El Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo publicó recientemente el “Anuario Estadístico Sectorial 2021″, que incluye indicadores relevantes sobre las negociaciones laborales colectivas sujetas a la Ley de Relaciones Colectiva de Trabajo. Esta información es útil para la elaboración y la revisión de las estrategias de negociación, así como para la gestión de los conflictos laborales colectivos; más aún ante un nuevo contexto normativo derivado del Decreto Supremo 014-2022-TR, que ha modificado el Reglamento de dicha Ley. Sobre esta data, se pueden destacar cuatro aspectos.
Primero, continúa la preferencia por la solución directa entre el empleador y las organizaciones sindicales o los delegados de los trabajadores. Así, de los 186 casos solucionados a nivel nacional que se registraron el 2021, 182 (97.85%) se realizaron mediante la negociación directa; 3 (1.61%) en la etapa de conciliación, donde un conciliador, designado por la autoridad de trabajo, facilita la comunicación entre las partes y permite un espacio adecuado para que estas puedan llegar a una solución; y, 1 (0.54%) a través del extraproceso, mecanismo que se activa luego de agotadas las etapas de negociación directa o de conciliación, y que se realiza de forma similar a esta última.
La gran parte de dichos casos corresponde a Lima Metropolitana, con un total de 118 (98.33%), los cuales siguen la misma tendencia de las etapas de solución: 118 (98.33%) se solucionaron mediante la negociación directa; 1 (0.83%) en la etapa de conciliación; y, 1 (0.83%) a través del extraproceso.
Segundo, la mayor cantidad de casos solucionados se concentraron en los meses de mayo (13%), agosto (14%) y diciembre (12%); y, la menor cantidad, en los meses de febrero (7%), abril (5%) y julio (5%). Respecto de Lima Metropolitana, los meses con mayor cantidad de casos solucionados también fueron mayo (12%), setiembre (13%) y diciembre (14%); y, los de menor cantidad, febrero (5%), abril (5%) y junio (4%).
Esta data permite identificar la intensidad de la solución del conflicto con miras a adecuar la estrategia de negociación (por ejemplo, la programación y el avance de las reuniones), considerando los factores internos (como los antecedentes de la negociación) y externos (por ejemplo, terceros interesados) que podrían alterar el desenlace natural del conflicto. Sin embargo, cada negociación es particular y depende de la decisión de dos o más partes; por ende, no se puede predecir la fecha de solución, pero sí gestionarla para que, mientras esté pendiente, tenga el menor impacto en la relación entre las partes.
Tercero, el Anuario señala que no tiene información de casos resueltos a través del arbitraje, es decir, mediante la decisión (laudo arbitral) de un tercero (árbitro o tribunal arbitral), debido al estado de emergencia y a la emergencia sanitaria. En la práctica, se han tramitado procesos arbitrales y se han expedido los respectivos laudos arbitrales; sin embargo, su utilización es minoritaria, entre otros factores, debido al costo adicional que demanda a las partes.
Y, cuarto, en el 2021 se registraron 429 pliegos de reclamos (peticiones de los trabajadores que inician las negociaciones); restando los casos solucionados, quedaron 243 (57%) casos no resueltos. Por eso, existen conflictos activos, sin considerar las negociaciones no solucionadas en períodos pasados o aquellas que empezaron este año. El contexto económico es difícil e inestable, lo cual se podría reflejar en negociaciones de difícil gestión y solución, siendo la planificación, la prevención y la comunicación las mejores herramientas para mantener relaciones laborales sostenibles.
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