Históricas elecciones en Colombia: ambas formulas están integradas de manera paritaria

Francia Márquez es candidata a la vicepresidencia por el Pacto Histórico y Merelén Castillo, por la Liga de Gobernantes Anticorrupción. La campaña estuvo marcada por una mayor atención y propuestas destinadas a las mujeres

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Francia Márquez y Marelen Castillo,candidatas a la vicepresidencia de Colombia
Francia Márquez y Marelen Castillo,candidatas a la vicepresidencia de Colombia

Este domingo 19 de junio se realizará la segunda vuelta electoral en Colombia. Con un padrón integrado por más mujeres que hombres, 20.111.908 de electoras y 18.890.331 de electores definirán quienes ocuparán la Presidencia y Vicepresidencia de la Nación.

Quizás por esta diferencia numérica, se observa que esta campaña ha sido histórica en el país, en términos de estar caracterizada por una mayor atención y propuestas destinadas a las mujeres.

Ambas fórmulas presidenciales, la encabezada por Gustavo Petro y la de Rodolfo Hernández, salieron de los enfoques tradicionales con temas de familia para abordar también otros, relacionados estrechamente con las desigualdades económicas y estructurales que sufren las mujeres y que han resultado profundizadas con la pandemia del COVID 19.

Aborto, políticas públicas de cuidado, gobierno paritario y cobertura nacional de la educación son solo algunos de los temas presentes en sus plataformas, propuestas, planes y programas de campaña. Lo mismo surge de los mensajes y publicidades de campaña, ya sea desde la cartelería callejera hasta los espacios de radio y televisión y en las redes sociales.

Y el dato definitorio, ambas formulas están integradas de manera paritaria. Francia Márquez por el Pacto Histórico y Merelén Castillo por la Liga de Gobernantes Anticorrupción, son las candidatas a la vicepresidencia respectivamente.

Francia, una abogada defensora de los derechos humanos y del medio ambiente, participó en la interna interpartidista y obtuvo el segundo lugar con 783 mil votos. Esta líder social, afrodescendiente, nacida en el Departamento de Cauca ha participado en los diálogos de paz, llegando a ser miembro y Presidenta del Consejo de Paz y Convivencia en 2020.

Merelén, con un perfil académico, se ha destacado por su especialización en la Educación. Se ha desempeñado en diferentes institutos educativos y universidades. Docente y profesora universitaria llegó al cargo de Rectora. Es licenciada en Biología y Química y master en Ingeniería Industrial, alcanzando el título de doctora en educación. Criada en el seno de una familia católica, se ha definido como “una mujer de retos” que busca el cambio, la transparencia y cerrar las brechas sociales.

Ambas candidatas, con sus perfiles propios y diferencias han logrado visibilizar a partir de su participación en estas elecciones, no solo las brechas de género entre varones y mujeres, sino la discriminación y obstáculos que sufren las minorías étnicas, pese a que Colombia desde 1991 se ha reconocido como un país multiétnico. También ambas candidatas muestran un alto porcentaje de imagen positiva y las encuestas dan cuenta de ello.

Pero no todo lo que reluce es oro, porque estos datos alentadores de inclusión que parecerían mostrar una mayor participación política de las mujeres en igualdad de condiciones, son controvertidos por otros. El Observatorio de Violencias Políticas contra las Mujeres (2022) de Artemisas ha señalado que esta campaña también ha estado caracterizada por la discriminación y la violencia. Discursos racistas y de odio, provenientes incluso de artistas, figuras de la política y comunicadores, refiriéndose a ellas como “locas”, “animales” o “King Kong”, son prueba de ello. Mentiras descalificadoras sobre sus figuras o mal llamadas “fake news” hostigándolas desde las redes por sus roles de madres o incluso de buenas o malas personas, ponen en evidencia la violencia simbólica que sufren las mujeres en su condición de candidatas, que ha ido en aumento a medida que ha avanzado la campaña.

De todos modos, y dentro de este escenario de avances y exposición de problemas, el pueblo colombiano se hará escuchar una vez más y la democracia habrá dado un paso adelante. Y ojalá que la agenda del nuevo gobierno aborde los temas desde una perspectiva interseccional ya que, gane quien gane este domingo, será una mujer la que ocupará el cargo de Vicepresidenta de la República de Colombia por los próximos cuatro años.

*La autora es especialista en derecho electoral y miembro de la Asociación de Magistradas Electorales de las Américas (AMEA)

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