El jefe del régimen chino y secretario general del Partido Comunista chino (PCC), Xi Jinping, instó este lunes a la formación a eliminar “influencias negativas” para atajar la corrupción en plena purga que ha resultado en el último año en la destitución de ministros y responsables de su Ejército. ”Debemos utilizar con valentía el filo del cuchillo para eliminar prácticas nocivas”, dijo Xi en un discurso publicado hoy en Qiushi Journal, una de las publicaciones insignia del PCC.
Según Xi, la formación debe “tomar medidas contra cualquier ‘lobby’, organización de poder o clase privilegiada que se aproveche de los miembros del PCC o los corrompa”. ”El PCC debe eliminar cualquier impacto negativo para garantizar que está siempre lleno de vigor y vitalidad. Debemos promover la autorrevolución del Partido”, zanjó el mandatario.
La semana pasada, la cúpula dirigente del PCC avanzó que redoblará esfuerzos en la lucha contra la corrupción, que se ha llevado por delante a ex altos cargos de bancos, petroleras, directivos de la asociación de fútbol o incluso miembros del Gobierno y del Ejército.
También se arrestó este diciembre al exministro de Agricultura Tang Renjian, que será juzgado por la Fiscalía del país por supuestamente aceptar sobornos. El año pasado, el entonces titular de Defensa, Li Shangfu, fue también destituido y posteriormente expulsado del PCC tras ser acusado de un delito de corrupción.
Xi, que afianzó su poder al frente del país durante el XX Congreso que celebró la formación en 2022, afiló su perenne campaña anticorrupción castigando a al menos 610.000 funcionarios el año pasado.
El líder adelantó en aquel Congreso, en el que cimentó su ya enorme poder perpetuándose un lustro más en el cargo, que profundizaría en la campaña contra la corrupción porque “la situación es todavía grave”.
La campaña actual apunta a funcionarios del Gobierno pero también a sectores tan variopintos como el financiero, el tabacalero y el farmacéutico, entre otros, y sigue a la emprendida en 2012, que vino acompañada de un aumento de la represión, la censura y las sospechas de que las acusaciones formaban parte de una estratagema para acabar con los críticos.
Expulsión de Gou Zhongwen
El jueves el partido anunció que Gou Zhongwen, ex director de la Administración General del Deporte de China y alto cargo de la Conferencia Consultiva Política del Pueblo Chino (CCPPCh), sería expulsado tras una investigación por “graves violaciones de la disciplina del Partido y la ley”.
Según un comunicado conjunto de la Comisión Central de Inspección Disciplinaria (CCDI, el poderoso órgano anticorrupción del Partido Comunista) y la Comisión Nacional de Supervisión, agencia equivalente dentro del aparato estatal, Gou fue hallado culpable de múltiples irregularidades, entre ellas el “abandono de ideales políticos, el deterioro del entorno en el sistema deportivo y el uso indebido de recursos públicos”.
Las autoridades destacaron que el exfuncionario “aceptó regalos, banquetes y facilidades de viajes en violación de normativas”, además de obtener “beneficios personales” y “usar su poder para asistir a sus familiares en los negocios”.
La investigación reveló que Gou incurrió en corrupción financiera al “aceptar grandes sumas de dinero” y tomar decisiones arbitrarias que provocaron “pérdidas económicas significativas” al Estado en proyectos deportivos y adquisiciones.
Asimismo, se le acusó de falsedad en sus declaraciones durante indagaciones organizativas.
Como sanción, Gou ha sido expulsado del PCC, destituido de todos sus cargos públicos, entre los que estaba ser miembro del CCPPCh, el máximo órgano asesor político del país pero que carece de poder real, además de subdirector del Comité de Asuntos Étnicos y Religiosos del Comité Nacional de la CCPPh.
(Con información de EFE).-