La exclusividad y defensa del lugar de descanso es una las pautas que los perros tienen más marcada a la hora de manifestar su lucha vital por los recursos a su alcance.
El lugar de descanso es uno de esos recursos por los que un perro lucha y trata de tener su exclusividad.
El caso del gato es diferente ya que no es gregario ni jerárquico salvo algunas circunstancias muy especiales.
Sin embargo, no se pueden desconocer algunos beneficios emocionales que podrían traer los animales familiares, los animales del afecto a los chicos, que se encariñan y pueden inclusive llegar a verlos como un miembro más de la familia, dándoles sensación de seguridad a la hora de conciliar el sueño.
Algunos estudios discutidos aseguran que el colecho con animales tiene efectos terapéuticos, ya que aumentarían la sensación de bienestar y disminuirían el estrés.
Un factor nada desdeñable, a la hora de considerar esta posibilidad, es la condición de higiene y salud tanto de perros como de gatos, pues es claro que dormir con ellos puede ser un foco de transmisión de enfermedades, razón por la cual se recomienda mantenerlos al día con vacunas, por el bienestar de los animales y de sus tutores.
Otro factor más que importante es si en la familia los humanos sufren de alergia, situación en la que no será nada recomendable llevar a dormir a nuestro perro o a nuestro gato aumentando la estrechez del contacto.
Los expertos sugieren que las mujeres embarazadas no duerman con animales, como así tampoco las personas que tengan defensas bajas o están trasplantados.
Por otra parte, una de las desventajas de dormir con animales es que pueden llegar a despertar e incomodar a sus tutores durante la noche, con sus movimientos o sus ronquidos.
Hasta aquí un análisis somero y tal vez discutible de algunos de los factores a favor y en contra.
Pero lo más trascendente del colecho con perros es que para el perro su lugar de descanso es algo por lo que se lucha en la vida, más aún si está al lado de
su líder o peor aún de su individuo favorito.
En esas circunstancias, la situación puede tener conatos de agresión, defendiendo una situación muy fácilmente evitable si disponemos de un lugar de descanso exclusivo para que no haya disputas que confundan los roles y las jerarquías.
Muchos incidentes serios con perros y su agresión han comenzado por la pelea del lecho compartido con humanos .
Solo esto y por esto fundamentalmente es que en el caso del perro la exclusividad del lecho resulta fundamental e indiscutible.
*El Prof. Dr. Juan Enrique Romero @drromerook es médico veterinario. Especialista en Educación Universitaria. Magister en Psicoinmunoneuroendocrinología. Ex Director del Hospital Escuela de Animales Pequeños (UNLPam). Docente Universitario en varias universidades argentinas. Disertante internacional.
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