Corea del Norte demostró este año su capacidad para producir y suministrar misiles balísticos a Rusia en cuestión de meses, según afirmó Jonah Leff, director de la organización Conflict Armament Research (CAR), en una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU. Leff informó que estos misiles han sido utilizados en la guerra contra Ucrania, según el análisis de restos encontrados en el campo de batalla.
El director de CAR señaló que investigadores sobre el terreno examinaron restos de cuatro misiles balísticos norcoreanos recuperados en Ucrania entre julio y agosto de 2024, incluido uno que llevaba marcas que confirmaban su fabricación este mismo año.
“Se trata de la primera prueba pública de que misiles fabricados en Corea del Norte han sido utilizados en Ucrania en cuestión de meses, no de años”, declaró.
CAR, una organización con sede en Reino Unido fundada en 2011, rastrea armas utilizadas en conflictos con el objetivo de documentar su procedencia y ayudar a contrarrestar la proliferación de armamento. Esta organización trabaja en Ucrania desde 2018.
Según Leff, los análisis realizados este año también corroboran la existencia de componentes de misiles fabricados fuera de Corea del Norte, con marcas de 2023, lo que evidencia una red internacional que abastece al programa de misiles norcoreano, a pesar de las sanciones de la ONU que prohíben transferencias de materiales militares.
Además, durante su intervención en la reunión presidida por la embajadora estadounidense Linda Thomas-Greenfield, Leff reiteró que la relación entre Corea del Norte y Rusia ha fortalecido el suministro de armamento al frente ucraniano.
Según su análisis, el breve intervalo entre la fabricación, el traslado y el uso de los misiles subraya el nivel de cooperación entre ambos países.
En noviembre, el líder norcoreano Kim Jong Un reafirmó su apoyo a Rusia durante un encuentro con el ministro de Defensa ruso, en el que prometió respaldar “invariablemente” la guerra en Ucrania, según los medios estatales norcoreanos.
Tensión en el Consejo de Seguridad
La intervención de Leff generó críticas por parte del embajador ruso ante la ONU, Vassily Nebenzia, quien acusó a CAR de estar alineada con la OTAN y la Unión Europea, poniendo en duda la imparcialidad de sus evaluaciones.
Nebenzia también criticó a la presidencia estadounidense del Consejo, acusando a Thomas-Greenfield de violar las prácticas del Consejo de Seguridad y transformar sus reuniones “en un acto politizado de bufonería”.
Por su parte, Thomas-Greenfield defendió la relevancia de organizaciones como CAR, dado que Rusia había vetado previamente una resolución que renovaba el mandato de expertos de la ONU encargados de supervisar las sanciones contra Corea del Norte.
Según la embajadora de Estados Unidos antes la ONU, este bloqueo busca encubrir las transferencias ilegales de armas y entrenamientos militares entre Rusia y Corea del Norte, en violación de múltiples resoluciones del Consejo de Seguridad.
El embajador norcoreano ante la ONU, Kim Song, rechazó las acusaciones y defendió la relación con Rusia como una “contribución positiva a la paz y la seguridad internacionales y de ningún modo puede ser objeto de crítica”.
Además, acusó a Estados Unidos y sus aliados de fomentar conflictos entre naciones mediante intervenciones militares y el suministro de miles de millones de dólares en armamento a Ucrania, que incluyen armas de largo alcance.
(Con información de AP)