El ex presidente surcoreano defendió la ley marcial que le costó el puesto: “¿Cómo iba a derivar en una guerra civil?”

Es la primera vez que Yoon Suk Yeol se pronuncia oficialmente sobre lo sucedido desde que fue destituido e imputado por la justicia

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El presidente de Corea del
El presidente de Corea del Sur, Yoon Suk Yeol, que ha sido destituido. JEON HEON-KYUN/Pool vía REUTERS/File Photo

El presidente destituido de Corea del Sur, Yoon Suk Yeol, ha defendido este martes la ley marcial impuesta a principios de diciembre y que le ha costado el cese a manos del Parlamento, al tiempo que ha estipulado que su introducción era “legal” y se iba a producir “de acuerdo a la Constitución”.

Yoon, que se encuentra bajo custodia y ha sido imputado por incitar a la insurrección y abuso de poder, ha descartado que en ningún momento se tratara de una “rebelión”. “¿Cómo iba a derivar esto en una guerra civil? ¿Por qué se considera que esta ley marcial es una rebelión?”, ha lamentado, tal y como ha indicado su equipo legal.

Se trata de la primera vez que Yoon se pronuncia oficialmente sobre lo sucedido desde que fue imputado hace dos días por la Fiscalía surcoreana. El exmandatario, que se encuentra a la espera de que el Constitucional ratifique o retire su destitución de forma definitiva, continúa encarcelado en el Centro de Detención de Seúl.

Sus abogados insisten en que Yoon “declaró la ley marcial haciendo uso de sus poderes constitucionales porque consideraba que el país se encontraba sumido en una grave crisis debido a la dictadura impuesta a través de la Asamblea Nacional, dominada ampliamente por la oposición”. Así, han dicho, buscaba “informar al pueblo de la crisis y apelar a ellos”.

Una efigie que representa al
Una efigie que representa al presidente Yoon Suk Yeol, con sus imágenes y caricaturas en una tabla de madera atada con cadenas, se encuentra dentro de una jaula mientras los manifestantes asisten a una manifestación en su contra, quien declaró la ley marcial, que fue revocada horas después, en Seúl, Corea del Sur, el 28 de diciembre de 2024. REUTERS/Kim Soo-hyeon

Sin embargo, el propio Parlamento exigió la retirada de la ley en cuestión, una medida ante la que Yoon cedió por considerar que había sido solicitada también “por la vía constitucional”. “La retiró inmediatamente y todo se hizo de acuerdo con la legalidad vigente”, han reiterado sus abogados.

“¿Acaso alguien perdió la vida o hubo algún derramamiento de sangre? ¿Hubo algún arresto o actos de represión contra políticos? ¿Se produjo siquiera un intento de algo de esto?”, ha sostenido, según informaciones recogidas por la agencia de noticias Yonhap.

El propio Yoon ha insistido en que no tenía intención alguna de “mantener la ley marcial durante un largo periodo de tiempo” dado que su Administración “no contaba con un plan exhaustivo sobre el funcionamiento del Gobierno bajo dicha ley”.

“Me preocupa el futuro de este país por encima de cualquier otra cosa. Hay mucha gente entre nuestros ciudadanos a los que les cuesta sobrevivir día a día, y me preocupa lo difícil que será para ellos hacer frente al invierno y al frío. También estoy preocupado por la gente joven y las futuras generaciones que necesitan nutrir sus sueños y que los verán frustrados por la realidad”, ha aseverado.

Una camioneta azul que se
Una camioneta azul que se cree que transporta al presidente de Corea del Sur destituido, Yoon Suk Yeol, llega al Tribunal del Distrito Oeste de Seúl para asistir a una audiencia judicial por su orden de arresto en Seúl, Corea del Sur, el 18 de enero de 2025. (Corea del Sur, Seúl) EFE/EPA/JUNG YEON-JE / POOL

¿Dónde está Yoon ahora?

Por ahora, Yoon está alojado en una celda equipada con un televisor, un lavabo y un escritorio para una sola persona que funciona como mesa de comedor.

También hay un inodoro, una cama plegable y Yoon ha sido provisto de una colchoneta eléctrica para mantenerse caliente durante el invierno.

Las comidas se sirven en su celda y el presidente acusado debe lavar sus platos en el fregadero de acuerdo con las regulaciones de la prisión.

Su celda solitaria, que suele albergar a varios reclusos, se asemeja a las ocupadas por dos expresidentes, Park Geun-hye y Lee Myung-bak, que también cumplieron condenas en la cárcel.

(con información de EP y AFP)