Taiwán realizó un simulacro de combate ante la peligrosa escalada de amenazas militares y cibernéticas del régimen de China

Las maniobras incluyeron helicópteros Apache y Black Hawk, ambos de fabricación estadounidense, así como tanques CM-11, blindados CM-22 y drones

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Taiwán realizó un simulacro de
Taiwán realizó un simulacro de combate ante el incremento de las hostilidades militares y cibernéticas de China (REUTERS/Ann Wang)

El Ejército de Taiwán realizó este martes un entrenamiento de combate en la base de Hukou, en el condado de Hsinchu, al norte de la isla. El ejercicio, destinado a simular la defensa contra una incursión militar del régimen de China, forma parte de las maniobras organizadas en vísperas del Año Nuevo lunar, que este año comenzará el 29 de enero.

El simulacro, que estuvo abierto a la prensa local e internacional y duró aproximadamente 15 minutos, incluyó helicópteros Apache y Black Hawk, ambos de fabricación estadounidense, así como tanques CM-11, blindados CM-22 y drones.

Según fuentes militares, el ejercicio recreó un ataque enemigo sobre objetivos estratégicos en la región de Hsinchu y la posterior recuperación de posiciones por parte de las tropas taiwanesas.

Las maniobras probaron la capacidad de las fuerzas para coordinar tácticas de combate, como el uso de drones para identificar posiciones adversarias, helicópteros y morteros para destruir infraestructuras, y vehículos blindados junto con infantería y fuerzas especiales para recuperar territorio.

Las autoridades militares describieron el ejercicio como una demostración de la preparación del Ejército para responder a una amenaza real. Señalaron que este tipo de simulacros permite al pueblo taiwanés presenciar la determinación de sus tropas para proteger la isla en cualquier momento.

Las maniobras incluyeron helicópteros Apache
Las maniobras incluyeron helicópteros Apache y Black Hawk, ambos de fabricación estadounidense, así como tanques CM-11, blindados CM-22 y drones (REUTERS/Ann Wang)

El contexto en el que se llevaron a cabo estas maniobras está marcado por una escalada de tensiones entre Taiwán y China, que considera a la isla como una “provincia rebelde” desde 1949. Las relaciones se han deteriorado especialmente tras la toma de posesión del presidente soberanista William Lai el pasado 20 de mayo, quien ha adoptado una postura firme frente a Beijing.

En 2024, el Ministerio de Defensa Nacional (MDN) de Taiwán registró 3.067 incursiones de aeronaves militares chinas en las inmediaciones de la isla, lo que representa un aumento del 80 % respecto al año anterior y el número más alto desde que se comenzaron a recopilar estos datos. Las incursiones incluyen el ingreso de aviones de combate chinos en la zona de identificación de defensa aérea (ADIZ) taiwanesa, obligando a las fuerzas de la isla a responder con despliegues de aviones propios.

El simulacro en Hukou se enmarca en las maniobras militares tradicionales realizadas por las Fuerzas Armadas de Taiwán antes del Año Nuevo lunar, conocidas como la Fiesta de la Primavera. No obstante, este año el entrenamiento ha cobrado especial relevancia debido al incremento de las actividades militares chinas cerca de la isla, lo que ha despertado preocupación regional e internacional.

El ejercicio recreó un ataque
El ejercicio recreó un ataque enemigo sobre objetivos estratégicos en la región de Hsinchu y la posterior recuperación de posiciones por parte de las tropas taiwanesas (REUTERS/Ann Wang)

A esta presión militar se suma un incremento alarmante de los ciberataques dirigidos contra Taiwán, que, según funcionarios de seguridad taiwaneses, se duplicaron el año pasado a un promedio diario de 2,4 millones. De acuerdo con un informe publicado el domingo por el Buró Nacional de Seguridad (NSB), la mayoría de estos ataques provienen de hackers chinos, quienes utilizan técnicas cada vez más sofisticadas para hostigar al Gobierno de Taiwán, a sus infraestructuras críticas y a sectores clave como las telecomunicaciones, la defensa y el transporte.

El informe destacó que los ataques más severos, como los ataques de denegación de servicio distribuido (DDoS), coincidieron con los ejercicios militares realizados por China cerca de la isla, buscando intensificar el efecto de intimidación militar. Según el NSB, “el creciente número de ataques subraya la gravedad de las actividades de hackeo de China”, las cuales apuntan a una amplia gama de objetivos, incluidos organismos gubernamentales, infraestructura crítica y la industria de alta tecnología.

Las autoridades militares describieron el
Las autoridades militares describieron el ejercicio como una demostración de la preparación del Ejército para responder a una amenaza real (REUTERS/Ann Wang)

China ha negado reiteradamente las acusaciones relacionadas con ciberataques, alegando que se opone a todas las formas de hacking. Sin embargo, países como Estados Unidos han expresado en los últimos años su preocupación por las actividades de espionaje cibernético patrocinadas por Beijing, señalando que afectan a gobiernos, militares y empresas a nivel global.

(Con información de EFE y AFP)

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