El Ejército israelí confirmó este jueves en un comunicado que lanzó nuevos bombardeos contra los suburbios de Beirut, horas después de que el mediador de EEUU, Amos Hochstein, llegara a Tel Aviv para negociar un alto el fuego entre Israel y el grupo chií libanés Hezbollah.
“Durante la noche, las Fuerzas de Defensa de Israel llevaron a cabo ataques basados en información de inteligencia contra objetivos terroristas de Hezbollah en la zona de Dahye (los suburbios del sur de Beirut)”, confirmó este jueves un comunicado castrense.
Los bombardeos alcanzaron centros de mando y otros sitios de infraestructura terrorista de Hezbollah, según el informe del Ejército.
La agencia de noticias libanesa precisó que se trató de tres bombardeos contra el barrio de Haret Hreik, en los suburbios del Dahye, objetivo frecuente de ataques, porque Israel alega que es un bastión de Hezbollah.
De acuerdo con este medio, los ataques se produjeron desde las 3:00 de la madrugada (01:00 GMT) y provocaron la destrucción de varios edificios, sin informar de más daños.
El portavoz en árabe del Ejército israelí, Avichay Adraee, había advertido en un mensaje previo en X de los ataques y recomendado a los vecinos de áreas de Haret Hreik especificadas en mapas que se alejaran a una distancia de no menos de 500 metros, una práctica habitual de las fuerzas de seguridad del Estado hebreo.
Los nuevos bombardeos se producen horas después de que Hochstein llegara a Tel Aviv para impulsar el acuerdo de alto el fuego entre Israel y Hezbollah, y los medios israelíes informaron la víspera de que el estadounidense se reuniría la noche del miércoles con el ministro de Asuntos Estratégicos, Ron Dermer.
El jueves se espera que se encuentre con el primer ministro, Benjamín Netanyahu, y el titular de Defensa, Israel Katz.
El Ministerio de Salud Pública libanés informó este miércoles del balance total de víctimas desde el estallido de la guerra con Israel hace más de un año y contabilizó 3.558 fallecidos y 15.123 heridos.
Los ataques se han intensificado desde el pasado 23 de septiembre, cuando Israel inició una campaña de bombardeos masiva contra diferentes puntos del Líbano que ha provocado la destrucción generalizada de decenas de aldeas del sur y del este del país, así como de los suburbios sur de Beirut.
El domingo un bombardeo israelí contra la capital libanesa mató al portavoz de Hezbollah, Mohamed Afifi, el último alto cargo del grupo chií fallecido en ataques de Israel los pasados meses, entre los que se incluye a Hasán Nasrala, el que fuera máximo responsable de la formación política y militar del movimiento.
El ataque de Hezbollah
El grupo chií libanés Hezbollah reivindicó este jueves el lanzamiento de una serie de cohetes contra concentraciones de soldados israelíes en la localidad meridional de Jiam, a unos seis kilómetros al norte de la frontera con Israel, cuyo ejército invade el sur del Líbano desde principios de octubre.
La formación armada dijo en un comunicado que sus combatientes lanzaron una gran cantidad de cohetes contra “una reunión de fuerzas de ocupación israelíes al este de la ciudad de Jiam”, donde se concentran los enfrentamientos terrestres entre Hezbollah y el Ejército israelí desde hace semanas.
El ataque fue efectuado sobre las 7.30 hora local (5.30 GMT) y fue seguido de otro con cohetes, que una hora después fue dirigido contra otro grupo de soldados destacado “en la puerta de Al Umrah, al sur de Jiam”.
Jiam, ubicada en el sureste del Líbano, es una de las principales localidades donde se desarrollan los combates entre Hezbollah e Israel, que mantiene su invasión terrestre iniciada la madrugada del 1 de octubre, aunque no ha logrado avances tangibles y solo ha conseguido adentrarse un máximo de siete kilómetros al norte de la divisoria, según diferentes fuentes.
Al principio de la ofensiva terrestre, Hezbollah recurrió más al uso de tácticas de guerrilla, como a la plantación de explosivos, pero posteriormente intensificó cualitativamente sus ataques y lanza incluso misiles balísticos contra posiciones del Ejército israelí en territorio libanés.
Esas acciones han provocado la muerte de decenas de soldados israelíes, pero también daños a instalaciones de la misión de mantenimiento de paz de la ONU en el sur del Líbano (FINUL).
La FINUL también ha denunciado ataques de Israel deliberados contra sus posiciones, que se han saldado con varios heridos.
Más de 3.500 personas han muerto y otras 1,2 millones se han visto obligadas a abandonar sus hogares para huir de la violencia en el Líbano iniciada hace poco más de un año, pero que se recrudeció hace dos meses tras el comienzo de una campaña de bombardeos sin precedentes de Israel contra diferentes puntos del Líbano.
(Con información de EFE)