El papa Francisco se desplazará en un automóvil eléctrico Mercedes-Benz para sus apariciones públicas, convirtiéndose en el primer “papamóvil” sin emisiones de CO2, anunció el fabricante alemán este miércoles.
Este SUV de la gama Clase G, con una carrocería de color blanco nacarado, fue “desarrollado en estrecha colaboración con el Vaticano específicamente para el uso del Papa”, detalla un comunicado.
El pontífice lo utilizará especialmente durante el Jubileo de 2025, que tendrá lugar a finales de diciembre en Roma. Se espera que unos 33 millones de peregrinos de todo el mundo asistan a este evento, organizado cada 25 años por la Iglesia Católica.
Según el comunicado el vehículo está “adaptado a las velocidades particularmente bajas requeridas para las apariciones públicas” y está alineado con la encíclica Laudato Si (Alabado seas), manifiesto del papa en favor de la ecología.
El vehículo conserva su aspecto tradicional: es de color blanco perla, está abierto por los lados, tiene un asiento central desde donde el papa puede saludar al público e incorpora el techo de cristal a nivel superior.
“Hoy es un gran honor para nosotros en el equipo de Mercedes, entregamos un nuevo papamóvil y cumplimos casi cien años de tradición trabajando con el Vaticano”, declaró el director ejecutivo de la compañía, Ola Källenius, en el acto de entrega de las llaves del vehículo al papa, quién asistió al evento en silla de ruedas.
El primer papamóvil que Mercedes fabricó fue en 1930, para el papa Pío XI, mientras que el entregado hoy marca una gran novedad al ser “el primer papamóvil totalmente eléctrico”.
“Creo que esto trae una nueva era de papamóviles”, dijo Källenius, que aseguró que el vehículo será “muy silencioso” cuando circule.
“Hemos puesto cientos de horas de pasión y artesanía en este vehículo”, añadió en declaraciones a los medios, a los que señaló que el coche “ha sido hecho a medida para el Santo Padre”.
El asiento de Francisco “es la pieza central y puede girar en ambas direcciones”, para que el papa “pueda dirigirse” y saludar al público de su entorno, destacó.
A su vez, el asiento se puede calentar, igual que las barras laterales del vehículo en las que el papa puede agarrarse y que le sirven también para levantarse.
En los laterales traseros, el papamóvil tiene dos plataformas de metal en las que podrán colocarse en pie dos miembros de la Guardia Suiza para proteger y mantenerse cerca del papa.
El actual papamóvil, como los anteriores durante los últimos 45 años, están basados en clásico modelo Mercedes-Benz Clase G, indicó la marca automovilística en un comunicado.
Mercedes-Benz lleva casi 100 años proporcionando automóviles a los dignatarios del Vaticano, algunos de los cuales están exhibidos en la Santa Sede o en el museo del fabricante en Stuttgart, Alemania.
Antes del papa argentino, su predecesor alemán, Benedicto XVI, ya usaba un coche eléctrico, un modelo del fabricante francés Renault que, sin embargo, no era su vehículo oficial.
(Con información de AFP y EFE)