Una de las preguntas que más predominancia tienen es: ¿tengo que castrar a mi perro? ¿Tengo que castrar a mi perra? Y yo les diría, la respuesta rotunda es: sí.
No sólo para evitar la procreación indeseada sino para evitar en el caso del macho los tumores testiculares. ¿Por qué? Porque no están los testículos, los testículos se eliminan en la castración del macho, pero además ante la ausencia del estímulo hormonal se produce una atrofia de la próstata que es otro de los órganos blancos para los tumores después de los 6, 7 años.
Entonces la castración de un macho, además de evitar la procreación indeseada, además de evitar el espíritu de vagabundeo, que el animal salga y ande vagabundeando por el barrio y además de evitar la agresión intraespecífica, es decir de perro a perro no la del perro al ser humano.
Además tiene beneficio de salud, la castración temprana de la hembra antes del primer celo o inmediatamente después del primer celo evita los tumores mamarios.
Una perra puede tener en el 85% de los casos una perra entera después de los 6, 7 años tumores mamarios, la mitad de esos tumores mamarios malignos, la mitad de su es tumores maligno metástasis.
Entonces si querés a tu perro a tu perra, castrarlo tempranamente evitarás las enfermedades, evitarás problemas y las consecuencias son mínimas prácticamente es una cirugía de rutina que con los estudios previos hechos a nivel sanguíneo y a nivel cardiológico y una anestesia adecuada y monitoreada prácticamente no tiene riesgos.
La esterilización o castración no engordará a su mascota. La falta de ejercicio y la demasiada comida hará que su mascota aumente kilos extras, más no la castración. Su mascota permanecerá en forma y reluciente mientras continúe proporcionándole ejercicio y controlando el consumo de comida.
Castrar a un perro es económico. El costo de la cirugía de esterilización/castración es mucho menor que el costo de tener y cuidar a una cría.
Debilidad e inactividad. Es importante saber que tras una operación como esta, el perro puede estar débil y sin ganas de moverse. De hecho, es recomendable que la actividad que realice durante las horas posteriores sea la menor posible, debido a los puntos de sutura. Conviene evitar movimientos bruscos durante las primeras 72 horas.
*El Prof. Dr. Juan Enrique Romero @drromerook es médico veterinario. Especialista en Educación Universitaria. Magister en Psicoinmunoneuroendocrinología. Ex Director del Hospital Escuela de Animales Pequeños (UNLPam). Docente Universitario en varias universidades argentinas. Disertante internacional.
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