Los presidentes de Rusia, Vladmir Putin, y de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, sostuvieron una conversación telefónica este domingo en la que discutieron la ampliación de su cooperación económica y comercial, así como temas clave de la agenda internacional, según comunicados oficiales de ambas partes.
El Kremlin destacó que ambos mandatarios dialogaron sobre la efectividad de la colaboración bilateral en el ámbito económico y comercial, poniendo énfasis en el proyecto conjunto para la creación de un centro de distribución de gas en Turquía. Este proyecto, que busca posicionar a Turquía como eje para la redistribución del gas ruso a terceros países, se acordó en octubre de 2022, con la región de Tracia Oriental como posible ubicación estratégica.
La Presidencia turca, por su parte, informó que Erdogan expresó su interés en “mejorar la cooperación en diferentes ámbitos, especialmente aumentando el volumen comercial”. Además, reafirmó el compromiso de Turquía para contribuir a los esfuerzos internacionales por poner fin a las tensiones en la región y apoyar los procesos de paz, en referencia al conflicto en Ucrania.
Aunque Turquía ha condenado la invasión rusa a Ucrania, mantiene una postura neutral en el conflicto y no se ha alineado completamente con las sanciones occidentales impuestas a Moscú, debido a su dependencia del petróleo y gas ruso. Este enfoque le ha permitido jugar un rol mediador en iniciativas como el intercambio de prisioneros entre Rusia y Ucrania.
La última reunión presencial entre Putin y Erdogan tuvo lugar a finales de octubre en la ciudad rusa de Kazán, durante la cumbre del grupo BRICS, donde Turquía expresó su intención de unirse a la alianza compuesta por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica.
Además de los temas económicos, la conversación telefónica incluyó asuntos internacionales en los que ambos países tienen intereses compartidos, como los conflictos en Oriente Medio, aunque persisten desacuerdos, especialmente respecto al uso de misiles de largo alcance por parte de Ucrania, una medida criticada por Ankara.
Esta interacción refuerza los lazos entre Moscú y Ankara en un contexto marcado por tensiones globales y la necesidad de cooperación estratégica en áreas clave como la energía y la estabilidad regional.
Ankara defiende públicamente la necesidad de que un acuerdo de paz entre Moscú y Kiev garantice la soberanía e integridad territorial de Ucrania, incluida la península de Crimea, y las fábricas turcas proveen a Kiev de drones armados, una importante arma en esta guerra. Pero al mismo tiempo, Turquía mantiene buenas relaciones políticas y comerciales con Rusia y no aplica las sanciones promulgadas por la Unión Europea.
Erdogan, pidió la semana pasada, desde la cumbre del G20 en Brasil, que la OTAN “reflexione” sobre la nueva doctrina nuclear de Rusia, que permite responder con armas atómicas a ataques convencionales.”En primer lugar, emplear armas nucleares en una guerra no tiene ningún aspecto positivo. Con los misiles que ha empleado últimamente Ucrania, se ve lo que ocurre, lo que podrá ocurrir. Esto desde luego no es nada positivo”, dijo el mandatario turco en una rueda de prensa.
“Pienso que es una medida de precaución de Rusia frente a una actitud hostil, frente a armas convencionales. Y pienso que las autoridades de la OTAN deberemos reflexionar sobre esta medida de Rusia, debemos examinar este paso de Rusia”, dijo Erdogan.
(Con información de AFP y EFE)