Al menos una persona ha muerto este jueves en un ataque con proyectiles desde Líbano contra la localidad israelí de Nahariya, situada en el norte de Israel, en el marco de los combates desatados hace más de trece meses entre el Ejército y el partido-milicia chií Hezbollah, según han confirmado los servicios de rescate.
El servicio de ambulancias de Magen David Adom (Estrella de David Roja) ha señalado en un breve mensaje publicado en su cuenta en Telegram que la víctima tiene unos 30 años, antes de agregar que sus equipos lo localizaron “sin signos vitales” y que sólo pudieron confirmar su fallecimiento.
Hezbollah ha reivindicado en las últimas horas la autoría de varios ataques con proyectiles contra varios puntos situados en el norte de Israel. El Ejército israelí ha confirmado el disparo de decenas de proyectiles desde territorio libanés, sin pronunciarse por ahora sobre víctimas o daños materiales.
“Llegamos a un espacio abierto cerca de un parque infantil y vimos a un hombre de unos 30 años inconsciente con heridas de metralla. Tras una evaluación médica, lo encontraron sin signos de vida y lo declaramos muerto”, detalló en un comunicado el sanitario Dor Vaknin, del servicio de emergencias Magen David Adom (MDA).
Barak Lavi, un médico de United Hatzalah (un servicio voluntario de emergencias israelí) aseguró que testigos vieron cómo el hombre fue alcanzado por la metralla cuando cayó sobre el parque en el que se encontraba.
Según el Ejército, unos veinticinco cohetes fueron disparados contra esta ciudad en el norte, varios interceptados, donde casi cada día se activan las alarmas para que la población se refugie en los búnkeres próximos o de sus casas.
Ayer, un colono israelí de 71 años murió en el sur del Líbano, donde había penetrado de forma extraoficial acompañando a tropas del Ejército, según un comunicado castrense, que dijo que junto a él falleció también un soldado israelí en un enfrentamiento con militantes de Hezbollah en el sur del Líbano. La policía militar del Ejército está investigando las circunstancias del incidente.
La llegada de misiles y drones lanzados desde el Líbano contra el norte de Israel se ha incrementando, especialmente desde este pasado mes de septiembre tras el inicio de la campaña de bombardeos israelíes contra el sur y este del país que poco después dio paso a la ofensiva terrestre que todavía prosigue.
El Ministerio de Salud Pública libanés indicó que la cifra total de muertos desde el inicio de la guerra entre Israel y el Líbano - que comenzó el 8 de octubre de 2023-, ya supera los 3.500 y la de heridos roza los 14.600.
Del lado israelí, 78 personas han fallecido por ataques lanzados desde Líbano, de las cuales 48 eran civiles (6 de ellos extranjeros). Además, 46 soldados han muerto en combate en el sur del país vecino, además de un anciano colono que entró con las tropas sin permiso.
El alcalde de la ciudad de Nahariya pidió que Israel use más fuerza contra Hezbollah en el Líbano, tras cuatro muertos en esta urbe en el último mes.
“Ellos entienden el lenguaje de la fuerza, y la fuerza debe utilizarse”, dijo el edil, Ronen Marley, en una entrevista con la televisión pública Kan.
“El Estado está dormido de pie. Que vengan a Nahariya, vean los cadáveres en las calles, y entonces entenderán de qué estoy hablando”, añadió.
Además, urgió al primer ministro, Benjamín Netanyahu, y al mediador estadounidense Amos Hochstein -que se encuentra en Israel- a visitar Nahariya, urbe costera de cerca de 64.000 habitantes, para que entiendan de lo que habla.
“¿De qué sirve hablar de un acuerdo de alto el fuego? Aquí se está matando a los habitantes. Mientras no haya un acuerdo, la destrucción es necesaria. Si este bombardeo provocara la destrucción de 300 edificios en Beirut, [Hezbollah] entendería que la guerra tiene un precio”, enfatizó.
(Con información de Europa Press y EFE)