animales Pequeños (UNLPam). Docente Universitario en varias universidades argentinas. Disertante internacional.
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