Así fue el último ataque de Israel contra Hezbollah: apuntó contra una fábrica de misiles del grupo terrorista

La Fuerza Aérea israelí llevó a cabo un intenso bombardeo en Líbano, justo antes de que se implementara un alto el fuego, atacando numerosos emplazamientos de la organización terrorista de Hezbollah, tal como informaron las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI).

El jefe de operaciones de las fuerzas aéreas de Hezbollah, conocidas como Unidad 127, fue abatido en un ataque israelí, según las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI). Esta unidad era responsable de los ataques con aviones no tripulados y misiles de crucero contra Israel. En paralelo, las FDI informaron sobre masivos bombardeos en Líbano, incluyendo un importante emplazamiento subterráneo de fabricación y almacenamiento de misiles guiados de precisión de Hezbollah en el valle de Beqaa, cerca de la frontera con Siria.

Según datos recopilados, uno de los principales objetivos fue un emplazamiento subterráneo de fabricación y almacenamiento de misiles de precisión, localizado en el valle de Beqaa cerca de la frontera con Siria. Las FDI afirmaron que el bombardeo sobre este lugar duró varias horas, resultando en la muerte de varios agentes de Hezbollah, según declaraciones recogidas por medios de defensa israelíes.

Los ataques, realizados durante la noche anterior al alto el fuego que comenzó a las 4 de la madrugada, impactaron alrededor de 330 objetivos de Hezbollah. Entre ellos, las FDI mencionan que 42 se encontraban en Beirut. En el valle de Beqaa, un emplazamiento subterráneo de un kilómetro de largo, junto con una base de la Fuerza Radwan, fueron objeto de bombardeo por varias horas. Las FDI estiman que varias docenas de militantes de Hezbollah murieron en la operación.

Además, de acuerdo con las FDI, se atacó un importante cruce fronterizo entre Siria y Líbano, utilizado por Hezbollah para el contrabando de armas. “Los medios sirios informaron de seis muertos en el ataque”, de acuerdo con el informe.

Dichos ataques forman parte de un esfuerzo continuo por parte de Israel para impedir el fortalecimiento militar de Hezbollah en la región. Las FDI aseguraron que antes de los bombardeos se tomaron medidas para minimizar el riesgo a los civiles, mediante advertencias en varias plataformas dirigidas a la población local.

“Antes de los ataques, se tomaron medidas para reducir la posibilidad de dañar a civiles,” subrayaron las FDI, tal como registró el comunicado.

El aumento de estas ofensivas se vincula con ataques previos de Hezbollah y su unidad de misiles costeros en Beirut, donde se localizaron y atacaron varias estructuras militares. Las FDI reportaron haber atacado cuarenta y dos emplazamientos en la capital libanesa, previamente al alto el fuego. Según medios, entre estos ataques se encuentra el que habría terminado con la vida del jefe de operaciones de la fuerza aérea de Hezbollah, perteneciente a la Unidad 127, encargada de las ofensivas con drones y misiles crucero hacia Israel.

En localidades como Tzur y Nabatia, las Fuerzas de Defensa de Israel llevaron a cabo bombardeos dirigidos por el Comando Norte y la División de Inteligencia, según las FDI, alcanzando varios cuarteles generales y almacenes de municiones pertenecientes a Hezbollah.

Un informe detalló que varias de las infraestructuras destruidas estaban asociadas con unidades clave de la organización, como ‘Aziz’, ‘Badr’, y la fuerza ‘Radoan’.

Diseñados para cortar el suministro logístico de Hezbollah, aviones de combate bombardearon además rutas de tránsito entre Siria y Líbano, según confirmaciones de las FDI, donde se transportaban armas. Este enfoque está dentro del marco más amplio de Israel para mitigar amenazas, asegurando su postura defensiva ante cualquier posible amenaza a su seguridad.

El bombardeo perfilado a gran escala reflejó un momento de alta tensión antes de la entrada en vigor del alto el fuego. Las operaciones, que cubrieron un total de aproximadamente 330 objetivos, representaron un intento enfático de debilitar la infraestructura militar de Hezbollah.

Las FDI afirman que pasaron varias horas bombardeando el sitio subterráneo de un kilómetro de largo, indicaron, reflejando el nivel de detalle y preparación invertido en estas misiones.

Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) continúan su preparación y estado de alerta para defender al estado israelí de cualquier amenaza, como señala la fuente. En las recientes operaciones, bajo la dirección de la División de Inteligencia y el Comando Norte, se llevaron a cabo ataques aéreos en el Líbano y a lo largo de carreteras de tránsito entre Siria y Líbano. Estos ataques nocturnos tuvieron como objetivo decenas de infraestructuras militares y sitios utilizados por la organización Hezbollah, entre ellos cuarteles generales, almacenes de municiones, lanzadores y edificios militares.

En Beirut, los aviones de combate impactaron una estructura vinculada a una unidad de misiles costeros de Hezbollah, junto con sitios de producción de municiones y otros cuarteles de esta organización terrorista, según la fuente. Además, las rutas de tránsito empleadas para transferir armas hacia Hezbollah fueron igualmente atacadas, como parte de un esfuerzo sostenido para evitar su fortalecimiento.

Particular atención se dio a las acciones en Tzur y Nabatia, en donde las FDI se enfocaron en cuarteles generales y activos militares conectados con la unidad ‘Aziz’, la unidad ‘Badr’ y la fuerza ‘Radoan’ de Hezbollah. Estos ataques formaron parte de las directrices de inteligencia que dirigieron los esfuerzos militares.

También, en un esfuerzo por minimizar el riesgo a la población civil, las FDI implementaron medidas preventivas, emitiendo numerosas advertencias a la población en diversas plataformas, para reducir el potencial daño a civiles antes de iniciar los ataques.