El alto el fuego que entró en vigor en Líbano el miércoles puso fin a más de un año de conflicto que estalló después de que Hezbollah lanzara ataques transfronterizos contra Israel en apoyo de su aliado palestino Hamas.
Los combates han causado 3.823 muertos en Líbano y 129 en Israel, decenas de miles de desplazados a ambos lados de la frontera, diezmado la cúpula de Hezbollah y provocado pérdidas económicas y daños materiales en Líbano por valor de 8.500 millones de dólares.
El acuerdo, basado en la Resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU y auspiciado por Estados Unidos y Francia, prevé un cese inicial de los combates durante 60 días y exige a Hezbollah que ponga fin a su presencia armada en el sur del Líbano, mientras que las tropas israelíes deben regresar a su lado de la frontera.
El objetivo es desmilitarizar el sur del Líbano y evitar la reconstitución de fuerzas armadas no estatales en la región. El presidente de EEUU Joe Biden dijo que el acuerdo “fue diseñado para ser un cese permanente de las hostilidades”. Ofrece a ambas partes una vía de escape de las hostilidades que han obligado a más de 1,2 millones de libaneses y 50.000 israelíes a abandonar sus hogares.
A continuación, se detallan los diez puntos principales de este acuerdo.
1) Alto el fuego inmediato: A partir de las 4 de la madrugada del 27 de noviembre de 2024, se estableció un cese de hostilidades entre Israel y Líbano, incluyendo ataques con misiles y operaciones terrestres, poniendo fin a un conflicto que ha causado más de 3.700 muertes en el último año. El acuerdo establece un plazo máximo de 24 horas para la implementación completa de esta medida.
2) Compromiso de no agresión: Hezbollah y otros grupos armados en Líbano no podrán realizar operaciones contra Israel, mientras que Israel se abstendrá de cualquier operación militar ofensiva en territorio libanés.
3) Supervisión internacional: Estados Unidos y Francia mediarán en el acuerdo, con el apoyo de la ONU a través de la Fuerza Provisional de las Naciones Unidas en el Líbano (Unifil), para garantizar el cumplimiento de los términos.
4) Desarme y Control de Armamento: El gobierno libanés se compromete a desmantelar instalaciones de producción de armas no autorizadas, comenzando en la zona sur del río Litani, y a controlar la entrada y producción de armamento.
5) Despliegue de Fuerzas Oficiales: Las Fuerzas Armadas Libanesas (LAF) desplegarán tropas en todas las fronteras y puntos de control, especialmente en la zona sur del Litani, para garantizar la seguridad.
6) Retirada Gradual de Israel: Las Fuerzas de Defensa de Israel se retirarán de forma escalonada al sur de la Línea Azul, un proceso que no deberá exceder los 60 días y será coordinado con las LAF.
7) Mecanismo de Verificación: Se establecerá un mecanismo tripartito liderado por Estados Unidos y Francia, con el respaldo de la Unifil, para supervisar y verificar el cumplimiento del acuerdo.
8) Resolución de Disputas: Se solicitará a EEUU que facilite negociaciones indirectas entre Israel y Líbano para resolver los puntos pendientes a lo largo de la Línea Azul.
9) Derecho a Legítima Defensa: El acuerdo mantiene el derecho inherente de ambos países a la legítima defensa, de acuerdo con el derecho internacional.
10) Apoyo Internacional: EEUU y Francia se comprometen a liderar esfuerzos para apoyar el desarrollo económico de Líbano, con el objetivo de promover la estabilidad en la región.
El balance tras 14 meses de hostilidades
Tras meses de bombardeos transfronterizos y una incursión terrestre, Israel puede reivindicar importantes victorias, como la muerte del máximo dirigente de Hezbollah, Hassan Nasrallah, de la mayoría de sus altos mandos y la destrucción de una amplia infraestructura militante.
Un complejo ataque perpetrado en septiembre, en el que estallaron cientos de walkie-talkies y buscapersonas utilizados por Hezbollah, fue ampliamente atribuido a Israel, lo que supuso una notable penetración en el grupo terrorista.
El daño infligido a Hezbollah no sólo ha afectado a sus filas, sino también a la reputación que se labró luchando contra Israel hasta llegar a un punto muerto en la guerra de 2006. Aun así, sus combatientes han logrado oponer una fuerte resistencia sobre el terreno, frenando el avance de Israel y disparando diariamente decenas de cohetes, misiles y aviones no tripulados a través de la frontera.
El alto el fuego supone un alivio para ambas partes, ya que da un respiro al sobrecargado ejército israelí y permite a los líderes de Hezbollah alardear de la eficacia del grupo a la hora de resistir a pesar de la enorme ventaja israelí en armamento. Pero es probable que el grupo se enfrente a un ajuste de cuentas, ya que muchos libaneses lo acusan de vincular el destino de su país al de Gaza al servicio de su aliado clave, Irán, causando un gran daño a una economía libanesa que ya se encontraba en grave estado.