De show en show, el narcorégimen perdura

Guardar
Nicolás Maduro (Reuters)
Nicolás Maduro (Reuters)

La crisis humanitaria que padece Venezuela y sus habitantes es trágica. Sin medicamentos, sin comida, con la violencia desatada de punta a punta del territorio, mostrando el espanto de seres comiendo basura y otros envenenados por ingesta de alimentos en mal estado o mortíferos como puede ser la yuca amarga, ese tubérculo asesino que cobra muertes ya de manera común, como ha sido lo sucedido esta pasada semana cuando en el Municipio Santos Michelena del Estado Aragua por desesperación ante el hambre murieron seis niños y un adulto.

También hechos alucinantes que ya son rutina como ver madres entregando sus hijos en orfanatos o a personas que se los reciban porque ellas no tienen como alimentarlos. Estadísticas espantosas que parecieran no sacudir la sensibilidad ni la ira como esta que hemos leído el sábado 17 de los corrientes donde se informa de 62 bebés fallecidos en el hospital Luis Razetti de Barcelona, estado Anzoátegui durante enero de 2018, de acuerdo a las cifras dadas por autoridades de ese centro de salud, concretamente por su director el Dr. Yuri Prieto que claramente dijo que la malnutrición de las embarazadas ha sido clave para aumentar la mortalidad infantil. Que el 80% de las madres no se alimentan bien y eso afecta el peso de los bebés al nacer, lo que está causando que dos neonatos mueran por día.

Pero lectores, esta mortandad pareciera poco importarle no solo al narcorégimen de Nicolás Maduro y los castrochavistas, tampoco a los líderes opositores en su mayoría solo interesados en motivar elecciones fraudulentas que únicamente legitimarán a una pandilla perversa y asesina ya que nada ha cambiado en Venezuela para imaginar otros resultados. Igual no importa a aliados internacionales con los que aún cuenta el letal tirano que ahora, al mejor estilo de la dictadura de los Castro en Cuba, pretende shows que solo distraigan del horror…

Ilustración: Rodrigo Acevedo
Ilustración: Rodrigo Acevedo

Uno de esos shows lo tenemos organizado por la canallesca Michelle Bachelet, que posterior a su visita a Raúl Castro el 8 de enero pasado en su última gira como Presidenta de Chile con seguridad recibió las órdenes para montarle otro espectáculo a Maduro esta vez en la Toma de Posesión del presidente Piñera. La Bachelet tenía que estar clara en lo absurdo de esa invitación, pero como las razones son otras, la ha mantenido pese a que gran número de chilenos hayan expresado su rechazo a la presencia de Nicolás Maduro el próximo 11 de marzo. Otra comedia es la de la supuesta asistencia a la Cumbre de las Américas a donde asegura asistir "llueve, truene o relampaguee".

¿Y por qué hablo de comedias y shows? Muy simple, porque ese hacer también es muy castrista y les ha dado muy buenos resultados durante casi 60 años de tiranía. Así que montar en escena el 13 y 14 de abril en Lima el numerito de que no lo quieren dejar entrar es algo más que pensado sobre todo teniendo en cuenta que el adelanto inconstitucional de elecciones presidenciales para el 22 de abril requiere de un escándalo que bien se logra pretendiendo forzar la soberanía peruana, cosa que nada les cuenta o importa y que lo vemos en sus abusos y farsas que aunque las rechacen la comunidad internacional, Estados Unidos y los países latinoamericanos que forman parte del Grupo de Lima, ellos mantienen y hasta agrandan y es una amenaza y un chantaje buscando frenar sanciones individuales contra muchos funcionarios de alto rango del régimen, así como a empresas vitales para mantenerse en el poder.

Y se impone el análisis del absurdo que significa que se aplique el veto al tiranillo Nicolás Maduro impulsado como digo por el Grupo de Lima, tomando para ello la Declaración de Quebec del 2001 que en sus enunciados contempla: "Nosotros, los Jefes de Estado y de Gobierno de las Américas elegidos democráticamente, reunidos en la ciudad de Quebec en nuestra Tercera Cumbre, renovamos nuestro compromiso con la integración hemisférica y la responsabilidad nacional y colectiva a fin de mejorar el bienestar económico y la seguridad de nuestros pueblos. Hemos adoptado un Plan de Acción para fortalecer la democracia representativa, promover una eficiente gestión de gobierno y proteger los derechos humanos y las libertades fundamentales" y se reciba al "Padre de la criatura" el sanguinario déspota Raúl Castro que junto con su letal hermano Fidel hicieron y hacen tanto daño a países donde se han colado y han destruido a Cuba y a varias generaciones de cubanos.

Así que se impone pedir coherencia: Ni Raúl Castro ni su marioneta Maduro ¡Basta de shows!

ebruzual@gmail.com  / @eleonorabruzual  /  http://www.gentiuno.com/

Guardar