Los jefes de la diplomacia francesa, Jean-Noël Barrot; y alemana, Annalena Barbock, se reunieron este viernes con el nuevo dirigente de Siria, Ahmad al Sharaa, en el palacio presidencial en Damasco.
Este encuentro es el primero de este nivel entre altos cargos de grandes potencias occidentales y el nuevo dirigente sirio, que tomó el poder el 8 de diciembre tras la caída del dictador Bashar Al Assad.
Jean-Noël Barrot ofreció este viernes durante su visita a Damasco asistencia técnica y legal para redactar una nueva constitución en Siria, una tarea que se ha intentado durante los últimos años sin éxito y que ahora podría tener lugar tras la caída del régimen de Al Assad.
“Ofrecemos a la nueva administración siria brindar asistencia técnica y legal para redactar una constitución para el país”, dijo el jefe de la diplomacia gala a los periodistas al norte de Damasco, informó la televisión siria alineada con el gobierno interino.
Se espera a mediados de mes la celebración de una Conferencia de Diálogo Nacional en la que se aguarda que se anuncie la creación de un comité para la redacción de una nueva Constitución y la disolución de las facciones armadas que participaron en la ofensiva contra Al Assad.
“Durante nuestra visita a la prisión de Sednaya, quedamos impactados por las brutales condiciones que vivían allí los detenidos (...) Y digo que no puede haber justicia sin rendición de cuentas”, indicó, y añadió que en Siria “no hay reconciliación sin lograr justicia”.
La televisión siria alineada con el gobierno interino informó de la llegada a la capital siria de ambos jefes de la diplomacia, mientras que Barrot aseguró en su cuenta oficial de X que hoy se encontrará en Damasco junto a Baerbock para “promover una transición pacífica y exigente en beneficio de los sirios y de la estabilidad regional”.
“Juntos, Francia y Alemania están al lado del pueblo sirio, en toda su diversidad”, afirmó Barrot, que en estos últimos días ha estado en el vecino Líbano en una visita oficial.
Más temprano, el ministro de Asuntos Exteriores francés, Jean-Noël Barrot, y su homóloga alemana, Annalena Baerbock, visitaron la infame prisión de Sednaya, al norte de Damasco, en el marco de su visita a Siria para mostrar su apoyo al nuevo gobierno interino establecido tras el derrocamiento del depuesto presidente Bachar al Asad.
Fuentes diplomáticas francesas señalaron que ambos diplomáticos visitaron la prisión, que calificaron como “símbolo de los peores crímenes del régimen de Bachar al Asad”.
“Francia se movilizará para arrojar luz sobre los crímenes cometidos. Apoya plenamente el trabajo llevado a cabo por la Comisión Internacional de Investigación sobre Siria y el Mecanismo Internacional, Imparcial e Independiente (IMI) de las Naciones Unidas, así como el de la Institución Independiente para Personas Desaparecidas”, dijo el jefe de la diplomacia gala, según las fuentes.
Por otro lado, el enviado alemán para Siria, Stefan Schneck, aseguró en su cuenta oficial de X que estuvo con Baerbock en Sednaya: “Las palabras no pueden describir los horrores en Sednaya, pero nos recuerdan que debemos recordar los horrores para no repetirlos”.
Baerbock estuvo acompañada durante su visita a la cárcel militar de la Defensa Civil Siria, conocidos como los cascos blancos, informó la televisión siria alineada con el gobierno interino.
Amnistía Internacional cifra entre 10.000 y 20.000 internos, sujetos a tortura y malos tratos de forma sistemática, los que había en Sednaya, que estaba dirigida por la policía militar del depuesto régimen, y era el destino final tanto de opositores pacíficos a las autoridades como de militares sospechosos de oponerse a Al Asad desde 2011, en el inicio del conflicto en Siria.
Esta es una de las paradas de ambos jefes de la diplomacia, que visitan la capital siria en nombre de la Unión Europea para reunirse con el hombre fuerte del país y líder de facto, Ahmed al Sharaa.
El mensaje que quieren transmitirle es que apoyan Siria en esta nueva etapa sin Al Asad y están dispuestos a ayudarles a que el país árabe sea de nuevo estable.
Al Sharaa, que lidera el Organismo de Liberación del Levante (HTS, en árabe, y heredera de la filial siria de Al Qaeda) insiste en que Estados Unidos, la UE y otros países levanten las sanciones contra Siria impuestas durante los últimos casi catorce años de guerra en la nación, gobernada por Al Asad, para comenzar con la reconstrucción.
Se trata de la primera visita a Siria de dos jefes de la diplomacia europeos desde la caída de Al Asad el pasado 8 de diciembre por una coalición liderada por el islamista Al Sharaa.
(Con información de AFP y EFE)