Cuando llegan los días más largos y más soleados, es normal que queramos pasar más tiempo con el perro, ya sea dando paseos más largos, haciendo salidas al campo o practicando deporte con ellos.
Los perros son felices si realizan actividades al lado nuestro. Por otra parte, el ejercicio es beneficioso para todos. Así que el desafío será encontrar aquel deporte que nos permita estar más tiempo juntos vinculándonos mejor.
Por supuesto que es imprescindible someterlo y someterse a exámenes veterinarios y médicos previos que habiliten la condición idónea para esta actividad de conjunto.
Seguro que alguno se ajusta a nuestras necesidades y preferencias, aunque de no ser así, siempre nos queda la posibilidad de remolonear y jugar con nuestro perro fuera de toda disciplina establecida.
Agility
El Agility es un circuito de obstáculos que el perro debe superar con éxito lo más rápido posible, guiado únicamente por la voz o señales de su dueño. Con la práctica irá cometiendo un menor número de fallos.
Está compuesto por valla, balancín, neumáticos, empalizada, mesa, slalom, túnel rígido, túnel flexible y/o túnel ciego, caballetes, pasarela y algunos elementos más.
Practicar Agility puede ser muy divertido, pero hay que asegurarse siempre de que se acude a un centro cuyos obstáculos son aptos, ya que, de lo contrario, el perro podría sufrir alguna lesión.
El Agility tiene unas normas bastante exhaustivas, así que quien esté interesado en practicarlo, es recomendable que las conozca claramente al comenzar su práctica.
Discdog (disco con el perro)
El discdog consiste en lanzar un disco volador o frisbee para que el perro lo tome antes de que toque el suelo. A medida que se avanza en su aprendizaje y evolución, se incorporan mayor número de frisbees, lanzamientos desde distintos ángulos, saltos por encima del guía y muchas figuras que harán más compleja la actividad.
El discdog puede realizarlo casi cualquier perro que tenga interés y es una buena vía para canalizar la hiperactividad de muchos de ellos.
Sin duda es el elegido en el caso de los perros con gran espíritu de traída (los Retriever, Golden Retriever, Labrador y sobre todo los Border Collie por su intensidad en el trabajo). Sea cual sea el deporte que se elija practicar cualquier actividad junto al perro, requiere de un binomio humano-perro en el que deberá existir un vínculo especial.
Para reforzarlo, hay que trabajar siempre en positivo con el animal. Al fin y al cabo, se trata tan solo de que ambos se diviertan y expresen su mejor relación.
*El Prof. Dr. Juan Enrique Romero. @drromerook es médico veterinario. Especialista en Educación Universitaria. Magister en Psicoinmunoneuroendocrinología. Ex Director del Hospital Escuela de Animales Pequeños (UNLPam). Docente Universitario en varias universidades argentinas. Disertante internacional.
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