Un depósito de combustible de la región rusa de Briansk que la Federación Rusa utiliza para dar suministro a sus tropas fue atacado la pasada noche en una operación conjunta de la fuerza de drones del Ejército ucraniano y la inteligencia militar de Kiev, según afirmó este miércoles el Estado Mayor ucraniano.
“Según la información disponible, el depósito fue alcanzado y se produjo un incendio”, se lee en el comunicado del Estado Mayor, que califica ese fuego de “masivo”.
El alcance de los daños y las armas exactas utilizadas en el ataque no estaban claros, aunque Rusia ha advertido en repetidas ocasiones de que el uso por parte de Ucrania de ATACMS estadounidenses para atacar territorio ruso soberano corre el riesgo de desencadenar una guerra más amplia.
El Ministerio de Defensa ruso dijo que sus unidades de defensa antiaérea destruyeron 14 drones ucranianos durante la noche sobre la región de Briansk, fronteriza con Ucrania. No precisó qué aviones fueron alcanzados.
El gobernador de Briansk, Alexander Bogomaz, dijo en su canal de Telegram que una instalación de producción sufrió un breve incendio como resultado del ataque. No precisó qué instalaciones resultaron dañadas.
El oleoducto de construcción soviética Druzhba, que bombea petróleo desde los yacimientos de Siberia occidental y el mar Caspio hasta los mercados de Europa, atraviesa la región de Briansk, al igual que el Sistema de Oleoductos del Báltico, que llega hasta el mar Báltico.
El canal de Telegram ASTRA dijo que una refinería había sido alcanzada y mostró llamas saltando al cielo.
A unos 750 kilómetros al sur, el puerto ruso de Taganrog fue alcanzado por misiles procedentes de Ucrania, dañando una instalación industrial y numerosos coches, dijo el gobernador en funciones de la región de Rostov.
“Según informaciones preliminares, nadie resultó herido”, dijo Yuri Slyusar en la aplicación de mensajería Telegram.
Slyusar dijo que 14 coches se habían incendiado, pero no reveló detalles sobre qué más fue alcanzado o la magnitud del ataque.
La zona siniestrada de Taganrog, ciudad de cerca de un cuarto de millón de habitantes situada en la costa rusa del mar Negro y no lejos de la frontera con Ucrania, ha sido acordonada por la policía, dijo en Telegram Svetlana Kambulova, alcaldesa de la ciudad.
El ataque dañó parcialmente un edificio de calderas, dejando sin calefacción a 27 edificios de apartamentos, dijo Kambulova.
Rusia tiene una base aérea cerca de la ciudad, desde la que, según analistas militares, la fuerza aérea rusa opera drones, bombarderos y otras armas para atacar Ucrania.
Tras 1.000 días de guerra en Ucrania, que Rusia inició con una invasión a gran escala en 2022, Kiev utilizó por primera vez misiles ATACMS estadounidenses en noviembre pasado para atacar a Rusia, aprovechando un permiso recién concedido por el Gobierno del presidente saliente de Estados Unidos, Joe Biden.
Días después, Rusia disparó un misil balístico hipersónico de alcance intermedio contra la ciudad ucraniana de Dnipró.
Desde entonces, Rusia informó de que había derribado al menos 15 misiles ATACMS. El presidente Vladimir Putin dijo que el uso por Kiev de misiles de fabricación occidental significaba la “implicación directa” de Occidente en un conflicto armado con Rusia.
(Con información de Reuters y EFE)